¿Cómo elegir un buen pienso para perros?

En general, conocemos los piensos para perros como el alimento que se fabrica sometiendo los ingredientes a un proceso de extrusión en el que pierden el agua y resultan unas bolas de mayor o menor tamaño, también llamadas croquetas, que pueden conservarse en buen estado durante largos períodos de tiempo. Pero en la actualidad también podemos encontrar piensos que, en vez de bolitas, forman pellets, tras un proceso de prensado en frío, menos agresivo con los nutrientes que el extrusionado.

No obstante, hay otras clasificaciones para el pienso. La que más nos interesa a la hora de saber cómo elegir un buen pienso para perros es la que hace referencia a la calidad de los ingredientes utilizados. Así, se distinguen los que se han denominado como piensos naturales y holísticos, que se van a diferenciar por no contener ingredientes artificiales y sí materias primas de primera calidad, al punto de que emplean carne apta para el consumo humano. Esta va a proceder de animales que viven bajo determinadas condiciones que garantizan su bienestar e incluso hay piensos orgánicos todavía más exigentes con la procedencia de las materias primas y la ausencia de pesticidas y de cualquier añadido artificial.

Además, últimamente se está poniendo muy de moda otro tipo de piensos para perros, que son los que no contienen cereales. Se basan en que los perros no digieren bien estos hidratos de carbono y los sustituyen por los procedentes de legumbres, como puede ser el guisante. En esta línea hay que diferenciar también los piensos específicos para perros con alergias o intolerancias alimentarias. Estos se fabrican generalmente con una única proteína e ingredientes poco habituales, ya que para estos trastornos es importante darle al perro alimentos que no haya consumido con anterioridad. Por ejemplo, pueden encontrarse piensos a base de salmón o carne de potro o pato acompañada de boniato o patata.

También son muy importantes todas las variedades de pienso especialmente formuladas para perros que padecen distintas enfermedades, como la insuficiencia renal, hepática, la diabetes, los problema de movilidad, de corazón, urinarios, etc. En estos casos, el pienso se considera una parte fundamental del tratamiento, siendo más importante, en esta situación, su eficacia antes que el listado de ingredientes.

Por supuesto, también hay diferentes tipos de pienso para perros en función de las distintas características de nuestro perro, por ejemplo:

• Su etapa vital: hay pienso para cachorros, adultos y senior, en ocasiones diferenciando perros mayores y muy mayores. También podemos encontrarnos con piensos válidos para todas las edades.
• Su actividad: para perros muy activos o de trabajo en oposición a los de mantenimiento.
• Su peso: los hay para perros obesos, con sobrepeso o para conservarlos en el peso ideal.
• Su tamaño: las dimensiones de la croqueta pueden adaptarse a la talla del perro, habiendo pienso para ejemplares de tamaño mini, pequeño, mediano, grande o muy grande.
• Su complexión: podemos encontrar gamas para perros de formas más atléticas o, al contrario, más robustas.
• Su raza: hay piensos especiales para perros en función de su raza, con una forma de croqueta y una composición adaptada a sus necesidades específicas, como el bóxer, el bulldog francés, el golden, el labrador, etc.

Ya hemos ido avanzando algunas claves necesarias si eres de los que te preguntas cómo elegir un buen pienso para perros. En este apartado vamos a profundizar en la composición ideal de un pienso para perros. Como animales carnívoros que son, el primer ingrediente tiene que ser la proteína de origen animal. Esto es, carne o pescado. Por eso, a la hora de seleccionar un pienso, además de fijarnos en que se trate de la gama adecuada para las características de nuestro perro, hay que acudir a la lista de ingredientes. El problema es que la legislación permite que algunos componentes o procesos no se especifiquen tanto como nos gustaría. Por ejemplo, podemos encontrarnos con piensos hechos a base de subproductos de origen animal, sin que sepamos qué es lo que contienen exactamente. E incluso esta composición puede variar de un saco a otro en los piensos de gama blanca, que son de una menor calidad.

En cualquier caso, debemos buscar que el primer ingrediente sea carne o pescado, mejor deshidratada, ya que la que se añade fresca durante el proceso de extrusionado va a perder el agua, llegando al perro, en realidad, aproximadamente la mitad de lo que se declara, salvo que se indique lo contrario. Por supuesto, será mejor el pienso que mayor porcentaje de carne contenga y la calidad aumentará según la procedencia de esa carne. Como hemos dicho, no toda la información va a reflejarse en el listado de ingredientes, pero podemos revisar la web del fabricante o incluso contactar con él para resolver nuestras dudas.

Por otra parte, últimamente existe la tendencia a considerar mejores los piensos sin cereales. Esto se debe, en gran medida, a que se considera que los perros no consiguen digerirlos. Pero lo cierto es que muchos sí pueden formar parte de su dieta, aunque siempre en una menor proporción que la carne.

El resto de ingredientes serán muy variables y podremos encontrar legumbres como los guisantes o las lentejas, verduras como la zanahoria o la calabaza, frutas como la manzana o los arándanos, así como ácidos grasos esenciales, vitaminas y minerales. Lo importante es que entendamos la composición, es decir, que se trate de productos naturales bien reconocibles y no de largos listados de aditivos artificiales, como pueden ser los colorantes, que no aportan ningún beneficio a nivel nutricional.

Por último, además de tener en cuenta estas recomendaciones, es fundamental que observes a tu perro. El pienso que escojas no solo le tiene que gustar, sino que debes notar que está en su peso ideal, en buen estado de salud, vital, sus deposiciones son compactas, bien formadas y con poco olor y presenta un manto sano y brillante. Todos estos factores son indicativos de que el pienso que das a tu perro es de calidad y bueno para su organismo. Si, por el contrario, las heces son muy blandas o muy duras, su olor es más fuerte que de costumbre, su pelo no tiene vitalidad, ha engordado o adelgazado, etc., deberás revisar su alimentación y acudir al veterinario.

Ahora que ya sabes cómo elegir un buen pienso para perros, seguro que te haces una idea de dónde puedes encontrarlo. Los piensos de supermercado o marcas blancas no suelen cumplir con los parámetros que hemos indicado y muchos de ellos presentan un exceso de cereales que llevan a que el perro necesite consumir más cantidad, eliminando también más deposiciones debido a su peor aprovechamiento.

Sí puede encontrarse calidad en clínicas veterinarias y en establecimientos dedicados a los animales de compañía tanto en tiendas físicas como a través de Internet. Por ejemplo, en la web de Animalnatura.com trabajan solo con alimentación natural y holística, tanto piensos secos como comida húmeda. De esta forma, si buscas un lugar de confianza para adquirir un buen pienso para tu perro, de calidad y con variedad de marcas que te permitan escoger el que mejor se adecúe a tu compañero, puedes pasarte por esta tienda online y consultar su catálogo.

Si deseas leer más artículos parecidos a ¿Cómo elegir un buen pienso para perros?, te recomendamos que entres en nuestra sección de Dietas equilibradas.

¿Tienes contratado el Seguro de Responsabilidad Civil obligatorio para perros? Consiguelo al mejor precio rellenando el formulario con tus datos y los de tu mascota haciendo clic en este botón: