Actualmente, yorkshire terrier es un perro muy popular como perro de compañía, no obstante, en el siglo XIX cumplía funciones muy distintas. Algunos perros de esta raza (y de cualquier otra) pueden presentar problemas de comportamiento, como puede ser la agresividad canina. ¿Qué causas la provocan? ¿Cómo debemos actuar?
En este artículo de ExpertoAnimal hablaremos sobre cómo educar un yorkshire agresivo. Así pues, si has notado un cambio de carácter últimamente, conductas agresivas hacia otros perros o hacia ti es muy importante que empieces cuanto antes con un proceso de educación para evitar que los problemas vayan a más y se cronifiquen.
¿Los yorkshire son agresivos?
No es correcto asociar ciertas razas caninas con la agresividad, no obstante, sí podemos hacerlo con la genética. Aunque no es determinante y no siempre se produce, un cachorro descendiente de progenitores con agresividad tiene una mayor predisposición a desarrollar también agresividad. Aún así, hablaríamos de un porcentaje muy reducido de los casos, ya que de forma general este problema de comportamiento aparece tras un problema en la socialización del cachorro o causas relacionadas con el aprendizaje.
Durante las primeras etapas de vida de un perro es imprescindible practicar la socialización. Es una etapa sensible en el que nuestro perro aprende a relacionarse con las personas, con otros perros y con los objetos que le rodean. Cuando lleva a cabo relaciones sociales positivas de forma regular, nuestro perro comprende cómo actuar y desenvolverse en las situaciones diarias que le rodean.
No obstante, y a pesar de haber recibido una buena socialización, algunos perros empiezan a mostrar conductas "agresivas". Las causas pueden ser muy diversas:
- Problemas de socialización
- Miedo
- Traumas
- Genética
- Problemas de salud
- Ansiedad y estrés
- Sexualidad
- Etc.
Cachorro de yorkshire agresivo
Es especialmente importante actuar con rapidez si nuestro yorkshire agresivo es un cachorro, especialmente si tiene entre 2 y 3 meses de edad, ya que en este momento tenemos más probabilidades de éxito que en un adulto. No obstante, no te preocupes si tu perro yorkshire es adulto, si trabajamos de forma adecuada aún estamos a tiempo de modificar su comportamiento.
¿Por qué mi yorkshire es agresivo?
El yorkshire terrier a pesar de su pequeño tamaño es un perro curioso y muy valiente. Para tratar adecuadamente el problema deberás ser muy observador y analizar que problema de conducta sufre tu perro:
- Enfermedades: antes de valorar siquiera un problema conductual, debemos acudir a nuestro veterinario para descartar cualquier tipo de enfermedad o problema de salud. El dolor, el hipotiroidismo o muchas otras patologías pueden favorecer el desarrollo de comportamientos agresivos.
- Socialización: ya te hemos explicado en qué consiste esta etapa sensible, que se produce entre las cuatro semanas de vida y los dos meses. Un perro que no entiende cómo es el lenguaje canino, que no sabe las normas básicas del juego o que es incapaz de relacionarse con un niño es potencialmente susceptible a desarrollar miedos, inseguridad y, por ende, conductas agresivas.
- Estrés y ansiedad: la vida en una perrera o el incumplimiento de las cinco libertades del bienestar animal pueden hacer que tu yorkshire se sienta inseguro, estresado y con mucha ansiedad. En estas condiciones un perro no puede ser entrenado así como tampoco puede relacionarse correctamente con otros perros o personas. Debes propiciar un entorno tranquilo, estable y feliz al menos durante 30 días antes de pensar siquiera en su reeducación.
- Miedo: si tu perro ha sufrido una experiencia negativa con otro can, es probable que ladre o se muestre agresivo por miedo. En estos casos será imprescindible no forzar nunca a nuestro yorkshire a interactuar si no lo desea, debemos dejarle espacio para que él mismo empiece a relacionarse. Puedes propiciar esta situación quedando con perros muy sociables y paseando juntos a una distancia razonable para evitar cualquier conflicto.
- Sexualidad: algunos perros pueden tener conductas "agresivas" con otros si no están castrados. Además de muchas ventajas que supone la castración (en las que incluimos un menor riesgo de desarrollo de ciertas enfermedades), la esterilización de las mascotas nos permitirá disfrutar del juego entre ejemplares del mismo sexo una vez finalizada la adaptación.
- Protección de recursos: el perro "protege" de forma agresiva algo que considera de su propiedad, ya hablemos de una persona, un comedero o una habitación entera.
Por supuesto existen muchas otras causas que pueden provocar agresividad en el perro, sin embargo, estas son las principales y más importantes. En el caso de no saber identificar qué puede estar ocurriendo lo más aconsejable será dirigirnos a un veterinario especializado en etología, la figura que mejor nos puede ayudar a diagnosticar y tratar este problema de comportamiento.
¿Cómo tratar la agresividad en un yorkshire terrier?
Es fundamental saber por qué nuestro yorkshire es agresivo antes de empezar a trabajar el problema o aplicar cualquier tipo de pauta. De lo contrario, existen muchas probabilidades de que no solucionemos el problema y que, de hecho, lo empeoremos. En este sentido, acudir a un profesional es la mejor estrategia, ya que solo el especialista puede proporcionarnos pautas concretas adaptadas a nuestro caso y realizar sesiones regulares de modificación de conducta en las que el perro aprenda conductas más positivas.
No obstante, mientras esperas a contactar con el profesional, puedes empezar a tratar los problemas que sufre tu perro siguiendo estos consejos básicos:
- Evita los desencadenantes: si tu perro te muerde cuando le regañas, deja de hacerlo inmediatamente. Es probable que no te estés comunicando correctamente con él o que estés aplicando técnicas de educación que favorecen que el perro reaccione de forma negativa. Por ejemplo, evita regañarlo por subir al sofá y apuesta por felicitarlo cuando baje.
- Mejora su calidad de vida: aumentar el número de paseos (o hacer que sean más largos y relajantes), realizar ejercicio físico o dedicarle cada día un tiempo especial para jugar con él son opciones que nos ayudarán a mejorar nuestro vínculo y a bajar sus niveles de estrés.
- Practica obediencia canina: comunicarte con tu perro de forma efectiva es básico para ayudarle a evitar ciertas conductas indeseadas. Practica diariamente sesiones de 5 minutos de duración utilizando únicamente el refuerzo positivo. Cuando tu perro se muestre agresivo podrás pedirle un tumbado o sentado, órdenes básicas para perros, que pueden ayudarte a calmar al individuo o redirigir su conducta.
- Toma medidas de seguridad: aunque el yorkshire no es un perro especialmente grande, su mordedura puede provocar daños graves en niños y adultos, por ello, toma siempre las medidas de seguridad pertinentes y evita cualquier situación que pueda ser grave. En este sentido, trabajar el uso del bozal y tramitar un seguro de responsabilidad civil pueden ser medidas básicas.
Ahora ya sabes algunos pasos básicos para empezar a trabajar este problema de conducta y que la solución definitiva pasa por las manos de un profesional. ¡No olvides compartir con nosotros tu experiencia!
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