¿Cómo limpiar las orejas de un gato?

¿Cómo limpiar las orejas de un gato?

Los gatos son animales extremadamente limpios que dedican buena parte de su día a las conductas de acicalamiento. Sin embargo, esto no significa que no necesiten nuestra ayuda de manera puntual para mantener un correcto grado de higiene. La limpieza de los oídos es un buen ejemplo de ello. De forma natural, la cera y la suciedad se van acumulando en la oreja y el conducto auditivo de los gatos, y si estos no se limpian adecuadamente, pueden aparecer problemas asociados. Por ello es importante realizar una limpieza rutinaria de los oídos de nuestras mascotas.

¿Te estás preguntando qué hacer si mi gato tiene las orejas sucias? Si es así, te recomendamos que nos acompañes en el siguiente artículo de ExpertoAnimal en el que explicaremos detalladamente cómo limpiar las orejas de un gato.

¿Cuándo limpiar las orejas de un gato?

El acúmulo de cerumen y suciedad en el conducto auditivo de los gatos puede causar una pérdida de su capacidad auditiva o incluso desencadenar un proceso inflamatorio o infeccioso. Para evitar estos peligros, es fundamental mantener una correcta higiene de las orejas y los oídos de nuestras mascotas.

Para ello, debemos realizar dos prácticas de manera rutinaria que nos ayudarán a saber cuándo limpiar las orejas de un gato:

  • En primer lugar, debemos examinar las orejas de nuestros gatos una vez a la semana: en este examen, debemos comprobar que no existe una cantidad excesiva de cerumen, que el oído no desprende un olor desagradable y que no existen lesiones (como enrojecimiento, descamación, heridas, costras, etc.). El pabellón auricular (es decir, la oreja) debe estar cubierto por pelo en la parte externa, y la piel de la cara interna debe estar limpia y presentar un color rosa claro. La alteración de cualquiera de los aspectos que hemos mencionado podrá ser indicativa de un proceso patológico y requerirá atención veterinaria.
  • En segundo lugar, debemos realizar una limpieza rutinaria de los oídos de nuestros gatos: en condiciones normales, lo recomendable es realizar una limpieza cada dos semanas, aunque en animales con una producción excesiva de cerumen o que estén atravesando algún proceso patológico, será necesario incrementar la frecuencia de las limpiezas (siempre bajo prescripción veterinaria).

Si llegados a este punto te estás preguntando “cómo limpiar las orejas de mi gato”, lee con atención el siguiente apartado, en el que explicaremos paso a paso cómo limpiar las orejas de un gato.

¿Cómo limpiar las orejas de mi gato?

Como hemos visto, mantener la higiene de los oídos de los gatos es fundamental para prevenir la aparición de patologías, pero ¿sabes cómo limpiar las orejas al gato correctamente? Te contamos a continuación cómo hacerlo paso a paso.

Escoge un lugar y un momento apropiado

La limpieza de los oídos puede resultar algo estresante para los gatos, especialmente para aquellos que no están acostumbrados a esta rutina. Por ello, es recomendable realizar la limpieza en una habitación tranquila, sin otros animales alrededor, y en un momento en el que el animal esté calmado. Si es un cachorro lo podemos colocar sobre nuestras piernas, en cambio, en el caso de gatos adultos es mejor situarlo sobre una banqueta o mesa que esté a nuestra altura.

En caso contrario, asociará este hábito de forma negativa y no lograremos que cada vez resulte más fácil sino que encontraremos en la higiene de las orejas un proceso cada vez más difícil tanto para nosotros como para nuestro gato. Te hablamos más del Estrés en gatos: síntomas y tratamiento, a continuación.

Revisa sus orejas externa e internamente

La presencia de parásitos, cera excesiva, olor fétido, costras o heridas nos puede estar indicando alguna patología como la otitis o la infección de oído, por lo tanto, ante estas señales lo más recomendable es que no demores en acudir al veterinario. Por el contrario, la ausencia de estos signos junto con un conducto auditivo de color rosa pálido nos indicarán un buen estado de salud.

Limpia por dentro el pabellón auricular

La limpieza de las orejas de los gatos debe comenzar retirando los restos de suciedad presentes en la parte del oído externo que vemos a simple vista: el pabellón auricular.

Para limpiar por dentro el pabellón auricular, utiliza una gasa limpia y seca y ve retirando los restos de suciedad y cerumen que se hayan ido acumulando en esta zona. Es preferible utilizar gasas en lugar de algodón, puesto que este último suele deshilacharse y dejar restos en el oído.

Nunca se deben utilizar bastoncillos para la limpieza de las orejas, ya que pueden empujar hacia dentro los restos de cera y favorecer la aparición de tapones. Además, ante un movimiento brusco del animal, pueden causar lesiones importantes (incluso la perforación del tímpano).

Aplica un producto limpiador de oídos

Una vez limpio el pabellón auricular, se debe proceder a la limpieza de la parte del oído externo que no vemos a simple vista: el canal auditivo externo. Pero ¿cómo limpiar las orejas a un gato por dentro?

Pues bien, para limpiar el canal auditivo externo, se deben usar productos especialmente formulados para la limpieza de los oídos de los gatos. Actualmente, existe en el mercado una gran variedad de limpiadores destinados a este fin, aunque todos ellos tienen un modo de empleo similar.

Generalmente, se deben aplicar unas gotas del limpiador en cada oído y después masajear con suavidad durante unos segundos en la base de la oreja para que el producto penetre y haga efecto. Pasados unos minutos, se deben retirar los restos de suciedad utilizando una gasa limpia.

Ahora que ya sabes cómo limpiar las orejas de los gatos en general, vamos a ver qué pasa si estos tienen ácaros.

¿Cómo limpiar las orejas de un gato con ácaros?

Si tu gato presenta un cerumen de color negruzco acompañado de un intenso picor de oídos, lo más probable es que esté sufriendo una otitis por ácaros. Las otitis por ácaros deben tratarse de manera específica con fármacos antiparasitarios, los cuales se pueden aplicar vía ótica (mediante gotas óticas) o vía sistémica/tópica (mediante pipetas o spot on).

En cualquier caso, antes de aplicar el fármaco antiparasitario, es necesario realizar una limpieza del oído externo para así garantizar que el tratamiento farmacológico penetra adecuadamente y es eficaz. La limpieza en estos casos debe realizarse de la siguiente manera:

  • El interior del pabellón auricular se puede limpiar con una gasa impregnada en suero fisiológico o clorhexidina (siempre diluida al 40%).
  • El canal auditivo externo se debe lavar con un limpiador ótico específico para gatos, siguiendo las mismas pautas que hemos comentado en el apartado anterior.

Cabe señalar que tanto la pauta de limpieza como el tratamiento antiparasitario deben ser siempre prescritos por un profesional veterinario. Como ya sabes cómo limpiarle las orejas a mi gato tanto si tiene ácaros como si no, quizás pueda interesarte echarle un vistazo al siguiente post de ExpertoAnimal sobre los Ácaros en gatos: síntomas, tratamiento y contagio.

¿Con qué limpiar las orejas a un gato?

Como hemos visto en apartados anteriores, lo único que necesitamos para realizar una buena limpieza de oídos son gasas limpias y un limpiador de oídos.

Actualmente, existe en el mercado una amplia gama de productos formulados para este fin. Todos ellos actúan disolviendo el cerumen y la suciedad adherida a las paredes del canal auditivo, facilitando su expulsión hacia el exterior. Además, suelen tener propiedades emolientes e hidratantes, que ayudan a mantener el canal auditivo en perfectas condiciones.

Algunos limpiadores se presentan en viales monodosis y otros en envases de mayor contenido. En condiciones normales ambas presentaciones son válidas, pero si tu gato está sufriendo un proceso infeccioso o parasitario, es preferible utilizar viales monodosis para evitar el riesgo de contaminación del aplicador.

En ningún caso se deben utilizar remedios caseros para limpiar las orejas de un gato con agua oxigenada, alcohol, vinagre, ni cualquier otro producto que no esté especialmente formulado para esta finalidad. Muchos de estos productos son ototóxicos y pueden causar graves daños en los oídos, por lo que nunca se deben utilizar.

Para mantener en perfectas condiciones los oídos de tu gato debes saber que este procedimiento debe realizarse 1 vez cada 2 semanas, además, para prevenir cualquier complicación, cuando vayas a bañar a tu gato debes taponar sus oídos con dos bolas de algodón, de este modo evitas la entrada de agua, lo que podría causar daños en el conducto auditivo.

Si observas cualquier anomalía será imprescindible acudir al veterinario para que identifique si se trata de una enfermedad o existe algún problema que deba revisarse. Algunos indicadores de problemas de salud pueden ser la presencia de cera oscura, un olor parecido al de la levadura o la aparición de parásitos.

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