¿Cómo cambiar el alimento del perro paso a paso?

¿Cómo cambiar el alimento del perro paso a paso?

Cuando nuestro perro cambia de etapa vital, se le diagnostica algún problema de salud o, simplemente, queremos ofrecerle un alimento de mayor calidad que el que está consumiendo, es importante que tengamos en cuenta algunas recomendaciones para que el cambio resulte un éxito.

Darle otra comida de forma brusca podría llevar a un rechazo o a problemas a nivel gastrointestinal. Por ello, a continuación, en ExpertoAnimal, explicamos cómo cambiar el alimento del perro paso a paso.

¿Es malo cambiar de pienso a mi perro?

En primer lugar, debemos dedicar un tiempo a escoger el mejor alimento para nuestro perro. Ya sea pienso, comida húmeda, deshidratada o casera, tiene que cubrir sus necesidades nutricionales, por eso hay que buscar la calidad. Los perros, como carnívoros que son, requieren que su menú se componga, sobre todo, de proteína de origen animal. El resto de ingredientes pueden ser cereales, hortalizas, verduras, frutas, etc., pero no azúcares ni aditivos artificiales.

Si le estamos dando a nuestro perro un pienso de buena calidad y pasamos a uno peor, sí sería negativo el cambio, aunque el perro lo acepte bien. Podríamos notar que empeora el aspecto de su manto o que sus deposiciones son más abundantes y huelen peor, ya que el alimento tendrá menos nutrientes aprovechables y generará más desechos. Si la calidad es muy baja y las necesidades nutricionales del perro no se ven cubiertas, podrían aparecer problemas más graves de desnutrición, anemia o diferentes síntomas relacionados con carencias de vitaminas.

Al revés, si nos preguntamos qué pasa si le cambio el alimento a mi perro por uno mejor, notaremos beneficios, como mayor salud, pelaje más brillante o heces más pequeñas. Por lo tanto, es posible cambiar el alimento y no será negativo si se hace para mejorar la calidad, tratar una enfermedad y siempre siguiendo las pautas que explicamos en el siguiente apartado.

¿Cómo hacer el cambio de comida a un perro?

Un cambio brusco de alimento en perros está contraindicado, ya que podría provocar molestias a nivel digestivo, como pueden ser heces blandas o diarrea. Además, el perro puede rechazar el nuevo alimento si no se le da tras un período de adaptación. Si el cambio es entre distintos piensos el perro suele aceptarlo bien, salvo que se trate de un alimento de dieta o similar, que acostumbran a ser más insípidos. Pero cuando el perro está recibiendo comida casera y queremos darle pienso, es habitual que surja el rechazo.

Para evitarlo hay que ofrecerle su comida como siempre, pero cambiando aproximadamente un cuarto por el nuevo alimento. Tras un par de días, pasaremos a darle la mitad de cada comida. Otro par de días más tarde incrementaremos el nuevo menú hasta dejar en el comedero solo un cuarto del alimento antiguo. Este proceso gradual durará alrededor de una semana, tiempo suficiente como para que el perro se acostumbre al sabor y su organismo a los nuevos nutrientes. Así evitamos tanto el rechazo como los problemas de salud.

¿Cuándo cambiar el pienso de cachorro a adulto?

Como señalamos anteriormente, hay cambios en la etapa vital del perro que obligatoriamente llevan al cambio de pienso, pues las necesidades nutricionales se modifican y, por lo tanto, se hace imprescindible que la comida se ajuste a ello. El ejemplo más claro es el paso de cachorro a adulto. Pero hasta cuándo se le da alimento de cachorro a un perro no tiene una única respuesta. En general, el cambio del pienso de cachorro al de adulto se produce cuando el perro cumple un año, que es el momento en el que se considera que concluye su crecimiento. Pero se sabe que las razas más grandes y gigantes continúan creciendo hasta los 18 e incluso los 24 meses. Por lo tanto, el cambio al pienso de adultos también se retrasa. Ante cualquier duda, lo mejor es consultar con el veterinario.

Para que nuestro cachorro acepte bien el cambio de comida, nuestro consejo es, además de hacerlo gradualmente, hacerlo entre piensos de la misma marca, siempre y cuando se trate de piensos de calidad. Un ejemplo de ello son los piensos KOME, una marca de piensos 100 % naturales que cuentan con diversas variedades, como:

  • Pienso para cachorros de pollo y arroz.
  • Pienso de salmón, frutas y verduras.
  • Pienso de pollo y cordero.
  • Pienso sin cereales de pollo, atún y verduras.
  • Pienso para perros mini de pollo y salmón.

Al hacer un cambio entre piensos de la misma marca, puesto que estos contarán aproximadamente con los mismos componentes, será más fácil que el can asimile mejor el cambio de alimento. Si quieres obtener más información sobre esta marca de piensos española, puedes leer este otro artículo sobre Pienso KOME – Composición, ingredientes y opiniones.

Por otra parte, otro cambio en la etapa vital se produce cuando el perro pasa de adulto a anciano. Este momento oscila entre los 7 y los 10 años, también en función del tamaño. Cuanto más grande es un perro, antes envejece.

Le cambié la comida a mi perro y no quiere comer, ¿por qué?

En ocasiones el cambio de comida no resulta exitoso. En la mayoría de los casos, se debe a que la nueva no se ha ofrecido según la pauta gradual o al perro se le dan recompensas comestibles al margen del menú. Por ejemplo, si al perro se le proporciona comida casera, va a rechazar el pienso y será capaz de pasar incluso varios días sin comer, esperando ese trocito de pollo o de lo que sea que le demos porque nos da pena. En ese caso, tendremos que ser muy estrictos y no ofrecerle nada más que su pienso. Ponle la cantidad de comida adecuada según su peso en el comedero y déjala a su disposición solo unos 10-15 minutos. Después retírala y no le des nada hasta la siguiente comida. El número de raciones diarias dependerá de la edad del perro. En cualquier caso, dale de comer siempre a la misma hora. Es muy importante establecer una rutina.

Cuando el rechazo se produce a un pienso que el perro tiene que comer obligatoriamente porque padece alguna enfermedad, podemos recurrir a algunos trucos para hacerlo más atractivo, siempre consultándolo con el veterinario. Por ejemplo, podemos humedecerlo con agua tibia o caldo casero de verduras, carne o pescado.

Le he cambiado el pienso a mi perro y tiene diarrea, ¿qué hago?

Si el cambio de pienso ha sido brusco, es posible que el resultado sea una diarrea. En ese caso, hay que iniciar la pauta de administración gradual de la nueva comida que hemos explicamos en apartados anteriores, siempre y cuando se trate de una diarrea puntual en un animal sano. Cuando el perro es cachorro, anciano, padece ya alguna enfermedad, la diarrea se prolonga varios días o el animal muestra otros signos clínicos como deshidratación o vómitos, hay que consultar con el veterinario. Es este profesional quien debe valorar si hay que establecer algún tratamiento contra la sintomatología que presente el perro, como sueroterapia, antidiarreicos, antieméticos, etc. Además tendrá que descartar que exista alguna enfermedad y establecer si es necesario o no que, hasta que se recupere el sistema digestivo, el perro consuma un alimento especialmente formulado para trastornos gastrointestinales.

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