La familia humana se sienta a comer en la mesa, de repente, el perro se pone en alerta, se levanta y se acerca con gran curiosidad, se sienta a tu lado y te mira, si le devuelves la mirada y observas su cara atenta, tierna y su mirada hipnotizante, estás perdido, es prácticamente imposible que no le des de comer.
Obviamente estamos hablando del labrador, un perro con una apariencia preciosa y un carácter irresistible para los amantes de los perros, ya que pocos canes son tan bondadosos, dóciles, amigables, cariñosos y además, muy aptos para el trabajo. Son muchas las características que hacen del labrador uno de los perros más populares, pero entre ellas debemos destacar que su apetito es voraz y parecer ser un perro prácticamente insaciable.
Este es el tema específico que abordamos en este artículo de Experto Animal, el labrador y su obsesión por la comida.
¿Por qué el perro labrador tiene un apetito insaciable?
La obesidad canina es una enfermedad muy peligrosa para nuestras mascotas y que lamentablemente se da cada vez con mayor frecuencia, por este mismo motivo se han realizado diversos estudios en el ámbito veterinario que han intentando identificar las causas genéticas de este estado patológico.
Un estudio realizado en la Universidad de Cambridge identificó una variante del primer gen relacionado con la aparición de obesidad en perros, se trata de un gen denominado POMC y que precisamente fue descubierto en los perros labradores.
Es precisamente la variedad o mutación de este gen lo que le otorga a los labradores un apetito voraz y continuo. ¿Significa esto que tenemos que responder con comida a esta característica genética del labrador? No, de hecho es una nefasta idea.
Motivos por los que no debes ceder a las peticiones de tu labrador
Como mencionábamos al inicio del artículo, resistirse cuando uno está comiendo y su adorable labrador lo mira con cara de cordero degollado es difícil, muy difícil, pero si verdaderamente quieres a tu mascota, no puedes compartir tu comida con ella cada vez que te lo pida.
Debes saber que el labrador es una de las razas más propensas a la obesidad, lo que implica los siguientes riesgos:
- Lo que tú puedes considerar un mimo o muestra de afecto hacia tu perro es en realidad un factor que contribuye al desarrollo de obesidad, ya que el labrador es muy propenso a engordar.
- La obesidad puede desembocar en enfermedades del corazón, problemas respiratorios y patologías articulares, con la consecuente disminución de la movilidad y de la calidad de vida del perro.
- Si cedes continuamente a las peticiones de comida que te realiza tu labrador, le harás adquirir un hábito muy nocivo, por lo tanto es mejor prevenir este tipo de costumbres.
Alimentación saludable y ejercicio para el perro labrador
Es recomendable que alimentes a tu perro labrador con pienso cuyo contenido en calorías sea reducido en comparación con el alimento de referencia. A pesar de ello, quizás quieras ofrecerle también comida casera, pero hacerlo cuando tú estás comiendo no es una buena opción, ya que esto implica sumar calorías que tu perro no necesita.
En todo caso puedes sustituir una toma de pienso por una toma de comida casera, pero mejor que no mezcles ambos tipos de preparaciones, ya que el tiempo de digestión varía de una a otra y esto podría ocasionar problemas gástricos.
Si bien el labrador es un perro propenso a la obesidad cuenta con la ventaja de poseer una estructura física muy robusta y apta para la actividad física, por eso es importante que lo ejercites diariamente, además, existen múltiples ejercicios para perros labrador que te ayudarán a mantener la salud de tu mascota y a prevenir la obesidad.
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