Elefantes asiáticos – Tipos y características

Esta especie es nativa de Bangladesh, Camboya, China, India, Indonesia, República Democrática Popular Lao, Malasia, Myanmar, Nepal, Sri Lanka, Tailandia y Vietnam.

El elefante asiático originalmente tenía un gran rango de distribución, desde Asia occidental, pasando por la costa iraní hasta la India, también hacia el sudeste asiático y hacia China. Sin embargo, se ha extinguido en muchas zonas en las que originalmente habitaba, concentrándose en poblaciones aisladas en 13 estados del área total de su distribución original. Todavía existen algunas poblaciones silvestres en islas de la India.

Con un amplio rango de distribución, el elefante asiático está presente en diversos tipos de hábitat, principalmente en:

• Bosques tropicales perennifolios.
• Bosques tropicales semi-perennifolios.
• Bosques tropicales caducifolios húmedos.
• Bosques tropicales secos y espinosos secos
• Pastizales.
• Matorrales cultivados.

Suele verse a diferentes alturas, desde el nivel del mar hasta los 3.000 m.s.n.m.

El elefante asiático requiere para su supervivencia de la presencia constante de agua en su hábitat, la cual no solo utiliza para beber, sino para bañarse y revolcarse.

Sus áreas de distribución son bastante amplias debido a su capacidad de trasladarse, sin embargo, las zonas que decidan habitar dependerán por un lado de la disponibilidad de alimento y agua, y por otro de las transformaciones que el ecosistema sufra debido a las perturbaciones humanas.

Los elefantes asiáticos son bastante longevos y pueden vivir entre 60 y 70 años. Estos llamativos animales logran alcanzar los 2 a 3,5 metros de altura y más de 6 metros de longitud, aunque suelen ser más pequeños que el elefante africano, llegan a pesar hasta 6 toneladas. Poseen una gran cabeza, y tanto la trompa como su cola son largas, sin embargo, las orejas son más pequeñas que su pariente africano. En cuanto a los colmillos, no todos los individuos de esta especie suelen tenerlos, especialmente las hembras, que normalmente carecen ellos, mientras que en los machos son largos y de gran tamaño.

Su piel es gruesa y bastante seca, poseen muy pocos pelos o pueden carecer de ellos, y el color varía entre gris y marrón. En cuanto a las patas, las delanteras tienen cinco dedos con forma de pezuñas, mientras que las traseras poseen cuatro. A pesar de su gran tamaño y peso, son bastante ágiles y seguros al desplazarse, además de ser muy buenos nadadores. Un rasgo característico es la presencia de un solo lóbulo en su nariz que se ubica al final de la trompa. Esta última estructura es fundamental para alimentarse, tomar agua, oler, tocar, emitir sonidos, lavarse, echarse tierra e incluso para pelearse.

Por otro lado, los elefantes asiáticos son mamíferos sociales que acostumbran a estar en manadas o clanes, conformados principalmente por hembras, con la presencia de una matriarca de mayor edad y un macho también de edad avanzada, además de las crías.

Otro aspecto característico de estos animales es que acostumbran a recorrer grandes distancias con el fin de buscar alimento y refugio, sin embargo, suelen desarrollar afinidad por áreas que definen como su hogar.

Los elefantes asiáticos se clasifican en tres subespecies, que son:

Elefante indio (Elephas maximus indicus)

El elefante indio es quien posee mayor número de individuos de las tres subespecies. Habita principalmente diversas áreas de la India, aunque se puede ubicar en pocas proporciones fuera de este país.

Es de color gris oscuro a marrón, con presencia de manchas claras o rosadas. Su peso y tamaño son intermedios en comparación con las otras dos subespecies. Es un animal bastante sociable.

Elefante de Sri Lanka (Elephas maximus maximus)

El elefante de Sri Lanka es el de mayor tamaño entre los asiáticos, pesando hasta 6 toneladas. Es gris o de color carne con manchas negras o anaranjadas y casi todos carecen de colmillos.

Se encuentra distribuido a lo largo de las zonas secas de la isla Sri Lanka. Según estimaciones, no superan los seis mil individuos.

Elefante de Sumatra (Elephas maximus sumatranus)

El elefante de Sumatra es el más pequeño del grupo asiático. Se encuentra profundamente amenazado, y si no se implementan medidas urgentes de acción, probablemente se extinga en los próximos años.

Posee orejas más grandes que los anteriores. Además, tiene un par de costillas adicionales.

Elefante de Borneo, ¿un elefante asiático?

En algunos casos, el elefante de Borneo (Elephas maximus borneensis) se considera una cuarta subespecie del elefante asiático. Sin embargo, varios científicos rechazan esta idea y lo incluyen dentro de la subespecie Elephas maximus indicus o de la Elephas maximus sumatranus. Se esperan resultados de estudios precisos para definir esta diferencia.

El elefante asiático es un gran mamífero herbívoro, y requiere de grandes cantidades de alimentos al día. De hecho, suelen pasar más de 14 horas al día alimentándose, por lo que llega a ingerir unos 150 kg de peso en alimentos. Su dieta se compone de una gran variedad de plantas, y algunos estudios han evidenciado que son capaces de consumir hasta más de 80 especies de plantas diferentes según el hábitat y la época. Así, pueden comer una gran diversidad de:

• Plantas leñosas.
• Pasto.
• Raíces.
• Tallos.
• Cortezas.

Además, los elefantes asiáticos juegan un papel fundamental en la distribución de las plantas en los ecosistemas que habitan, debido a que dispersan con facilidad gran cantidad de semillas.

Los machos suelen alcanzar la madurez sexual entre los 10 y 15 años, mientras que las hembras lo hacen antes. En estado silvestre, las hembras generalmente dan a luz entre los 13 y 16 años de edad. Desarrollan periodos de gestación de 22 meses y tienen una sola cría, que puede pesar hasta 100 kilos y suele amamantarse hasta los 5 años, aunque a esa edad ya también pueden consumir plantas.

Las hembras quedan embarazadas en cualquier época del año, para lo cual le hacen saber a los machos su disposición. Los intervalos de gestación para la hembra duran entre 4 y 5 años, sin embargo, ante la presencia de una alta densidad poblacional, pueden aumentar este tiempo.

Las crías de elefantes son bastante vulnerables al ataque de felinos, no obstante, el rol social de esta especie juega un papel fundamental en la protección de los recién nacidos, de manera que las hembras adultas y principalmente las abuelas acostumbran a cuidar a los más jóvenes.

Estrategias reproductivas del elefante asiático

Un rasgo característico del elefante asiático es que los machos adultos dispersan a los machos jóvenes cuando maduran sexualmente, aunque se mantienen dentro del rango que han definido como hogar, los machos jóvenes suelen entonces separarse de la manada.

Esta estrategia tendría ciertas ventajas para evitar la reproducción entre individuos emparentados (endogamia), lo cual es muy importante para que ocurra el flujo genético. Cuando una hembra está sexualmente madura, los machos se acercan a la manada y compiten por la reproducción, aunque no solo depende de que un macho gane a otros, sino que la hembra también lo acepte.

El elefante asiático está extinto en Pakistán, mientras que en Vietnam se estima una población de unos 100 individuos. Por su parte, en Sumatra y Myanmar está gravemente amenazado.

Durante años, se han estado asesinando a los elefantes asiáticos con tal de obtener el marfil y su piel para la elaboración de amuletos. Además, se estima que muchos elefantes han muerto envenenados o electrocutados por parte del ser humano con el fin de alejarlos de los espacios habitados por las personas.

En la actualidad, existen ciertas estrategias que buscan frenar el importante descenso que sufren las poblaciones del elefante asiático, sin embargo, parecen no ser suficientes debido al estado de peligro en el que aún se mantienen.

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