El collar de ahorque es una herramienta muy conocida del adiestramiento "tradicional" del perro. Se usa principalmente para evitar los tirones de correa o para enseñar a caminar al lado de la persona. Lo que muchos propietarios no saben es el efecto que causa en el animal pudiendo producir lesiones graves.
Si te has preguntado alguna vez cómo se utiliza, si es efectivo o simplemente cómo evitar que tu perro tire de la correa, has entrado al sitio adecuado. En este artículo de ExpertoAnimal vamos a resolver tus dudas para que sepas qué hacer y cómo actuar.
Sigue leyendo y descubre si es bueno o no el collar de ahorque para perros.
Cómo se utiliza el collar de ahorque
Existen diferentes tipos y formas de collares de ahorque o ahogo: existe el de púas, el de ahorque (metálico o de cuero) y los de semiahorque (regulables). La función principal, tal y como indica su nombre, es de ahogar al animal cuando éste tire de la correa o nosotros tiremos de ella.
Efectividad vs Lesiones
El problema del uso del collar de ahogo es parecido al que sucede con el del collar anti-ladridos, el perro no comprende por qué se ahoga cuando camina y esa falta de relación le hace estar tenso, inquieto y le genera malestar. No es un método apropiado para enseñar a caminar a tu perro de forma adecuada.
Además de todo esto, el perro puede ser víctima de lesiones físicas que derivan del uso del collar en su cuello, una zona especialmente vulnerable. Recuerda que su uso en cachorros es especialmente grave. Algunas de las lesiones que puede sufrir son:
- Colapso traqueal
- Sensibilidad
- Heridas
- Dolor
- Tos de la perrera
- Lesión en la tiroides
- Afecta al sistema nervioso
- Afecta a la linfático
- Afecta al sistema circulatorio
- Presión intraocular
- Glaucoma
- Siringomielia
- Inquietud
- Nerviosismo
- Estrés
- Agresividad
- Miedo
Cómo podemos evitar que nuestro perro tire de la correa
Enseñar a caminar junto a nosotros a un perro y evitar que éste tire de la correa son cosas muy distintas. No podemos empezar la casa por el tejado así que lo primero y fundamental será evitar que nuestro perro tire de la correa, algo más sencillo de lo que te imaginas.
Primero de todo debes hacerte con un arnés anti-tiro, perfecto para perros pequeños, medianos o grandes. Su uso totalmente inocuo te permitirá enseñarle a andar a un ritmo adecuado y a no tirar sin lesionarse.
Si nunca has probado el arnés anti-tiro vas a quedarte asombrado de los resultados que ofrece. Su uso es muy popular en refugios y perreras de todo el mundo, seguro que hasta en la calle has visto a perros con este arnés.
Una vez modificado el "hábito" de tirar debes comprender otra cosa: la importancia de un paseo adecuado. Muchas personas no comprenden que el paseo es el momento de recreo del perro y éste debe poder olisquear, orinar y ejercitarse si así lo desea.
El paseo debe propiciar que el animal esté calmado, tranquilo y que alivie su estrés. No debes hacerle pasar un mal rato, es totalmente contraproducente para su bienestar.
Una vez hechas sus necesidades, ya puedes retomar las pautas de adiestramiento para enseñarle a caminar junto a ti si lo deseas, a ir en bicicleta o a hacer toda clase de ejercicio para perros.
Son muchos los métodos que podemos emplear para evitar que nuestro perro tire de la correa pero el más indicado siempre es a través del refuerzo positivo, una herramienta que ayuda al perro a comprender qué está haciendo bien. De esta forma es más fácil de aprender para ellos.
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