Hámster ruso

Hámster ruso

El hámster ruso, como bien su nombre indica, es procedente de Rusia aunque también está presente en Kazajistán. Se trata de una mascota muy común entre el público infantil, ya que no necesita excesivos cuidados y tiene una actitud agradable, e incluso cercana, con quienes se encargan de alimentarle.

Este roedor puede soportar temperaturas algo bajas, puesto que proviene de la estepa. En este artículo de ExpertoAnimal hablaremos más en profundidad sobre los cuidados del hámster ruso, su carácter, características físicas y alimentación. Sigue leyendo y descubre toda la información sobre el hámster ruso.

Origen
  • Asia
  • Europa
  • Kazajstán
  • Rusia

Características del hámster ruso

El hámster ruso es de un tamaño pequeño, mide entre 7 y 11 centímetros de longitud, y puede pesar entre 35 y 50 gramos. La cola es corta y el cuerpo es rechoncho, lo que resulta adorable para muchas personas. En general, en la naturaleza los encontramos de tonos café, gris y blanco. Tienen una línea negra en el dorso y una mancha negra también en el hombro. El vientre es casi siempre de color blanco.

Los colores del hámster ruso son muy variados. De manera que, saltándonos de los colores habituales, quienes trabajan en su reproducción combinan ejemplares de distintos colores que dan como resultado el color agente (sepia, con la linea dorsal dorada), canelo (tono gris), mandarín (anaranjado) y perla (gris claro).

En cuanto a las diferencias físicas del hámster ruso macho y hembra, podemos diferenciar al macho de la hembra por la distancia entre los orificios del ano y la vulva. La hembra los tendrá más juntos mientras el macho los tendrá mas separados. También es posible resolver el misterio si identificamos los testículos.

Comportamiento del hámster ruso

Es un hámster excepcionalmente dócil y sociable, quizás es uno de los motivos por los que muchos padres lo eligen como mascota para sus hijos. Aunque se trate de un hámster amigable y simpático, no es recomendable que vivan en parejas del mismo sexo, ya que son territoriales entre los de su misma especie.

Son más activos por la noche, por lo que es habitual escucharlos corretear en su rueda clásica haciendo ejercicio. Por el día, en cambio, suelen dormir más, aunque también pueden mantenerse despiertos.

Una característica del hámster ruso a tener en cuenta es que hiberna, aunque no suele ocurrir en cautividad. De hacerlo, pasarían una semana entera sin salir de su nido lo que nos podría parecer que está muerto. En ese período suelen protagonizar un fenómeno poco común y es que cambian todo su pelo volviéndose más claros.

Alimentación del hámster ruso

Son roedores omnívoros en estado natural, eso quiere decir que se alimentan tanto de semillas como de algunos insectos. En cautividad bastará con ofrecerle semillas como pipas de girasol, maíz, cebada, cártamo... También podemos incluir en su dieta una o dos veces a la semana fruta, como la manzana o las fresas (no le ofreceremos ninguna que sea cítrica) o verdura, como por ejemplo brócoli o pimientos verdes. Para más información, consulta el siguiente artículo: "Frutas y verduras para hámsteres".

Siguiendo con la alimentación del hámster ruso, en el mercado encontrarás preparados de semillas específicos, solo deberás añadirle los extra de fruta, verdura y algún insecto si te atreves. Si no, puedes optar por darle queso, yema de huevo cocida o pavo.

El agua fresca y limpia no debe faltar. Utiliza un bebedero como el de los conejos ya que es más cómodo.

Hábitat del hámster ruso

En estado salvaje vive en galerías subterráneas, aunque en cautividad, obviamente, utilizaremos una jaula. Puedes escoger un terrario amplio o una jaula de tamaño adecuado, asegurando que esta no tenga los barrotes muy separados o de un material que pueda romperse, ya que el hámster ruso podría escapar.

Deberá tener algo para roer, puesto que sus dientes crecen sin parar a lo largo de su vida. Busca una rama o un juguete que encuentres en las tiendas de mascotas. También debes ofrecerle una rueda para que se ejercite e, incluso, si tienes espacio, un circuito.

Limpia su hábitat regularmente para prevenir enfermedades evitando siempre el polvo. También debes retirar las sobras de frutas y verduras que el hámster podría comerse y como consecuencia, enfermar. Además de tener en cuenta estos detalles referentes a la higiene, la alimentación y la jaula, para ofrecer los mejores cuidados al hámster ruso es recomendable dejarlo salir de la jaula durante algunas horas al día. Para ello, es posible habilitar un espacio en el hogar lo suficientemente grande y enriquecido para que pueda ejercitarse y mantenerse estimulado. Este espacio puede ser una habitación o un corral.

Enfermedades del hámster ruso

El hámster ruso puede sufrir diarrea si ingiere dulces o demasiada verdura, recuerda que solo puede comer 2 o 3 veces por semana los extras de alimentación. También puede sufrir la caída total del pelo si se encontrara débil o falto de vitaminas, acércate a tu tienda habitual y compra vitaminas que pueden mezclarse en agua.

Si no limpias adecuadamente el polvo de la jaula, puede acabar en los ojos del hámster, provocándole conjuntivitis. En principio debería remitir a los pocos días aunque en casos muy especiales deberás acudir al veterinario para que le recomiende antibióticos o antiinflamatorios.

Otra enfermedad común en el hámster ruso es la parálisis neurológica que podemos identificar si deja de tener movilidad en las extremidades posteriores. Es consecuencia de una caída generalmente.

Puedes prevenir todas las enfermedades si le proporcionas una alimentación adecuada y una higiene regular.