Enfermedades en aves de corral

La bronquitis infecciosa es una de las enfermedades que más afectan a las aves denominadas "de corral". Esta dolencia está causada por un virus de la familia de los coronavirus.

Las aves afectadas muestran especialmente dificultad respiratoria, ya sea mediante jadeos, estornudos o un sonido crepitante en los pulmones cuando intenta respirar. También producen mucha mucosidad que se libera por las aperturas nasales, boca u ojos. Además, el animal dejará repentinamente de comer.

Esta enfermedad es muy contagiosa, se transmite por el aire a larga distancia, pero también podemos diseminarla nosotros mismos a través de nuestra ropa u otros objetos si entramos en contacto con aves afectadas. Es importante saber que no se transmite al ser humano.

La mortalidad de la bronquitis es muy baja en animales adultos, pero más de la mitad de los individuos jóvenes que se infecten podrán morir. Para evitar esto, lo mejor es vacunar a las aves, ya que la enfermedad no tiene un tratamiento específico.

El cólera aviar está causada por una bacteria de la familia de las Pasteurellaceas, llamada Pasteurella multocida. Este microorganismo vive de forma saprófita (dependiendo de otro organismo) en la región nasofaríngea de las aves pero, cuando la población de esta bacteria se descontrola, puede producir varias enfermedades, el cólera aviar entre ellas.

La enfermedad se transmite a través de cualquier objeto o animal contaminado con excrementos de un ave enferma. Esta bacteria tiene la capacidad de sobrevivir durante largos periodos de tiempo en el medio, entre uno y tres meses.

La enfermedad puede presentarse en varias formas:

• Forma aguda: se extiende rápidamente por todo el cuerpo del ave. Dejan de comer y beber, aparecen diarreas amarillas y pueden inflamarse las extremidades produciendo parálisis. La mortalidad es muy elevada.
• Forma sobreaguda: en esta forma, la enfermedad avanza tan rápido que provoca muerte súbita, sin dejar lugar a actuar de forma alguna.
• Forma crónica: la enfermedad se localiza en la zona de la cara y la barbillas de las aves, provocando una severa inflamación.

Para combatir el cólera se deben usar varios tipos de antibióticos durante un tiempo prolongado. Además, debemos ser conscientes de que el cólera aviar es una de las enfermedades que transmiten las aves a los humanos.

La coriza infecciosa aviar es una enfermedad producida por una bacteria de la familia de las Pasteurellaceas, Haemophilus gallinarum. Puede transmitirse por varias vías, como puede ser el contacto directo con los fluidos que exudan las aves enfermas, por el aire o por el agua de consumo.

Las aves afectadas presentan una llamativa inflamación de los ojos que expulsan una especie de espuma, incluso pueden llegar a perderlos. También pueden inflamarse los párpados y la barbilla, expulsan una secreción purulenta por la nariz que huele muy mal y tienen dificultad para comer, por lo que pierden peso y se debilitan.

No es tan importante la tasa de mortalidad como que la enfermedad no tiene un tratamiento específico y, aunque un animal parezca que se ha curado, portará el patógeno indefinidamente.

Imagen de: zoovetesmipasion.com

La encefalomielitis aviar está causada por un enterovirus del grupo de los picomavirus. Se transmite a través de los huevos, por lo que los individuos jóvenes nacerán con esta enfermedad.

Los pollitos comenzarán a andar de forma poco definida, no coordinarán bien y se acabará produciendo una parálisis parcial o total de las patas. Esto se debe a que parte del encéfalo se está necrosando (las células están muriendo). La mortalidad es relativamente baja. La muerte no se produce por la enfermedad en sí, sino por problemas derivados de ella.

La encefalomielitis no tiene cura, por lo que es prioritaria la vacunación de los progenitores. La hembra transmitirá la inmunidad a sus descendientes mediante los huevos. En la gran mayoría de los casos se recomiendo la eutanasia de los pollitos afectados.

El patógeno causante de la enfermedad de Marek es un herpesvirus. Se transmite a través de las escamas que se desprenden de las raíces de las plumas que viajan de un lugar a otro mediante el aire.

Los síntomas principales que presentan las aves afectadas son debilidad, caída de plumas y pérdida de peso. Una de las características más llamativas de esta enfermedad es la posición que adquiere el ave enferma, una pata hacia delante, otra hacia detrás y un ala extendida hacia el suelo.

De esta forma, poco a poco, van tumbándose hasta que mueren por inanición. Por otro lado, los ojos sufren una decoloración y las pupilas dejan de ser reactivas a la luz. La mortalidad es superior al cincuenta por ciento. No existe cura o tratamiento, sólo se puede prevenir vacunando a los pollitos recién nacidos.

Imagen: cresa.cat

Existen muchos parásitos internos que afectan a la aves, pero hablamos principalmente de coccidios, áscaris y tenias. Estos parásitos se alojan en el intestino de las aves, provocando una malabsorción de los nutrientes, diarreas frecuentes e incluso la muerte por un hiperparasitismo (exceso de parásitos en los intestinos que pueden provocar perforaciones). Otros parásitos pueden localizarse en el sistema respiratorio, produciendo la muerte por asfixia si no se trata.

Los parásitos externos que infectan a las aves se alimentan principalmente de escamas de la piel o de las plumas, como los piojos. Otros se alimentan de la sangre, como garrapatas, ácaros o pulgas. Tanto para combatir parásitos externos como internos, es primordial mantener a las aves desparasitadas.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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