¿Cómo evitar que mi hámster me muerda?

Existen distintas causas que pueden provocar que un hámster manifieste conductas agresivas hacia los humanos, principalmente tres: genética, socialización y aprendizaje. No obstante, aquellos ejemplares que padezcan dolor o alguna enfermedad, también pueden llegar a morder al tratar de evitar la interacción con los humanos.

Aquellos hámsteres que tienen como progenitores ejemplares que manifiestan agresividad, tienen más probabilidades de desarrollarla también en su etapa adulta. Pero además, una falta de socialización con las personas en las etapas más tempranas o una mala experiencia vivida, también pueden ser los motivos que expliquen por qué un hámster muerde.

Tanto si has sabido identificar la causa de este comportamiento como sino, a continuación te mostraremos algunos consejos básicos que puedes seguir para mejorar su bienestar y comportamiento, factores que mejorarán notablemente vuestra relación y su carácter.

Es totalmente comprensible que un hámster, tras la llegada a un nuevo hogar, no esté predispuesto a ser manipulado. Son animales independientes que, probablemente, temen al ser humano por su gran tamaño: es instintivo. Nosotros somos mucho mayor que ellos y, desde luego, son totalmente conscientes. Sin embargo, si utilizamos la paciencia y aprendemos a interactuar positivamente con ellos, tendremos más probabilidades de ganarnos su confianza y tener más acercamientos con ellos.

Si tu hámster roborowskii muerde, debes tratar de mejorar tu vínculo con él siguiendo estos consejos:

• Durante los primeros días deberás ofrecerle un entorno tranquilo y estable para que pueda habituarse al nuevo hogar sin estrés. Aunque tengas muchas ganas de tocarle y pasar tiempo con él, es importante respetar los tiempos de adaptación.
• Cuida el entorno y prepara la jaula para tu hámster de forma adecuada, asegurándote que dispone de espacio suficiente, juguetes y todos los accesorios necesarios para disfrutar de un estado de bienestar.
• No despiertes a tu hámster cuando esté durmiendo. Es muy importante que el pequeño roedor sea capaz de asociarnos de forma positiva, por ello, si le asustas, empezará a temerte. Respeta sus horas de sueño y relaciónate con él únicamente cuando esté despierto.
• Haz que se habitúe a tu presencia poniéndole comida dentro de la jaula y manipulando los accesorios cuando él esté dentro. Al principio no debes tocarle, solamente habituarle para que empiece a tolerar la presencia de tu mano en la jaula.
• Haz que muestre interés por ti hablándole con voz suave, ofreciéndole pedacitos de frutas recomendadas para hámsteres y respetando su espacio siempre que huya o se esconda.
• Realiza aproximaciones graduales, es decir, no intentes cogerlo sin previo aviso. Es mejor que, poco a poco, vayas realizando acercamientos con tu mano para que esté más habituado a ello.

Es importante resaltar que este proceso puede llevarnos días, semanas e incluso meses. Dependiendo de la causa que esté provocando la actitud agresiva de nuestro hámster podemos tardar más o menos tiempo. En cualquier caso, ser pacientes y actuar de forma positiva y calmada será clave para solucionarlo.

En ocasiones puede ocurrir que, tras ganarnos la confianza de un hámster, empiece a mordernos de forma intencionada, aunque al mismo tiempo juegue y se deje manipular sin ningún tipo de problema. ¿Qué significan entonces los mordiscos del hámster?

En estos casos debemos descartar que se trate de una causa orgánica, es decir, que nuestro pequeño roedor nos muerda debido a una enfermedad o dolor. Puedes palpar a tu hámster con suavidad e ir presionando con cuidado distintas partes de su cuerpo para descubrir si siente dolor en algún punto de su cuerpo. De ser así, la visita al veterinario de exóticos es obligada.

Por otro lado, también puede ocurrir que nuestro hámster nos muerda a modo de saludo. En estos casos hablaremos de una mordida suave y, tras ella, el hámster actuará con normalidad ante nuestra presencia, no intentará huir o esconderse.

Sea cual sea el motivo que causa la conducta agresiva, conocer algunas pautas básicas de manejo será algo fundamental para saber cómo evitar que mi hámster me muerda. Eso sí, durante los primeros días no debemos alejarnos ni retirar la mano, incluso si la mordida ha sido dolorosa, solo de esta forma entenderá que el mordisco no es una herramienta útil para que nos alejemos de él.

Aún así, manipularle mientras nos dejamos morder no es una buena opción, ni para nosotros ni para él, puesto que hará aumentar los niveles de miedo y ansiedad en nuestro pequeño hámster. En lugar de ello, debemos aprender a educar a nuestro hámster utilizando el refuerzo positivo y el castigo negativo:

• El refuerzo positivo: consiste en premiar un comportamiento que consideremos adecuado. Por ejemplo, si nuestro hámster muestra cierto interés en nosotros, podemos premiarle cada vez que se acerque a nuestra mano, de esta forma asociará nuestra presencia y su acercamiento con premios, por lo que habrá más probabilidades de que repita esa conducta.
• El castigo negativo: consiste en retirar algo agradable ante un comportamiento inadecuado. Por ejemplo, si estamos jugando con nuestro hámster en el sofá y nos muerde, le volveremos a colocar en la jaula y finalizaremos el juego.

Recuerda que las asociaciones no se producen de forma inmediata, se requieren varias repeticiones para que el animal pueda relacionar su conducta con el posterior refuerzo o castigo.

Algunas personas utilizan métodos erróneos y poco recomendables, como el castigo positivo, que no solamente no ayudan a mejorar la situación, sino que además la empeoran. A continuación te mostramos dos métodos inadecuados para corregir un hámster:

• Soplar en la cara del hámster cuando muerde: a priori puede parecer un castigo inofensivo, pero no es así. Aunque es posible que llegue a asociar el mordisco con este tipo de acciones, lo cierto es que también estará asociando nuestra presencia con una situación desagradable. También aumenta los niveles de ansiedad y estrés, provocando rechazo y miedo hacia nosotros.
• Darle algunos golpes en la cabeza: al igual que en el caso anterior, esta "técnica" provoca una mala asociación de nuestra presencia, malestar e incomodidad. Tampoco es positivo golpear a un animal tan pequeño precisamente por su reducido tamaño. Un exceso de fuerza podría herirle.

Para terminar, resolveremos algunas dudas frecuentes que se hacen algunos propietarios, no pierdas detalle:

• ¿Qué pasa si te muerde un hámster ruso? La mordedura de un hámster ruso no es peligrosa ni extremadamente dañina. Debes ser consciente de que los hámsteres pueden llegar a morder en alguna ocasión, pero si sigues nuestras pautas podrás solucionarlo de forma efectiva.
• ¿Los hámsteres nos pueden transmitir alguna enfermedad? Si bien es cierto que los roedores se asocian con patologías graves como la rabia, lo cierto es que un hámster doméstico tiene pocas probabilidades de contagiarse, especialmente si no tiene acceso al exterior. Descubre en ExpertoAnimal las enfermedades más comunes de los hámsteres.
• ¿Por qué mi hámster lo muerde todo? Al igual que muchos otros roedores, los hámsteres necesitan mordisquear para desgastar sus dientes, por ello, asegúrate de proporcionarle una pieza de calcio, juguetes de madera natural y otros tipos de materiales para roer específicos que encontrarás en comercios para mascotas.
• ¿Por qué mi hámster ruso muerde los barrotes de la jaula? Puede suceder si el tamaño de la jaula es excesivamente reducido y es una conducta consecuente del estrés y la ansiedad. También aparece si el hámster no dispone de elementos para roer.

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