Los 11 animales más peligrosos del Amazonas

Los 11 animales más peligrosos del Amazonas

La Amazonia comprende la selva tropical más extensa de todo el mundo, extendiéndose por el territorio de 9 países sudamericanos. En el seno amazónico, encontramos abundante fauna y flora, por lo cual suele ser considerado como un santuario natural de numerosas especies muy particulares. Se estima que, en el Amazonas, viven más de 15000 especies de animales, muchas de ellas en peligro de extinción.

Si bien todos los animales llaman la atención por motivos particulares, ya sea por su belleza, por su comportamiento o por su rareza, algunas especies amazónicas son reconocidas e igualmente temidas por su poder y peligrosidad. Vale aclarar que ningún animal es cruel por naturaleza, como todavía escuchamos en ciertas ocasiones. Simplemente poseen mecanismos de caza y de defensa que pueden tornarlos potencialmente letales para los seres humanos y demás individuos que amenazan su bienestar o invaden su territorio. Y en este artículo de ExpertoAnimal resumimos algunas curiosidades sobre los 11 animales más peligrosos del Amazonas.

 

1. Araña bananera (Phoneutria nigriventer)

Esta especie araneomorfa perteneciente a familia de los Ctenidae y es considerada, por muchos expertos, como una de las arañas más peligrosas y letales del mundo. Si bien es cierto que su especie aparentada Phoneutria phera, que también habita en las selvas sudamericanas, tiene un veneno más tóxico, también lo es que las arañas bananeras protagonizan el mayor número de picaduras a seres humanos. Ello se debe no solo a su carácter más agresivo y su gran agilidad, sino también a sus hábitos sinantrópicos. Suelen vivir en los plantíos de plátanos y pueden ser encontradas en los puertos y en plena urbe, por lo cual mantienen contacto frecuente con los seres humanos, especialmente con los trabajadores agrarios.

Se trata de una araña de gran tamaño y aspecto imponente, cuyos ejemplares adultos suelen ocupar toda la superficie de la palma de la mano de una persona adulta. Posee dos grandes ojos frontales y dos pequeños ojos ubicados a cada lado de sus patas gruesas y peludas. Sus largos colmillos rojizos llaman la atención y le permite inocular fácilmente su veneno para defenderse o inmovilizar a sus presas.

2. Escorpiones Tityus

En Sudamérica, existen más de 100 especies de escorpiones pertenecientes al género Tityus. Aunque apenas 6 de estas especies son venenosas, sus picaduras recobran cerca de 30 vidas humanas a cada año solo en el norte de Brasil, es por ello que forman parte de la lista de animales más venenosos del Amazonas y peligrosos. Estos frecuentes ataques se justifican por la gran adaptación de los escorpiones a las zonas urbanas, haciendo que su contacto con las personas sea prácticamente diario.

Los escorpiones Tityus venenosos almacenan un poderoso veneno en su glándula bulbosa, que pueden inocular por medio del aguijón curvado que poseen en su cola. Una vez inyectado en el cuerpo de otro individuo, las substancias neurotóxicas del veneno ocasionan parálisis casi instantáneamente, y pueden llevar a un paro cardíaco o respiratorio. Se trata de un mecanismo de defensa, pero también de una poderosa herramienta de caza.

3. Anaconda verde (Eunectes murinus)

La famosa anaconda es una serpiente constrictora endémica de los ríos amazónicos, que compone la familia de las boas. Si bien es reconocida como la especie de serpiente más pesada, puesto que puede llegar a pesar más de 220 kg, existen controversias sobre si es o no la de mayor tamaño. Esto es así debido a que la llamada pitón reticulada (Python reticulatus) suele tener algunos centímetros más de longitud que las anacondas, aunque su peso corporal sea mucho menor.

A pesar de su mala fama conquistada en gran parte por las películas que llevaron su nombre, las anacondas difícilmente atacan a los seres humanos, ya que nosotros no formamos parte de su cadena trófica. Es decir: las anacondas no atacan a los seres humanos para alimentarse. Los raros ataques de anaconda a personas son defensivos, cuando el animal se siente amenazado o atacado de alguna manera. En realidad, las serpientes en general tienen un carácter más bien escurridizo que agresivo. Si pueden escapar o esconderse para ahorrar energía y evitar un enfrentamiento, seguramente lo harán.

4. Caimán o cocodrilo negro (Melanosuchus niger)

Otro de los considerados animales más peligrosos del Amazonas. El caimán negro, también conocido como “Jacaré-açú” en la Amazonia brasileña, es la única especie del género Melanosuchus que sobrevivió. Su cuerpo puede medir hasta 6 metros de longitud y exhibe una coloración negra casi siempre uniforme, estando entre los mayores cocodrilos del mundo. Además de ser un eximio nadador, el caimán negro también es un cazador implacable e inteligente con mandíbulas realmente poderosas. Su alimentación incluye desde pequeños mamíferos, aves y peces hasta animales de gran porte, como venados, monos, capibaras y jabalíes.

5. Anguila eléctrica (Electrophorus electricus)

Las anguilas eléctricas tienen muchos nombres en la cultura popular, de manera que pueden ser llamadas tembladora, pilaké, morena, temblón, gimnoto, entre otros. Mucha gente las confunde con serpientes acuáticas, pero las anguilas son una especie de pez que pertenece a la familia Gymnotidae. En realidad, se trata de una especie única en su género, con características muy particulares.

Sin duda, la característica más reconocida, e igualmente temida, de estas anguilas es su capacidad de trasmitir corrientes eléctricas desde el interior de su cuerpo hacia su exterior. Ello es posible porque el organismo de estas anguilas posee un conjunto de células muy especiales que permiten emitir poderosas descargas eléctricas de hasta 600 W (un voltaje superior al de cualquier enchufe que encontramos en nuestro hogar), y es por este motivo que se considera uno de los animales más peligrosos del mundo amazonas. Las anguilas utilizan esta peculiar habilidad para defenderse, atrapar sus presas, y también para comunicarse con otras anguilas.

6. Víbora barba amarilla (Bothrops atrox)

Entre las serpientes más venenosas de la Amazonia, encontramos la víbora Bothrops atrox, una especie que ha protagonizado un elevado número de ataques letales a seres humanos. Esta cantidad alarmante de mordeduras a personas se explica no solo por el carácter reactivo de dicha serpiente, sino también por su gran adaptación a las zonas habitadas. A pesar de vivir naturalmente en los vastos bosques, las víboras "barba amarilla" se acostumbraron a encontrar abundante alimento en los entornos de ciudades y poblados, ya que los residuos humanos suelen atraer a ratones, lagartijas, pájaros, etc.

Son serpientes de gran porte, que pueden alcanzar fácilmente los 2 metros de longitud. Pueden ser encontrados ejemplares en tonalidades marrones, oliváceas o grisáceas, con o sin rayas y manchas. Estas víboras se destacan por su muy eficaz e ingeniosa estrategia de caza. Gracias a un órgano conocido como “fosetas loreales”, que se ubica entre su hocico y sus ojos, son capaces de detectar fácilmente el calor corporal de los animales de sangre caliente. Al identificar la presencia de alguna presa, la víbora se camufla entre hojas, ramas u otros componentes del camino y ahí espera pacientemente hasta reconocer el momento exacto para un ataque letal. Y raramente fallan…

7. Pirañas amazónicas

El término 'piraña' es utilizado popularmente para denominar a diversas especies de peces carnívoros que habitan los ríos de la Amazonia sudamericana. Las pirañas, también llamadas "caribes” en Venezuela, pertenecen a la vasta subfamilia Serrasalminae, que también comprende algunas especies herbívoras. Son depredadoras voraces que se caracterizan por sus dientes muy afilados y por su gran apetito carnívoro, siendo otro de los animales más peligrosos del Amazonas. No obstante, son peces medianos, que suelen medir entre 15 cm y 25 cm, aunque fueron registrados ejemplares con más de 35 cm de longitud. A pesar de ser capaces de devorar aves y mamíferos enteros en cuestión de minutos, ya que suelen atacar en colectivos, las pirañas difícilmente atacan a los seres humanos y no son tan feroces como pintan las películas.

8. Dendrobátidos o ranas punta de flecha

Cuando hablamos de dendrobátidos, hacemos referencia a una familia y no a una sola especie. La súper familia Dendrobatidae, que está relacionada con la familia Aromobatidae, comprende más de 180 especies de anfibios anuros que son popularmente llamados "ranas punta de flecha" o "ranas venenosas". Estos animales son considerados como endémicos de Sudamérica y parte de Centroamérica, habitando abundantemente en la selva amazónica. En su piel cargan un potente veneno llamado "batracoxina", que solía ser utilizado por los indígenas en las puntas de sus flechas para provocar la rápida muerte de los animales que cazaban para alimentarse y de los enemigos que invadían su territorio.

La especie de Dendrobatidae considerada como la más venenosa del Amazonas es la Phyllobates terribilis. Estos anfibios de color amarillo poseen pequeños discos en sus patas, por lo cual pueden sujetarse sobre las plantas y ramas de la húmeda selva amazónica. Se estima que una pequeña dosis de su veneno puede matar hasta 1500 personas, por lo cual estas ranas punta de flecha están entre los animales más venenosos del mundo.

9. Hormiga guerreras o soldado

Pueden parecer pequeñas a simple vista, pero estas especies de hormigas son cazadoras implacables, que poseen mandíbulas poderosas y muy afiladas. Su nombre popular deriva de su estrategia de ataque: las hormigas soldado, también conocidas como hormigas guerreras, legionarias o marabuntas, nunca atacan solas, sino que conforman numerosos grupos para abatir presas de tamaños muy superiores al suyo. En la actualidad, esta nomenclatura designa informalmente a más 200 especies pertenecientes a diferentes géneros de la familia Formicidae. En la selva amazónica, predominan las hormigas soldado de la subfamilia Ecitoninae.

A través de su picadura, estas hormigas inyectan pequeñas dosis de un veneno tóxico que debilita y disuelve los tejidos de sus presas. Luego, utilizan sus poderosas mandíbulas para descuartizar al animal abatido, lo que les permite alimentarse a sí mismas y a sus larvas. Por ello, son conocidas como las depredadoras más pequeñas y voraces de toda la Amazonia.

Al contrario que la mayoría de las hormigas, las hormigas soldado no conforman un nido, sino que cargan a sus larvas y establecen campamentos temporales donde encuentran buena disponibilidad de alimento y abrigos seguros.

10. Rayas chuchos de agua dulce

Los chuchos de agua dulce conforman un género de peces neotropicales llamado Potamotrygon, que cuenta con 21 especies conocidas. Si bien habitan en todo el continente sudamericano (con excepción de Chile), la mayor diversidad de especies se encuentra en los ríos amazónicos. Estas rayas son voraces depredadoras que, con su boca pegada al fango, succionan gusanos, caracoles, pequeños pescados, lapas y otros animales fluviales para alimentarse.

Por lo general, estas rayas llevan una vida tranquila en los ríos amazónicos. No obstante, al sentirse amenazadas, pueden activar una peligrosa técnica de defensa personal. Desde su musculosa cola, sobresalen numerosas y diminutas espinas, que suelen estar ocultas por una vaina epitelial, y que están cubiertas por un poderoso veneno. Cuando el animal se siente amenazado o percibe un estímulo inusual en su territorio, las espinas cubiertas de veneno se erizan, la raya sacude su cola y la utiliza como un látigo para alejar a sus posibles depredadores. La potente fórmula tóxica de este veneno destruye el tejido cutáneo y muscular, provoca intenso dolor, y también puede ocasionar dificultad para respirar, espasmos musculares y daños irreversibles a órganos vitales, como cerebro, pulmones y corazón. De esta forma, la raya chucho de agua dulce forma parte de los animales más venenosos del Amazonas y peligrosos.

11. Jaguar (Panthera onca)

El jaguar, también conocido como yaguareté, es el felino de mayor tamaño que habita en el continente americano y el tercero más grande de todo el mundo (estando detrás del tigre de Bengala y del león). Además, es la única de las cuatro especies conocidas del género Panthera que puede ser encontrada en América. A pesar de ser considerado un animal muy representativo de la Amazonia, su población total se extiende desde el extremo sur de Estados Unidos hasta el norte de Argentina, incluyendo buena parte de América Central y de Sudamérica.

Como podemos imaginar, se trata de un felino carnívoro de gran tamaño que destaca como un eximio cazador. Su alimentación incluye desde pequeños y medianos mamíferos hasta reptiles de gran porte. Desafortunadamente, es uno de los animales que se encuentra en un alarmante peligro de extinción. De hecho, su población ha sido prácticamente extirpada del territorio norteamericano y se encuentra reducida en todo el territorio sudamericano. En los últimos años, la creación de Parques Nacionales en las regiones selváticas ha colaborado para la preservación de esta especie y para el control de la caza deportiva. A pesar de representar uno de los animales más peligrosos del Amazonas, es una de las criaturas más hermosas y, como decimos, amenazadas debido a la actividad humana. No te pierdas el artículo sobre "Curiosidades de los felinos salvajes" y descubre mucho más sobre estos increíbles animales.

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