Gusano del corazón en perros - Síntomas, tratamiento y prevención

La dirofilariosis canina es una enfermedad que fue detectada por primera vez en felinos alrededor de 1920. Consiste en una enfermedad parasitaria provocada por un nematodo denominado Dirofilaria immitis, el cual parasita principalmente el corazón y las arterias pulmonares de los perros a través del riego sanguíneo. Suelen acumularse en el ventrículo derecho y en los vasos sanguíneos de los pulmones, donde se desarrollan hasta alcanzar los 15 o 30 cm de longitud.

Esta parasitosis obstaculiza el riego sanguíneo en poco tiempo, pues su reproducción es especialmente rápida; de hecho, se pueden llegar a hallar más de 100 gusanos en una infestación grave avanzada.

Los nematodos adultos se alimentan a partir de los nutrientes presentes en la sangre del perro afectado y pueden llegar a vivir entre 5 y 7 años dentro del organismo, hasta que se produce la muerte por paro cardíaco.

Esta enfermedad se transmite mediante un vector, como es el caso del flebótomo, no obstante, también puede producirse el contagio durante la gestación de la perra a los cachorros no natos.

El vector suele absorber el parásito en su fase más joven, tras alimentarse de la sangre de un individuo infectado. En el interior del flebótomo, a lo largo de dos o tres semanas, se desarrollarán las larvas hasta llegar a convertirse en gusanos todavía inmaduros. Entonces, cuando el mosquito pica a otro individuo, le transmite los gusanos inmaduros y así empieza la enfermedad del gusano del corazón en un perro hasta ese momento sano.

Los gusanos inmaduros se irán desarrollando en tejidos del animal afectado y, finalmente, conforme se van tornando adultos, se irán hospedando en el corazón y las arterias pulmonares a través del riego sanguíneo para continuar su ciclo de vida. Desde que los parásitos entran en el organismo de un perro hasta que alcanzan su madurez pueden transcurrir entre 80 y 120 días.

Es improbable que hallemos gusanos de Dirofilaria immitis adultos en perros cachorros menores de 7 meses, no obstante, sí podemos encontrar gusanos pequeños aún en proceso de maduración, conocidos como “microfilarias”. Esto sucede únicamente en caso de contagio directo, cuando la madre de los cachorros padece la enfermedad y, durante la gestación, las microfilarias se transmiten a través de la placenta al organismo de los cachorros en desarrollo.

Todo ello convierte al cachorro infestado en un posible transmisor de la enfermedad, además de experimentarla él mismo, puesto que si un flebótomo le pica, este adquirirá los parásitos y podrá transmitirlo a otros individuos.

Esta parasitosis afecta no solo a perros, sino también a una amplia cantidad de especies animales entre las cuales podemos mencionar a gatos, hurones, coyotes e incluso el ser humano, pues es una de las enfermedades que transmiten los perros a los humanos y viceversa. Además, actualmente se encuentra extendida en todo el planeta, exceptuando en la zona de la Antártida, siendo las zonas húmedas las más propicias en cuanto a riesgo de transmisión se refiere.

En España las zonas con más incidencias de esta parasitosis son las islas Canarias y, dentro de la península, el suroeste, el Delta del Ebro y el sur de la Comunidad Valenciana. Aun así, el gusano del corazón puede hallarse en toda la Península Ibérica, especialmente en las épocas de más calor y humedad. Además, existen más de setenta especies de mosquitos distintos que pueden transmitir el parásito Dirofilaria immitis.

Los individuos que han sido infestados pueden ser asintomáticos, es decir, que no presenten señales evidentes provocadas por esta patología. Este es precisamente el motivo por el que suele detectarse la enfermedad del gusano del corazón cuando ya está en estado avanzado.

Los síntomas de dirofilariosis en perros más comunes son:

• Cansancio generalizado
• Intolerancia al ejercicio
• Aumento del ritmo cardíaco
• Tos blanda y dificultad para respirar
• Hemorragias nasales
• Sangrados orales
• Apatía y depresión
• Pérdida de peso
• Desmayos
• Anorexia (el perro no quiere comer)
• Ascitis
• Paro cardíaco

Es de vital importancia acudir a una clínica veterinaria si observamos cualquiera de los síntomas mencionados anteriormente para poder determinar si la causa se debe a la presencia del gusano del corazón o dirofilariosis canina.

Es posible diagnosticar la presencia del gusano del corazón en el perro mediante diversas pruebas de laboratorio, entre las que se incluye un análisis de sangre, el cual evidenciará la infección y otros síntomas comunes de la enfermedad, como anemia, problemas de coagulación, problemas renales y las transaminasas hepáticas elevadas. Esto último es debido a que los riñones y el hígado están siendo afectados.

Dado que pueden producirse falsos negativos, también puede ser necesaria la realización de radiografías o ultrasonidos, que confirmarán la presencia del gusano del corazón en el organismo del perro.

Dependiendo del estado del desarrollo de la enfermedad, el pronóstico puede resultar muy variable e incluso reservado.

Si bien no existe un tratamiento general para tratar la enfermedad del gusano del corazón, las pruebas para el diagnóstico ayudarán al veterinario a determinar cómo deberá realizarse el tratamiento, teniendo siempre en cuenta el estado de salud del paciente y la capacidad del organismo para responder de forma positiva.

No obstante, aunque el proceso pueda ser complicado en algunos casos, es una enfermedad tratable si se diagnostica de forma pronta y se realiza un tratamiento efectivo para eliminar los gusanos adultos y las larvas. Aun así, cabe recordar que en estados avanzados puede ser muy complicada de tratar y que en algunos casos el fallecimiento del perro es inevitable.

El tratamiento suele ser largo, alargándose varios meses, y generalmente empieza con la administración de medicación para expulsar a las microfilarias y las larvas del organismo, seguida de varias inyecciones para eliminar los gusanos adultos. Posteriormente, cuando esta primera fase del tratamiento ha tenido éxito, se prosigue con una medicación de por vida para prevenir las microfilarias. También puede ser necesario aplicar medicación para paliar los síntomas que experimente el can y fármacos de apoyo para los órganos afectados, incluidos el riñón y el hígado.

Finalmente se deberá proporcionar vitaminas y una alimentación que ayude a fortalecer la salud de nuestro can, además de instaurar de forma permanente un plan preventivo para que no se repita la infestación.

Es vital que durante el tratamiento de expulsión de parásitos, el perro afectado guarde mucho reposo para evitar obstrucciones y daños en los órganos afectados. Cuando el can esté recuperado deberá ir retomando la actividad normal de forma gradual, siguiendo las recomendaciones del veterinario.

Es importante recordar que el tratamiento es agresivo, por lo que dejará huella en la salud de nuestro fiel compañero. Por este motivo deberemos ayudarle a recuperar sus fuerzas y su salud una vez acabado el tratamiento, a la vez que procuraremos durante el tiempo que dure el tratamiento reforzar la salud del perro siguiendo los consejos veterinarios que nos proporcione el especialista.

Al tratarse de una patología parasitaria tan grave, que además puede afectar a otros animales y a las personas, es de vital importancia llevar a cabo un plan de medicina preventiva pautada por nuestro veterinario de confianza. De esta forma, si te preguntas cómo prevenir el gusano del corazón en los perros, a continuación explicamos las mejores medidas.

Debido a que se trata de una enfermedad asintomática en algunos casos, es muy aconsejable realizar un plan de desparasitación mensual, tanto externa como interna, que nos ayude a prevenir una infestación del gusano del corazón en el perro. Así mismo, debemos seguir de forma estricta el calendario de desparasitación, además de acudir al especialista cada seis o doce meses para realizar visitas de control que garanticen el buen estado de salud del perro y la ausencia de enfermedades parasitarias.

Siguiendo los consejos de nuestro veterinario y utilizando productos de prescripción veterinaria, lograremos proteger al perro y a toda la familia. Recuerda, porque les queremos, les protegemos, desparasita a tu mascota.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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