Cómo entrenar a un perro en 10 pasos

Cómo entrenar a un perro en 10 pasos

No hay nada más frustrante y peligroso que un perro que no obedezca. Te planteo una situación: miras el reloj y te das cuentas de que llevas de paseo una hora. Tu cachorro ha corrido muchísimo detrás de su pelota, ha jugado con otros amigos peludos y está, en estos momentos, echado en el suelo con la lengua fuera. Piensas que ha llegado el momento de volver a casa, lo llamas, pero no se mueve. De hecho, apoya la cabeza en el suelo mientras te sigue mirando. ¿Podría ser qué no te hubiese oído? Vuelves a llamarlo...

No te voy a contar el final de esta historia, porque lo más seguro es que tú mismo la hayas sufrido. Por este motivo es tan importante entrenar a un perro, no sólo no perderás horas en un parque llamándolo, sino que se convierte en un auténtico peligro. Es importante para su propia seguridad, para la de otros animales y para la de las personas (incluido tú mismo).

Tanto si tienes un cachorro, como si es un poco más mayor, debes ponerte ya manos a la obra. ¿Qué es lo primero que debes hacer? Leer este completo manual de adiestramiento canino que te ofrece ExpertoAnimal para saber cómo entrenar a un perro en 10 pasos.

1. Hazte preguntas sobre cómo quieres educar a tu mascota

No, no es absurdo lo que te acabo de comentar. Todos queremos que nuestro perro acuda a nuestra llamada, que se siente, no muerda, dé la pata... pero no, no me estoy refiriendo a todas esas órdenes que queremos que aprenda. Antes de empezar con el entrenamiento, pregúntate lo siguiente:

  • ¿Dónde voy a querer que duerma?
  • ¿Voy a dejar que se suba a los sofás y a las camas?
  • ¿Va a poder acceder a todos los sitios de la casa?
  • ¿Comerá en el mismo sitio que nosotros?

Si tu cachorro acaba de llegar a casa, en lo único que eres capaz de pensar es en sacarle fotos para subirlas al facebook y en hacerle cosquillas y mimos infinitos. No te avergüences, son adorables. Por esto, es tan importante tener ahora claras ese tipo de cuestiones básicas.

Mientras es un cachorro no te importará que se suba en ningún lado, si se come un mantel te hará una gracia tremenda; pero, ¿querrás que se comporte así cuando sea más mayor? Seguro que recuerdas a Beethoven, ese precioso San Bernardo de la película... pues imagínatelo en tu casa.

Tu mascota no va a entender que no le permitas hacer algo que lleva haciendo durante meses sin problema. Ten claras cuáles van a ser las reglas de convivencia para tu perro y aplícalas desde el primer día.

2. Toda la familia debe entrenar igual al perro

La llegada de un amigo peludo va a llenaros de felicidad a todos, de eso no cabe duda; pero también, de responsabilidades.

Si tú quieres que el cachorro duerma en la cocina, pero tu hijo lo secuestra a hurtadillas y se lo lleva a la cama, sólo conseguiréis generarle confusión. Nuestra mascota no entenderá por qué con unos sí y con otros no. Esto solo nos conducirá a una mala educación para nuestro perro.

Todos los integrantes de la familia deben tener claras las normas que debe obedecer el perro. Lo ideal es que entre todos decidáis cuál va a ser la conducta a seguir.

  • Consejo extra: haced una lista y pegarla en la nevera. ¡Así no habrá olvidos repentinos!

3. Educa a tu perro para que aprenda a reconocer su nombre

Nos encontramos ante otro paso muy importante: el enseñar a un cachorro a reconocer su nombre. Debes tener en cuenta que el tiempo que tarda un perro en aprender su nombre es, de media, entre 5 y 10 días.

Ten paciencia, piensa que estás empezando a aprender a comunicarte. Es normal que al principio sea más complicado.

Una buena manera de empezar este adiestramiento es llamándole cuando tengáis contacto visual y siempre, con el refuerzo del premio. De ahí, continúa los ejercicios cuando ya no te esté mirando.

  • Truco de adiestramiento: Si no te obedece, no merece la pena llamarlo muchas veces. Distrae su atención con algo durante unos segundos y vuelve a empezar.

4. Educa a tu perro para que aprenda a estar con otros

Se trata de un paso muy importante, ya que saber cómo socializar a un perro hará que nuestra mascota se relacione correctamente con los demás perros y personas. Si lo piensas, es muy lógico. Si en los primeros meses de vida de tu cachorro solo lo tienes en casa, cuando salga a la calle por primera vez, lo normal es que tenga miedo.

Es muy bueno que en esos primeros meses pasees con tu mascota por distintos sitios. No solo le va a enseñar cómo debe moverse por la ciudad, sino que verá que existen muchos tipos de personas, coches, bicis, carritos de bebés... Al principio, tu cachorro puede ser tímido, no te preocupes, cogerá seguridad en sí mismo muy rápido.

Aunque tu mascota se haya hecho un poco más grande, para educar a un perro adulto sólo hay que hacer lo mismo, pero con más paciencia.

5. Debes enseñar a tu mascota cómo morder

Al mismo tiempo que tu cachorro descubre que el mundo es muy grande y hay una cantidad infinita de misterios por descubrir, debe aprender a comunicarse.

Nuestro perro va a interactuar con nosotros por medio de su boca. No solo juegan fingiendo que muerden, atrapan objetos con su boca; sino que también, nos los dan con ella. Es importante que aprendan a controlar su manera de morder antes de los 4 ó 5 meses, ya que después, se vuelve más complicado.

El sistema es muy sencillo, debes permitirle que muerda puesto que esta desarrollando sus dientes pero es fundamental que utilice juguetes y mordedores. Para enseñarle la diferencia también deberás utilizar tu mano en los juegos y, en cuanto presione un poco más fuerte, páralo y aléjate de él.

  • Ojo: los dientes de los cachorros son puras agujas, ten cuidado.

6. Cómo adiestrar a tu cachorro en positivo

A lo mejor no lo sabes, pero está demostrado que es más eficaz adiestrar reforzando las conductas positivas, que evitando las negativas. Si a tu perro solo lo riñes por una mala conducta y no le valoras lo que hace bien, se desmotivará. Eso no significa que nunca lo riñas, pero debe aprender lo que está bien y lo que está mal.

Todos relacionamos el premiar con dar una golosina a un perro. Efectivamente, es un refuerzo estupendo, pero no es el único que debemos usar:

  • Las caricias: hemos llamado a nuestro perro y ha venido, sonríe y acaríciale el lomo.
  • Los halagos: acaba de obedecer una orden, dedícale unas palabras bonitas en un tono de voz dulce.

Sigue informándote sobre este tipo de educación siguiendo el refuerzo positivo. Es sin duda la práctica que recomiendan los profesionales: etólogos y educadores caninos.

  • Truco de adiestramiento: puedes empezar a adiestrar al perro con golosinas, a medida que vaya aprendiendo, puedes sustituir la golosina por caricias y halagos.

7. No tengas un entrenamiento contradictorio

Nos encontramos ante un fallo clásico a la hora de educar a un perro: reñirle cuando ha hecho algo bien. Tras leer eso, seguro que has pensado: "Si mi perro hace algo bien, lo premio".

Imagínate que ya piensas que tu perro te va a obedecer siempre cuando lo llames.

Bajáis al parque, estáis jugando con la pelota un buen rato hasta que te llaman por teléfono. Debes volver a casa. Llamas a tu perro, pero no viene. Lo vuelves a llamar, sigue sin venir. Te impacientas. Vuelves a llamarlo, nada. Te enfadas. Llamas a casa para explicar que no puedes coger al perro (casi seguro que escuchas algo así: "ya te decía yo que le consentías mucho").

Al rato, el perro viene y cómo no, le riñes. Por desgracia, lo único que hemos conseguido es que la próxima vez tarde más en volver. Al principio, cada vez que lo llamemos siempre debe ser porque hay una respuesta positiva detrás.

  • Ojo: Debemos premiarlo cuando lo hemos llamado y ha acudido, no porque él quiera acercarse.

8. Enseña a tu perro a quedarse solo

Unos de las causas de mayor ansiedad y tristeza para nuestras mascotas es pasar mucho tiempo sin nosotros ya que se trata de animales sociales, necesitan compañía. Aún así es muy importante que nuestro perro aprenda a gestionar su soledad.

No es saludable que en las primeras semanas de convivencia con nuestra mascota, esté todo el tiempo con nosotros. Debemos hacer salidas de la casa, aunque sean cortas y por un período muy breve de tiempo.

En ocasiones, los perros adoptados de un refugio o cachorros que han sido separados prematuramente de sus madres sufren la conocida ansiedad por separación. Para intentar paliarlo podemos empezar a utilizar el kong para tratarla, la paciencia será nuestro mejor consejo (además de acudir a un profesional si es un caso muy grave).

9. Sesiones de adiestramiento cortas y en diferentes sitios

Enseñar al perro debe ser algo divertido para él y para ti. Por ello, es recomendable organizar sesiones cortas de trabajo, de unos 15 minutos cada una. Así, ninguno de los dos se aburrirá o se frustrará.

También es aconsejable que varíes el sitio de entrenamiento. La orden que obedece en casa, puede no seguirla en el parque. Cuanto más varíes los sitios y los momentos consiguiendo respuesta positivas, más fiable será el comportamiento de tu perro.

10. Aprende a reñirle adecuadamente

En algunos momentos, nuestro cachorro actuará de una manera inadecuada. Ya hemos comentado antes, que desde Expertoanimal recomendamos siempre el refuerzo positivo. No sólo va a ser mucho más divertido para tu perro y para ti, sino que aprenderá mejor y más rápido.

No obstante, si queremos que nuestra mascota entienda que algo no debe hacerse, bastará con decir la palabra “no”. Con nuestro tono se lo estamos diciendo todo, no hace falta alargarse en la regañina, tampoco gritar, ni hacer aspavientos. No os preocupéis, vuestro perro lo captará a la perfección sólo con esa palabra.

Si deseas leer más artículos parecidos a Cómo entrenar a un perro en 10 pasos, te recomendamos que entres en nuestra sección de Educación básica.

¿Tienes contratado el Seguro de Responsabilidad Civil obligatorio para perros? Consiguelo al mejor precio rellenando el formulario con tus datos y los de tu mascota haciendo clic en este botón: