¿Los mapaches son agresivos?

Los mapaches tienen la apariencia de un tierno animal, por lo cual, suelen ser muy atractivos para las personas, sin embargo, es importante tener presente algo: son animales silvestres, no domésticos. De este modo, es fundamental mantener ciertas medidas de distanciamiento con ellos, ya que, en ocasiones, los adultos pueden llegar a atacar tanto a las personas como a los animales de compañía.

En algunas regiones de América cercanas a su hábitat natural, y en otras donde han sido introducidos, como en Europa, estos animales están generando algunos conflictos con las personas:

• Por un lado, porque cuando se adquieren como animales de compañía y luego presentan conductas agresivas, son abandonados a su suerte, haciendo que deambulen en zonas urbanas en las que empiezan a generar inconvenientes de diversa índole. En el artículo sobre El mapache como mascota hablamos en profundidad acerca de si es legal o no tenerlo como animal de compañía y por qué debe vivir en su hábitat natural.
• Por otro lado, la conducta generalista que comúnmente presentan les hace desplazarse con facilidad hacia dichas zonas urbanas. Dado que son animales que se adaptan a diversos tipos de hábitats y alimentación con mucha facilidad, estos espacios urbanos ofrecen condiciones suficientes para que se desarrollen sin mayor dificultad.

Como hemos mencionado, los mapaches pueden llegar a ser agresivos cuando son adultos, es decir, son capaces de atacar a las personas, y, para ello, suelen utilizar sus garras y dientes. Esta conducta se ve potenciada por el hecho de que no son animales tímidos, de modo que ante la presencia humana no se intimidan.

Los animales silvestres están adaptados a ciertas condiciones ecológicas, las cuales se vinculan con sus aspectos biológicos. Cuando estos se cambian, los animales pueden tener respuestas o conductas agresivas, no solo hacia personas, sino también con otros animales, como ha ocurrido con los mapaches que han atacado a animales domésticos y sus tutores ^{[1] [2]}. En este sentido, los mapaches atacan porque no están domesticados y, a pesar de ser generalistas en cuanto a hábitats y alimentación, su origen silvestre se sigue manteniendo, por tanto, no ven a los humanos y animales de compañía como individuos con quienes conviven, sino más probablemente como intrusos, competidores, agresores e incluso en el caso de ciertos animales domésticos, como posibles fuentes de alimentos. Dicho esto, no es que los mapaches sean agresivos o quieran atacar porque sí, es que responden a sus instintos naturales que nos detectan como una posible amenaza.

En los últimos años ha ido en aumento el reporte de conflictos entre mapaches y personas. Aunque algunos de estos son específicamente referidos a agresiones, son más comunes aquellos que tienen que ver con daños, ruidos y desorden en los hogares; en particular en zonas aledañas a los espacios naturales de estos animales, permitiendo que se trasladen más fácilmente a las áreas urbanas en busca de alimentos.

Como hemos mencionado, los mapaches pueden ser agresivos y atacar, mordiendo o arañando con sus fuertes garras, lo que sin duda alguna causaría una herida en la persona afectada. Pero, ante la mordida de un mapache, la herida no es lo único que debe generar preocupación, puesto que estos animales pueden causar diversas enfermedades infecciosas y parasitarias por ser transmisores de algunos patógenos.

Un ejemplo de lo anterior es la rabia, la cual es causada por un virus que se transmite por la mordedura de ciertos animales como el mapache. Esta enfermedad, como ya se sabe, origina serias consecuencias en una persona infectada. Otro patógeno que propaga el mapache es Baylisascaris procyonis. Dependiendo de si ataca los ojos, ciertos órganos o el cerebro, puede originar daños severos. Estas patologías también pueden ser transmitidas a otros animales, como perros o gatos. Además, suelen portar otros virus y bacterias, que son capaces de enfermar a los seres humanos.

En este sentido, si un mapache llegara a morderte, es necesaria la inmediata atención médica, no solo para tratar la herida, sino también para que se tomen las medidas adecuadas que prevengan ciertas enfermedades. Otro aspecto importante a tener en cuenta es la posibilidad de contactar a personal especializado que capture al animal con el fin de hacer una evaluación veterinaria y verificar su estado de salud, lo que permitiría conocer de forma precisa si este es portador de alguno de los patógenos que causan enfermedades. Esto sin duda facilitaría el tratamiento.

En ciertas áreas es muy común observar a los mapaches, por ello, siempre será recomendable mantenerse alejados de ellos por más dóciles y atractivos que puedan parecer. Estos son animales con sentidos bien desarrollados y considerados con cierto grado de inteligencia, por tanto, no es recomendable ofrecerles comida de forma directa para evitar una posible agresión por parte de ellos. Recuerda que pueden tomarnos como una amenaza. Además, es posible que la comida que le quieras ofrecer no sea del todo adecuada. Aunque la alimentación del mapache es muy variada, siempre hay que tener precaución.

Po otro lado, si habitas lugares donde suelen estar estos animales, también es importante que tomes las precauciones necesarias en tu hogar para evitar que entren y lo consideren como su guarida, en especial las madres con sus crías. De esta manera se disminuye la posibilidad de encuentros imprevistos con ellos, que podrían asustarlos y producir un tipo de conflicto.

La idea no es generar temor hacia los mapaches, pero sí es importante concienciar hacia conductas adecuadas con respecto a ellos para no molestarlos. Recordemos que por muy inteligentes que sean algunos animales, no tienen la capacidad de raciocinio, de modo que sus conductas responden a su naturaleza silvestre, por lo cual no son responsables en ningún caso del daño que puedan causar.

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