La hiperestesia felina consiste en una serie de síntomas relacionados con el aumento de la sensibilidad frente a estímulos tanto indoloros como doloros por reducción del umbral álgido. De hecho, está considerada como un signo de dolor neuropático en la especie felina. Nuestros gatos con síndrome de hiperestesia felina van a manifestar signos clínicos característicos pero no exclusivos de la enfermedad pues también pueden ser producidos por otros procesos o enfermedades como algunas alergias, dermopatías, neuropatías o problemas de comportamiento.
Algunos de estos síntomas son espasmos o contracciones musculares especialmente en la zona lumbosacra, ondulaciones cutáneas, saltos y carreras exageradas, vocalizaciones, lamidos constantes y hasta automutilaciones con arañazos o mordiscos. El diagnóstico se puede considerar que es por exclusión y el tratamiento se basa en controlar el dolor neuropático y la ansiedad o el estrés. Dicho esto, en el siguiente artículo de ExpertoAnimal vamos a ver más detalladamente qué es la hiperestesia felina, sus síntomas y tratamiento. ¡Atento!
¿Qué es el síndrome de hiperestesia felina?
La hiperestesia felina es un trastorno caracterizado por un aumento o exceso de sensibilidad en la piel de manera totalmente anormal. El síndrome de hiperestesia felina cada vez se conoce más y por tanto, cada vez se diagnostica más, pero no es una enfermedad frecuente, ni mortal y tampoco es una enfermedad degenerativa.
Se trata de un problema que se produce con mayor frecuencia en gatos nerviosos, ansiosos y mayores o en los gatos que están padeciendo periodos de estrés de cualquier edad, sexo y raza. También parecen más predispuestas algunas razas felinas como el siamés, el abisinio y el himalaya. En concreto, la hiperestesia felina se suele considerar como un signo de dolor de tipo neuropático en el cual se ve aumentada la sensibilidad frente a cualquier estímulo, doloroso o no doloroso debido a una reducción del umbral álgido.
Síntomas de hiperestesia felina
La hiperestesia felina se caracteriza por poder presentar signos clínicos o síntomas tras conductas tan fáciles o agradables para un gato como son las caricias o roces de la piel. Estos signos clínicos se manifiestan especialmente en la región toracolumbar, así como por palpar su musculatura lumbar, pudiendo durar de segundos hasta algunos minutos.
Los signos clínicos que se producen como consecuencia del síndrome de hiperestesia felina son muy variados, ya que podemos ver como el pequeño felino dilata sus pupilas (midriasis) mientras que exagera los movimientos de su cola, presenta espasmos u ondulaciones musculares en la región toracolumbar epiaxial o empiezan a correr o saltar de forma frenética.
Otros síntomas de la hiperestesia felina son los siguientes:
- Hiperactividad.
- Perseguirse la cola.
- Lamidos frecuentes.
- Comportamiento de huida.
- Autolesiones por mordeduras o arañazos.
- Agresividad a personas, otros animales u objetos inanimados.
Causas de la hiperestesia felina
El síndrome de hiperestesia felina es bien conocido sintomatológicamente pero el origen no parece del todo claro. Se cree que puede estar producida como consecuencia de un problema a nivel de la actividad eléctrica cerebral que tiene control sobre el comportamiento emocional, depredador y de aseo, así como por problemas musculares a nivel de la columna.
Aun así, también se piensa que la hiperestesia en gatos pueda ser originada o empeorada por las siguientes causas:
- Estrés.
- Desordenes de tipo epiléptico.
- Problemas de comportamiento.
- Miopatías.
- Dermopatías o problemas dermatológicos.
- Trastornos inflamatorios.
- Enfermedades inmunológicas.
- Trastorno obsesivo-compulsivo.
Diagnóstico de hiperestesia felina
A la hora de diagnosticar un síndrome de hiperestesia felina se debe hacer siempre mediante descarte con pruebas específicas a otros trastornos, y que pueden cursar con síntomas similares a los de este síndrome en nuestros pequeños felinos.
En concreto, estamos hablando de patologías como las siguientes:
- Dermatitis alérgica a la picadura de la pulga.
- Hipersensibilidad alimentaria.
- Traumatismos en la región lumbosacra, cola o miembros posteriores.
- Epilepsia primaria o secundaria a tumores cerebrales, encefalitis, neoplasias medulares, hernia de disco. intervebral o mielitis infecciosas.
- Trastornos compulsivos.
Para hacer un diagnóstico definitivo hay que tener en cuenta que no existe una prueba específica, sino que una vez hecho el diagnóstico diferencial y habiendo explorado al animal y realizado una buena anamnesis o historia clínica al cuidador, se realiza el diagnóstico de hiperestesia al no haber ninguna otra causa que explique esa sintomatología. Esto es lo que se conoce como diagnóstico de exclusión.
¿La hiperestesia felina tiene cura? - Tratamiento
No, la hiperestesia felina no tiene cura actualmente. Los pilares del tratamiento de la hiperestesia felina son tratar o controlar el estrés y calmar el dolor neuropático para así tener los síntomas bajo control. Vamos a ver más detalladamente el tratamiento para la hiperestesia felina o en gatos:
- Para reducir o evitar los estímulos estresantes: que alteran la calma de nuestros gatos mediante el empleo de feromonas sintéticas felinas para crear un ambiente apaciguante y tranquilo, empleo de técnicas de enriquecimiento ambiental y asegurarnos de que los gatos tengan lugares altos y para refugiarse seguros en el hogar.
- Para tratar el dolor neuropático: se deben emplear fármacos como la amantidina o la gabapentina combinado con AINEs u opioides. Como modulador de la conducta también se puede utilizar la amitriptilina que pertenece al grupo de los antidepresivos tricíclicos por sus propiedades analgésicas, antipruriginosas y anticonvulsionantes.
Es importante saber que los fármacos tardan un tiempo en hacer efecto, pudiendo llegar a las 4-6 semanas y que se deben mantener hasta dos meses después de que hayan desaparecido los síntomas. Durante el tratamiento se deberá vigilar la función renal y hepática del pequeño felino ya que al metabolizarse y excretarse en su mayoría por estas vías pueden llegar a afectar a dichos órganos.
¿Hay tratamiento natural para la hiperestesia felina?
Como hemos dicho en el anterior apartado, no existe una cura definitiva para la hiperestesia en gatos. Aunque ahora planteamos algunos tratamientos naturales para la hiperestesia, siempre debes consultar con tu veterinario primero. Solo él podrá indicarte cuáles son las mejores opciones para aliviar el dolor a tu gato. Además, en ningún momento estos remedios naturales deben sustituir al tratamiento original.
Así, algunos de los tratamientos naturales para la hiperestesia felina que encontramos son:
- Té de valeriana o gata: tienen propiedades calmantes y ayudan a reducir los niveles de ansiedad e hiperactividad que pueden sufrir los gatos con hiperestesia.
- Lavanda: la podemos utilizar a modo de spray pulverizador en el ambiente o para bañar al gato. Asegúrate de prepararlo bien antes de usarlo.
- Omega-3 y probióticos: el omega-3 contiene propiedades antiinflamatorias que pueden ayudar a la salud del sistema nervioso del gato y cerebral. Por otro lado, los probióticos
De todas formas, en el siguiente artículo te dejamos "Los mejores tranquilizantes naturales para gatos". De nuevo, recuerda siempre consultar con tu veterinario antes de aplicar cualquier remedio natural para la hiperestesia en gatos.
Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.
Si deseas leer más artículos parecidos a Hiperestesia felina - Síntomas y tratamiento, te recomendamos que entres en nuestra sección de Otros problemas de salud.
¿Tienes contratado el Seguro de Responsabilidad Civil obligatorio para perros? Consiguelo al mejor precio rellenando el formulario con tus datos y los de tu mascota haciendo clic en este botón:
- López, S. Hiperestesia felina. Disponible en: https://aevaveterinaria.com/hiperestesia-felina/
- Pellegrino F. C. (2018). Desórdenes neuromusculares en gatos. Revista Argentina de Neurología Veterinaria.