¿Cuánto dura el celo de una gata?

¿Cuánto dura el celo de una gata?

A la hora de convivir con una gata es inevitable que los cuidadores tengan en mente su período de celo. Por las características específicas que este presenta, que explicaremos en este artículo de ExpertoAnimal, el celo es siempre tema de conversación y, debido a los problemas que produce, la mayoría de los cuidadores optan, con buen criterio, por la esterilización. Para que podamos tomar esta decisión repasaremos, a continuación, cuánto dura el celo de las gatas, qué síntomas presenta y cuándo comienza.

¿Cuándo se produce el primer celo en gatas y cada cuánto?

Denominamos celo al período en el que la gata se muestra fértil y, por lo tanto, puede quedarse preñada. Puede haber variaciones pero, en general, las gatas comienzan su primer celo hacia los 6 meses de edad, aunque va a depender de la época del año, ya que se ve influido por la luz solar, lo que quiere decir que más que hablar de cada cuánto entra en celo una gata, debemos mentalizarnos de que el celo se va a prolongar durante meses, generalmente desde finales del invierno, primavera, verano e inicio del otoño. Puede continuar todo el año en las gatas que viven en interiores y se ven afectadas por la luz artificial y también en aquellas de climas tropicales con más de 12 horas de luz al día. Esto no significa que la gata pase todo este tiempo mostrando síntomas del celo pero sí que, durante esos meses, podrá entrar en celo en cualquier momento.

¿Cuánto tiempo dura el celo en las gatas?

Se dice que la gata es poliéstrica estacional, es decir, presenta varios celos durante su período reproductivo. De la misma manera, la respuesta a cuánto dura el celo de una gata no es única, ya que puede tener síntomas durante días o incluso semanas de manera continuada, aunque la norma es un celo de unos 7 días que se repite cada 10. Si un macho tiene acceso a ella y se produce la cópula, al terminar, el gato retira su pene cubierto de espículas, lo que le produce dolor a la hembra y desencadena la ovulación. Este proceso recibe el nombre de ovulación inducida. Si no se produce la fecundación, el celo no se detiene.

Síntomas de una gata en celo

Debido a las particularidades de su ciclo, más que en la duración del celo de una gata debemos centrarnos en identificar sus síntomas, que van a ser inconfundibles, aunque debemos saber que no se aprecian en todas las gatas. Una gata en celo, en general, va a mostrarse nerviosa, muy inquieta, reclamando nuestra atención y emitiendo un maullido muy agudo, estridente y continuo, que puede aparecer de forma más intensa por las noches. Es posible, también, que lo oriente hacia las ventanas o puertas y que intente salir a la calle.

Estas manifestaciones pueden ser contestadas por los gatos del vecindario, si los hay, con el riesgo de que se produzcan incidentes entre ellos al acercarse. Las feromonas que producen las gatas durante el celo también pueden inducir el celo en gatas cercanas. Por supuesto, si la gata tiene acceso al exterior con bastante probabilidad regresará en estado. También podremos observar que nuestra gata se frota contra nuestro cuerpo o contra objetos, está más cariñosa (aunque algunas gatas manifiestan agresividad), levanta la cola y muestra los genitales. Puede incrementarse su apetito al inicio del celo y disminuir al final. Algunas gatas orinarán más a menudo y pueden marcar con orina.

¿Cómo calmar a una gata en celo?

La única manera de tranquilizar a una gata en celo es evitar que lo sufra, de otra forma tendremos que convivir con los síntomas que le produzca a lo largo de toda la duración del celo. Para eliminar el celo existen fármacos que puede administrar nuestro veterinario pero debemos saber que, aunque pueden ser la solución para un momento puntual, a largo plazo tienen graves efectos secundarios como los tumores mamarios o la infección uterina. Por todo esto, sumado a los beneficios para la salud que conseguimos, solo podemos recomendar la esterilización, que consiste, habitualmente, en la extirpación de útero y ovarios. Con ello la gata no volverá a tener el celo y, por lo tanto, no podrá reproducirse.

La esterilización para evitar el celo en gatas

Para no tener que preocuparnos por cuánto le dura el celo de una gata, qué síntomas produce o si se ha preñado o no, recomendamos la ovariohisterectomía, siempre en veterinarios de confianza. Es recomendable que esta operación se realice antes del primer celo porque con ello aprovechamos todos sus beneficios para la salud, como evitar la aparición de tumores mamarios.

¿Se puede esterilizar una gata en celo?

Mejor que la gata no esté en celo cuando fijemos la intervención porque, aunque una gata en celo se puede esterilizar si no queda más remedio, es preferible que no lo esté para evitar que la mayor irrigación sanguínea de la zona complique el procedimiento con sangrados.

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