¿Los gatos pueden comer aguacate?

Pese a que el aguacate es un alimento sano y seguro para las personas, existen diversas especies animales en las que el consumo de aguacate puede ser perjudicial, como es el caso de los gatos, los perros, los caballos, las cabras, las ovejas, los roedores y algunas aves.

En concreto, el aguacate se considera un alimento no apto para los gatos debido a dos causas:

• Por un lado, es un alimento con un elevado contenido en grasa, por lo que puede favorecer la aparición de sobrepeso y otras enfermedades asociadas al mismo (como lipidosis hepática, pancreatitis, diabetes, etc.)
• Por otro lado, porque el aguacate contiene una sustancia que resulta tóxica para el organismo de los gatos, la persina, de la cual hablaremos más en profundidad en el próximo apartado.

El aguacate se considera un alimento tóxico para los gatos debido a que contiene una sustancia tóxica conocida como persina. La persina es una sustancia antifúngica, presente tanto en las hojas como en el fruto, la semilla y la corteza, que la planta del aguacate produce de forma natural para protegerse frente al crecimiento de hongos. Aunque esta sustancia resulta inocua para las personas, en nuestros animales de compañía puede originar un cuadro de intoxicación.

Lo cierto es que la información publicada acerca de la gravedad de la intoxicación por aguacate en gatos es muy variada. Existen fuentes ^[1] que afirman que los felinos raramente se ven afectados por esta intoxicación. Sin embargo, paralelamente existen fuentes ^[2] que describen cuadros graves de intoxicación por aguacate. Por ello, ante el riesgo que puede plantear el consumo de este alimento, es preferible mantenerlo fuera del alcance de nuestros mininos. Además, recuerda que no solo la pulpa del aguacate contiene persina, sino que también está presente en las hojas, la semilla y la corteza, por lo que debes evitar que tu gato tenga acceso a cualquiera de las partes de la planta y del fruto

En este punto, es preciso mencionar que, aunque se han realizado estudios que han definido la dosis tóxica del aguacate en algunos animales (como ratones y cabras), actualmente no existen datos sobre la dosis de aguacate que resulta tóxica para los gatos. Realizar estudios al respecto permitiría conocer más en profundidad este cuadro de intoxicación en los gatos, su gravedad y patogenia.

La persina presente en el aguacate es capaz de producir toxicidad a dos niveles:

• A nivel cardíaco: en los gatos intoxicados con aguacate, se produce un derrame pericárdico (acumulación de líquido alrededor del corazón), con congestión y dificultad respiratoria.
• A nivel digestivo: puede provocar un proceso inflamatorio en el estómago y el intestino, dando lugar a signos clínicos como vómitos y diarrea.

Aparentemente muchos de los cuadros de intoxicación por aguacate resultan leves o moderados. Sin embargo, también existen reportes de cuadros severos de intoxicación en esta especie. Por ello, si sospechas que tu gato ha consumido aguacate, debes ponerte en alerta y ser consciente del riesgo potencial que puede suponer el consumo de este alimento.

Como hemos mencionado en apartados anteriores, todas las partes del aguacate resultan tóxicas para los gatos, pues todas contienen persina. Entonces ¿qué pasa si mi gato lame un aguacate? En este caso, es probable que la cantidad de tóxico que haya ingerido tu gato no sea suficiente para causar un cuadro de intoxicación propiamente dicho. No obstante, es importante que vigiles permanentemente su estado de salud en las horas posteriores, y en caso de que aparezcan signos de intoxicación como los mencionados, acudas cuanto antes a un centro veterinario.

Conociendo el riesgo potencial que supone este alimento para los gatos, es probable que te estés preguntando qué hacer si tu gato come aguacate de forma accidental. Pues bien, en caso de que sospeches o confirmes que tu gato ha comido un aguacate o alguna otra parte de la planta, lo mejor es que acudas a tu veterinario/a de confianza cuanto antes. Es cierto que muchas de las intoxicaciones por aguacate en los gatos cursan con signos leves, pero dada la posibilidad de que se produzcan cuadros severos de intoxicación, lo mejor es acudir a un centro veterinario para que valoren el estado de salud de tu gato.

En caso de que se detecten signos de intoxicación, será necesario instaurar un tratamiento para evitar los efectos tóxicos de la persina. En concreto, se realizará una descontaminación digestiva empleando diferentes métodos en función del tiempo que haya trascurrido desde la ingesta del fruto (inducción del vómito, lavado gástrico o administración de productos que eviten la absorción del tóxico, como carbón activado).

Como hemos explicado a lo largo del artículo, la planta de aguacate es tóxica para los gatos. No obstante, el aguacate no es el único alimento que puede resultar nocivo para estos animales, sino que existe una larga lista de alimentos perjudiciales para ellos. A continuación, mencionamos los más importantes:

• Cebolla, ajo y puerro: contienen tiosulfato, un compuesto capaz de destruir los glóbulos rojos y producir anemia.
• Uvas y pasas: en grandes cantidades, pueden ocasionar problemas renales y diarreas severas.
• Cítricos: como las naranjas o los pomelos, ocasionan diarrea y dolor estomacal.
• Tomates verdes: los tomates verdes contienen tomatina, una sustancia tóxica para los gatos. No obstante, conforme el tomate va madurando, las concentraciones de este tóxico disminuyen.
• Leche: los gatos adultos suelen desarrollan intolerancia a la lactosa, por lo que no deben consumir leche. Por su parte, los gatitos lactantes únicamente deben consumir leche formulada para gatos, puesto que la leche de otras especies (como la leche de vaca) puede causar diarreas severas.
• Embutidos: su elevado contenido en sal puede provocar efectos perjudiciales sobre los riñones.
• Alimentos dulces: además de que los gatos no son capaces de detectar el sabor dulce, el consumo de azúcar puede ocasionar hiperglucemia e insuficiencia hepática.
• Pescado o carne cruda: pueden contener microorganismos patógenos o parásitos responsables de diversas enfermedades infecciosas o parasitarias. Para evitar riesgos, estos alimentos deben proporcionarse siempre cocinados, o en su defecto, previa congelación.
• Chocolate y café: contiene teobromina, una sustancia capaz de provocar vómitos, diarrea y úlceras gástricas.
• Alcohol: aunque resulta más que evidente, conviene recordar que el alcohol puede originar un cuadro de intoxicación etílica, que puede terminar con la muerte del animal.

En este vídeo hablamos más en profundidad sobre las verduras y frutas que no deberías dar a tu gato:

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