¿Cuándo es la mejor edad para castrar un hurón?

Los hurones tienen un sistema endocrino bastante complicado si lo comparamos con el de los mamíferos domésticos a los que estamos acostumbrados, como pueden ser perros y gatos. Los insulinomas tumores de la porción endocrina del páncreas) y el hiperestrogenismo (toxicidad que afecta a la médula ósea por culpa de los estrógenos altos), están a la orden del día en esta especie.

Por este motivo, y por el desagradable comportamiento que se asocia al celo, sobre todo en machos, la castración en ambos sexos es algo que tendremos que asumir, por su bien (y por el nuestro). Durante algunos años, nos llegaban hurones procedentes de diversos países que abastecían a las tiendas de animales ante la demanda. Lo peor que le puede suceder a una especie o raza es "ponerse de moda", puesto que estos hurones llegaban con escasos tres meses de vida, y ya castrados.

Castrar a un hurón a esa edad, es totalmente contraproducente, ya que este sistema endocrino algo traidor, tiende a otorgar a otros órganos la función que hemos eliminado de forma tan temprana.

Las glándulas suprarrenales o adrenales, que se encuentran sobre los riñones de todas las especies, comienzan a recibir la acción de las hormonas que se producen en la hipófisis (el centro de mando, alojada en el cerebro), produciéndoles tumoraciones, e incluso el desarrollo de células que se pueden comportar como las gónadas suprimidas (ovarios y testículos).

Entonces, ¿cuál sería la mejor edad para castrar a mi hurón?

Tanto en machos como en hembras, lo ideal es que podamos esperar hasta que el hurón tenga, al menos, 15 meses, aunque no siempre sea posible. No obstante, la cirugía no debería realizarse antes de los 12 meses de vida. A continuación, vamos a diferenciar entre machos y hembras a la hora de realizar la castración.

La castración en hembras (extirpación de ovarios y útero), tiene con finalidad suprimir toda actividad reproductora. Las huronas tienen ovulación inducida, es decir, hasta que no hay cópula, los signos celo no desaparecen. En contadas ocasiones hay ovulación espontánea, pero es difícil que ocurra (lo mismo que pasa con gatas y conejas). Por ello su celo es permanente una vez que aparece.

El problemas es que los estrógenos, la hormona que está alta durante el celo, son tóxicos en altas cantidades para la médula ósea. Que el celo se prolongue más de una semana ya comienza a ser preocupante y pone en peligro la vida de nuestra hurona.

Por ello, aunque la recomendación sea esperar hasta los 15 meses como mínimo, sabemos que nuestra hurona empezará a celar sobre los 7-9 meses (es orientativo y depende de muchos factores: las horas de luz, el peso alcanzado, genética, alimentación y hábitat...).

¿Cuál es la mejor opción para castrar a una hurona?

Podemos retrasar un poco la entrada en celo jugando con las horas de luz. Al igual que en periquitos o canarios, si disponemos de un lugar donde dejarlas dormir durante unas 16 horas al día en su primer año de vida a oscuras (algo que no le cuesta mucho a este activo pero dormilón mamífero), podremos retrasar la llegada de la madurez sexual. Funciona mejor en machos, pero es interesante probarlo en hembras.

Recordemos que el convivir con más hurones, especialmente si hay machos entre ellos, puede adelantar la entrada en celo de las huronas hembras. Es el llamado "efecto macho"

¿Y si entra en celo y no desaparece a los 9 meses de vida, por ejemplo?

Supongamos que la hurona entra en celo bastante antes de los 15 meses de vida, y lleva días con él. Lo notaremos por la vulva hinchada con aspecto edematoso, ligero desarrollo de mamas, y un comportamiento diferente (cada hurona es un mundo, desde más cariñoso a más agresiva), incluso puede que marcaje con gotitas de orina para "buscar pareja".

Será el momento de acudir a nuestro veterinario, y él valorará si es apropiado inyectarle algún análogo de la hormona liberadora de gonadotropina.

Explicado de forma muy resumida, el celo obedece a la acción de un eje entre cerebro (la famosa hipófisis y el hipotálamo) y ovarios. Esta hormona, corta la comunicación entre los puntos del eje, y cesa el celo.

Dura poco tiempo, pero puede darnos un margen hasta que alcance la edad adecuada para la castración. Hay otras medidas más duraderas, como un implante subcutáneo de esa hormona que se libera durante meses, pero hay que recurrir a sedación para ponerlo, y en ocasiones solamente necesitamos unas semanas más para proceder a la cirugía.

¿Qué hacer si el celo aparece antes de los 15 meses?

Después de castrada, podemos estar seguros de que:

• No habrá toxicidad de los estrógenos sobre la médula ósea.
• No desarrollará tumores de mama.
• No sufrirá infecciones de útero.

No obstante, sus glándulas adrenales siempre serán su punto débil, así que siempre se aconseja revisar con una ecografía de abdomen y/o analítica el estado de estos órganos anualmente. Con la ecografía además, podrá revisar su páncreas.

También nos advertirán que debemos vigilar signos como : apatía, cambios de apetito, faltas de pelo (sobre todo en la cola), abdomen hinchado...

Algunos veterinarios podrán aconsejar continuar con inyecciones o implantes de esa hormona después de castrar a nuestra hurona, siendo este un asunto sobre el que no hay de momento acuerdo unánime. Parece ser beneficioso para evitar que las hormonas liberadas por la hipófisis provoquen males mayores en las glándulas adrenales.

En los hurones macho, los signos de celo son más similares a los de los gatos, por comparar con otro animal más conocido:

• Marcaje por todo el territorio (nuestra casa)
• A veces, agresividad
• Puede liberar más a menudo la secreción de sus glándulas anales
• A veces percibimos su olor más intenso
• El pelaje puede aparecer color ocre y untuoso
• Podemos ver los testículos mucho mayores de lo habitual, aunque no se da siempre. Esta especie los tiene situados bajo el ano, al igual que los gatos, aunque el pene aparezca en la zona media del abdomen.

No obstante, como siempre, cada hurón es un mundo. Cualquier comportamiento que se salga de lo normal, puede indicarnos que ha llegado el momento. Recordemos que el celo aparece en hurones (machos y hembras) con el incremento de las horas de luz, con lo que si ha nacido en Junio, lo más probable, es que aparezca a finales de Enero del siguiente año. Suelen ser un poco más madrugadores a la hora de comenzar su actividad reproductora que las hembras.

En hurones macho resulta más efectivo el reducir al máximo las horas de luz, para retrasar la madurez sexual hasta la edad deseada, es decir, los 15 meses de vida. Disponer de una jaula donde poder dejarlos temprano y despertarlos tras 16 horas de oscuridad, puede retrasar de forma natural la llegada del celo. La temperatura también influye mucho, el frío puede hacer que el celo cese o se retrase.

¿Qué hacer si la sexualidad aparece antes de los 15 meses?

Puede que nuestro veterinario nos aconseje tratar de cortarlo jugando con las horas de luz, y si no funciona, aplicar las misma hormonas que en el caso de la hembra. Además, se debe considerar que nunca debemos tener cerca hembras castradas o sin castrar. Si tiene acceso a ellas, o a su olor, nuestros intentos fracasarán.

A pesar de que castrar a nuestros hurones no les libera de padecer en el futuro de problemas con sus glándulas adrenales, sí les evita padecimientos de peor tratamiento o pronóstico.

No obstante, debemos recordar que en ellos, la llamada "esterilización pediátrica" que se aconseja en perros o gatos, no es recomendable. Como siempre, estos consejos de ExpertoAnimal pretenden ser una información añadida a la que le proporcionará su veterinario a la hora de interesarse por la castración en su hurón.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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