¿Cómo cuidar a un perro con hidrocefalia?

La hidrocefalia es una malformación en la cual se acumula abundante líquido cefalorraquídeo en el sistema ventricular del encéfalo. Este acumulo, hace que los hemisferios cerebrales aumenten de tamaño y, como consecuencia, el propio cráneo aumente también. Según la localización de este líquido, se clasifica en hidrocefalia interna, externa o comunicante.

Los animales que la poseen se caracterizan por un físico característico:

• Cráneo abombado.
• Cráneo redondeado.
• Cráneo prominente
• Estrabismo bilateral.

Tipos de hidrocefalia en perros

La hidrocefalia en perros puede darse de forma congénita o adquirida:

• Hidrocefalia congénita: hay razas que la presentan de esta condición de manera congénita, siendo la malformación congénita más frecuente del sistema nervioso en los animales domésticos. Ejemplo de razas caninas hidrocefálicas son los perros de pequeño tamaño y braquicéfalos, como los chihuahuas, pomerania, shih-szu, etc.
• Hidrocefalia adquirida: menos frecuente es la hidrocefalia adquirida, aunque también se puede dar en nuestra mascota como consecuencia sobretodo de traumatismos fuertes en el cráneo.

Como curiosidad, apuntaremos que hay gatos siameses que la padecen o la adquieren debido a enfermedades víricas, como la peritonitis infecciosa felina.

Para más información, puedes consultar este otro artículo de ExpertoAnimal sobre Hidrocefalia en perros - Síntomas, pronóstico y tratamiento.

Para tener las nociones de cómo cuidar a una perro con hidrocefalia, vamos a describir los síntomas que puede presentar un perro que padezca esta enfermedad:

• Convulsiones.
• Estupor/coma.
• Se olvida de comportamientos aprendidos (disfunción cognitiva).
• Camina en círculos (disfunción vestibular).
• Presiona la cabeza contra la pared (head-pressing).
• Desarrolla comportamientos agresivos.
• Estrabismo.
• Ceguera.

Todos estos síntomas son comunes a otras enfermedades, por lo que es muy importante un correcto diagnóstico diferencial.

El diagnóstico y la prevención de la hidrocefalia en perros dependerá en gran medida del tipo de hidrocefalia canina de la que estemos hablando.

Hidrocefalia congénita en perros

Si se trata de una hidrocefalia congénita, la presentará antes de los 6 meses de edad.

Para alcanzar un diagnóstico definitivo se debe tener en cuenta la historia clínica del animal, pruebas de imagen avanzadas y la predisposición de ciertas razas. Además, hay que revisar que el perro no tenga otra malformación congénita.

Una forma de evitar esta patología congénita es mediante la cría responsable con animales sanos.

Hidrocefalia adquirida en perros

Cuando se sospecha de hidrocefalia adquirida, hay que buscar las causas primarias: traumatismos, infecciones, inflamaciones, neoplasias, etc

Así pues, una buena alimentación, vacunación, desparasitación, evitar la exposición a tóxicos, etc. reducirán las posibilidades de padecerla.

Si tu perro anda raro, puedes echar un vistazo a este otro artículo sobre Ataxia en perros - Causas y tratamiento.

Los cuidados médicos que requiere un perro con hidrocefalia se basan en un tratamiento de los signos clínicos que presente como consecuencia del aumento de presión intracraneal. El aumento considerable del volumen de líquido ejerce una gran presión desde el interior sobre el tejido nervioso, con lo cual se produce su degeneración y destrucción.

Al generar cuadros neurológicos, su cuidado y tratamiento se centra en frenar mediante fármacos/técnicas quirúrgicas las convulsiones, somnolencia, ceguera, incoordinación, pressing, etc. Nuestro veterinario propondrá un tratamiento y nos indicará si se requiere la hospitalización y pruebas complementarias. No obstante, por otro lado, los cuidados de manejo que podemos llevar a cabo nosotros en casa son:

• Evitar en la medida de lo posible los saltos desde superficies que se encuentren a una altura considerable.
• Controlar los juegos bruscos con otros animales y personas.
• Tratar con delicadeza el cráneo cuando llevamos a cabo hábitos higiénicos, como baños, limpieza de dientes, limpieza auricular y limpieza ocular.
• Ante cualquier síntoma nervioso que presente, acudir al veterinario para que no vaya a más y tenga un mejor pronóstico.
• Si además presenta las fontanelas abiertas, tener cuidado con su manipulación.
• Enriquecimiento del ambiente mediante juegos y técnicas de aprendizaje.
• Hay perros con hidrocefalia congénita que no presentan síntomas a lo largo de su vida. Eso no quiere decir que no la tengan de forma subclínica y hay que vigilar que no desarrollen síntomas.
• Evitar los collares en los paseos, mejor con arnés.
• Alimentación equilibrada.
• Protocolo vacunal y antiparasitario al día.
• Control de otras enfermedades.
• Complementos nutricionales que ayuden en la disfunción cognitiva.

Si tienes un chihuahua con hidrocefalia, puede que te interese este otro artículo sobre 10 curiosidades sobre los chihuahuas.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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