Cómo relajar a un gato estresado

Cómo relajar a un gato estresado

Si bien el estrés es un mecanismo adaptativo cuya finalidad es garantizar la supervivencia ante situaciones de peligro, puede también ser una patología con graves repercusiones tanto físicas como conductuales. El gato es un animal especialmente susceptible al estrés patológico ya que se caracteriza por necesitar ejercer un control total sobre su entorno. Esto implica que el estrés en gatos pueda darse de forma reiterada hasta cronificarse por cambios mínimos en el entorno, como pueden ser las visitas o el cambio en la ubicación de los muebles.

El estrés en gatos requiere una respuesta inmediata a fines de evitar cualquier complicación. Es muy importante saber cómo actúa un gato estresado para reconocer los síntomas y, además, cómo relajar a un gato estresado. Por ello, en este artículo de ExpertoAnimal te explicamos qué hacer si tu gato está estresado.

¿Qué es el estrés en gatos?

El estrés es un mecanismo absolutamente necesario. Por ejemplo, que un gato sufra estrés durante una mudanza lo pone en alerta y le permite poder adaptarse a un nuevo entorno, que un gato sufra estrés cuando otro animal muestra agresividad hacia él le permite huir. En estas situaciones no es necesaria intervención alguna pues el estrés obedece a una situación que verdaderamente requiere esta respuesta adaptativa.

En los casos que hemos mencionado el estrés se da por un periodo corto que no supone amenaza alguna, el problema viene cuando el gato muestra estrés de forma cotidiana y ante situaciones cotidianas.

¿Cómo actúa un gato estresado?

El estrés en gatos sostenido produce cambios nocivos en el organismo, que van desde la disminución en la respuesta del sistema inmunológico hasta los cambios de comportamiento. Es entonces es cuando debemos actuar rápidamente si no queremos que la salud de nuestro gato se vea mermada de forma significativa.

En los gatos estresados podremos contemplar los siguientes comportamientos:

  • Actitud agresiva: ya sea con las uñas o con la orina, lleva a cabo un marcaje excesivo. Además, también tiene una conducta agresiva con sus tutores y, en el caso de que haya más gatos en el hogar u otros animales, los conflictos son constantes. Básicamente siente irritación por lo que le rodea. Quizá te interese el siguiente artículo de ExpertoAnimal sobre "¿Cómo calmar a un gato agresivo?".
  • Disminución del juego y del apetito: cuando tenemos un gato estresado vemos en él que deja de comer o no come tanto como lo hacía antes. Además, también veremos que el estrés en gatos se manifiesta haciendo que el gato no interactúe de la misma forma que lo hacía de normal. Por ejemplo, ya no muestra interés por jugar o pasar tiempo cazando y persiguiendo presas.
  • Eliminación indebida: es incapaz de orinar o defecar dentro del arenero, por lo que lo hace en otros lugares.
  • Estereotipias: se lame en exceso, corre de un lado a otro de forma compulsiva, repite algunas acciones o actitudes...

En el caso de que te estés preguntando si se puede morir un gato por estrés, lo cierto es que la respuesta es mucho más compleja que un simple sí o no. Si el estrés en gatos se vuelve agudo y crónico puede llegar a desarrollar enfermedades que empeoren su estado de salud y, por ende, causar su muerte.

Para tener más información sobre cómo actúa un gato estresado te dejamos el siguiente artículo de ExpertoAnimal sobre el Estrés en gatos: síntomas y tratamiento.

¿Qué hacer si mi gato está estresado?

Ahora que ya has leído qué es el estrés y cómo actúa un gato estresado, probablemente quieras saber cómo reducir el estrés en gatos. Para ello, vamos a exponer a continuación una serie de puntos y consideraciones que hay que tener en cuenta si tenemos un gato estresado.

Cuida su alimentación

Entre los múltiples alimentos balanceados para gatos que podemos encontrar en la actualidad algunos son específicos para apoyar la nutrición en épocas de estrés.

Un organismo estresado tiene requerimientos nutricionales ligeramente distintos y necesita una mayor energía para poder hacer frente al estado de alerta que el estrés provoca, por lo tanto, es muy recomendable cambiar la alimentación del gato para que ésta sea una ayuda extraordinaria en el tratamiento del estrés, que permita, junto a otros recursos, una buena recuperación.

Obviamente, cualquier cambio en la alimentación del gato debe realizarse de forma paulatina para evitar complicaciones digestivas.

Ofrécele un ambiente seguro y tranquilo

¿Tu gato convive con otros animales? Esto puede agravar el estrés e incluso ser el causante del mismo. De hecho, es bastante común encontrar un gato estresado por otro gato. Para determinar cómo influyen los otros animales del hogar en el estrés del gato es necesario observar el comportamiento de los mismos, y también el comportamiento del gato estresado cuando está junto a ellos.

Si detectamos que la compañía de los otros animales agrava el estrés del felino será necesario mantener a los animales separados por un tiempo hasta que el gato se encuentre más recuperado, también puede ser necesario trabajar sobre el comportamiento de las demás mascotas.

Limpia bien su arenero

Sabemos que los gatos son animales extremadamente quisquillosos con la limpieza y muy pulidos. Por ello, un arenero sucio puede ser uno de los desencadenantes del estrés en gatos. Para reducirlo, tendremos que vigilar diariamente cuál es el estado del arenero del gato y mantenerlo de la mejor manera posible. Así, evitaremos que el gato se estrese por cómo está.

Pasa más tiempo con él

Diariamente debes encontrar un espacio tranquilo para estar con tu gato durante un buen tiempo. Durante este periodo háblale con voz dulce, bríndale todo tu afecto y juega con él, siempre observando cualquier comportamiento agresivo que pudiera producirse, ya que éstos no deben permitirse.

Jugar con tu gato le brindará a tu mascota una herramienta excelente para gestionar el estrés, ya que el mejor remedio frente a esta afección es mantener al gato activo como una forma de canalizar el estado de alerta que sufre su organismo. Durante el juego lo que estás haciendo es estimularlo de una forma positiva, además de que les sirve de ejercicio.

Prueba las terapias naturales

El estrés es una afección que responde especialmente bien a las terapias naturales y esto nos da la oportunidad de mejorar la calidad de vida de nuestro gato de una forma completamente respetuosa con su organismo.

Podemos optar por brindarle a nuestro gato diversos tranquilizantes naturales, como por ejemplo las feromonas, que permiten que el gato sienta el entorno bajo su control y territorio. Otras opciones igualmente adecuadas son las flores de Bach y la homeopatía. Para aplicar exitosamente estas terapias naturales te recomendamos que lo hagas bajo la supervisión de un veterinario holístico.

Tienes más información sobre las Feromonas para gatos: qué son y cómo utilizarlas en el siguiente artículo.

Visita el veterinario

Un gato estresado puede presentar múltiples problemas de salud, desde enfermedades infecciosas hasta alopecia, alergias y diversos trastornos cutáneos. Por lo tanto, resultará imprescindible que un veterinario valore el estado de salud del gato para iniciar un tratamiento farmacológico en aquellos casos en los que sea necesario.

Otro motivo importante para acudir inicialmente al veterinario es que el estrés puede estar causado por una enfermedad física y es importante descartar que ésta sea la causa subyacente.

Otras opciones que hacer cuando mi gato está estresado

De lo mencionado en los anteriores apartados para reducir el estrés en gatos, también puedes probar con las siguientes opciones que te dejamos a continuación.

  • Crea un rincón antiestrés: es decir, construye un lugar donde el gato esté más apartado y tranquilo. Por ejemplo, a algunos gatos les gusta estar escondidos o debajo de superficies, así que no es mala idea crearle una especie de "cueva" o "cabaña". Aun así, ten cuidado de que el gato no se sienta arrinconado y bajo ningún concepto lo encierres.
  • Deja que marque: aunque sin llegar al exceso, el marcaje en gatos les ayuda a desestresarse y convertir un lugar desconocido en algo familiar. Si ves que se frota contra los muebles o marca con las patas, permíteselo.
  • Utiliza música relajante: el estrés en gatos puede estar ocasionado por ruidos demasiado estridentes para ellos, como pueden ser las obras de un edificio o el llanto de un bebé. Por ello, prueba a ponerle música relajante para gatos o ruido blanco. Quédate con él y observa como reacciona.
  • Distribuye sus juguetes: si ves que tiene algún o algunos lugares preferidos puedes ir dejando sus utensilios y juguetes por ellos. Así, si hay algún sitio donde tiene miedo pero encuentra su objeto personal se sentirá más seguro y probablemente se relajará.

Si deseas leer más artículos parecidos a Cómo relajar a un gato estresado, te recomendamos que entres en nuestra sección de Problemas del comportamiento.

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