Metritis en perras - Síntomas, causas y tratamiento

Metritis en perras - Síntomas, causas y tratamiento

La metritis en perras es una infección bacteriana que tiene lugar en el útero durante el parto o poco tiempo después. Hay distintas causas implicadas en su desarrollo, como veremos en este artículo de ExpertoAnimal. Por eso, es muy importante que una perra gestante reciba todos los cuidados necesarios tanto en el momento de los nacimientos como durante todo el posparto.

La metritis es una enfermedad que requiere de una rápida intervención veterinaria, ya que podría tener consecuencias fatales para la perra. De esta forma, si observas los síntomas que mencionaremos a continuación, deberás visitar al veterinario con urgencia. Sigue leyendo para conocer en qué consiste el tratamiento de la metritis en perras y cómo evitar este problema.

Causas de metritis en perras o infección de útero

La metritis en perras se debe a bacterias que consiguen ascender hasta llegar al útero, desencadenando una infección. Las causas más frecuentes de esta enfermedad son las que permiten el sobrecrecimiento bacteriano y, en consecuencia, exponen a la perra a las bacterias. Destacan las siguientes:

  • Retención placentaria.
  • Momificación de algún feto.
  • Contaminación del canal del parto tanto durante el parto como después.
  • Falta de higiene del lugar del parto.
  • No retirar las placentas si la perra no las ingiere.
  • No cambiar la cama tras el parto.

Síntomas de metritis en perras

Los síntomas de la metritis en las perras pueden apreciarse entre dos y siete días después de que haya tenido lugar el parto. Los signos que nos deben hacer sospechar de una infección de útero en la perra son los siguientes:

  • Letargo.
  • Anorexia.
  • Fiebre.
  • Dejar de cuidar a los cachorros.
  • Vómitos.
  • Diarrea.
  • Flujo vaginal con muy mal olor, que es lo que lo diferencia de los loquios normales tras el parto.
  • Más sed de lo habitual.
  • Si la perra no recibe tratamiento la infección puede propagarse con rapidez a la sangre y causar shock y muerte.

Aunque todas las señales anteriores son graves, si apreciamos flujo vaginal de color marrón, podemos estar ante una metritis aguda que debe ser tratada de inmediato. Como consecuencia de este flujo, es muy probable que veamos a la perra lamerse la vulva con frecuencia, de manera que este signo también puede alertarnos, llevándonos a vigilarla para que no se lama y podamos, así, comprobar si efectivamente existe secreción.

Tratamiento para la metritis en perras

El veterinario debe revisar de inmediato a una perra con síntomas como los descritos. Palpando el abdomen o realizando una ecografía es posible descubrir la presencia de algún resto placentario o feto que se hayan quedado retenidos en el útero.

Lo ideal es tomar una muestra para hacer un cultivo y saber exactamente qué bacterias están causando la infección uterina en la perra. De esta forma, el veterinario nos podrá prescribir el tratamiento antibiótico más adecuado para combatirlas. Dada la gravedad de esta infección, la rapidez con la que se puede propagar y su potencial para causar la muerte, el tratamiento se administra por vía intravenosa.

Para ello, es necesario ingresar a la perra, ya que también va a recibir fluidoterapia y hormonas como oxitocina o prostaglandina para vaciar el útero. En ocasiones, el veterinario también irriga directamente el útero con suero o un desinfectante. En los casos más graves, queda como última opción la cirugía para extraer los ovarios y el útero. Es una operación a vida o muerte. Las perras que se recuperan pueden mantener una infección persistente de carácter leve en las paredes del útero, se denomina endometritis y se recomienda la castración de las perras afectadas.

¿Qué ocurre con los cachorros de las perras con metritis?

Los casos más graves de metritis en perras tienen como consecuencia que se encuentren demasiado enfermas como para ocuparse de sus cachorros. Si esto sucede somos nosotros los que nos tendremos que hacer cargo de ellos y alimentarlos con leche artificial especialmente formulada para perros. El veterinario nos explicará qué cuidados debemos dispensarles. Para más detalles, recomendamos revisar este artículo: "¿Cómo alimentar a cachorros recién nacidos?".

Prevención de la metritis en perras

Entendiendo cómo se desencadena la metritis en las perras, es posible prevenir esta infección. Una buena medida es que el veterinario revise a la perra aproximadamente a las 24 horas del parto. De esta manera, por ejemplo, puede ayudar a vaciar el útero si es necesario, ya que en él pueden quedar restos capaces de desencadenar la infección de útero.

También es buena idea tomarle la temperatura tras el parto una vez al día. Para ello, solo tenemos que introducir con suavidad un termómetro por vía rectal. De esta forma, podremos detectar cualquier elevación de la temperatura y contactar con el veterinario a la mínima sospecha de enfermedad. Es básico tratar rápido la metritis.

Aunque las medidas anteriores permiten detectar a tiempo una metritis en la perra, sin lugar a dudas la forma de prevenirla por completo es mediante la castración. De esta manera, no solo evitaremos que desarrolle una infección de útero, sino que también podremos prevenir otros problemas de salud como la piómetra y, por supuesto, el nacimiento de camadas no deseadas. En el siguiente vídeo hablamos de las diferencias entre castrar y esterilizar.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

Si deseas leer más artículos parecidos a Metritis en perras - Síntomas, causas y tratamiento, te recomendamos que entres en nuestra sección de Enfermedades infecciosas.

¿Tienes contratado el Seguro de Responsabilidad Civil obligatorio para perros? Consiguelo al mejor precio rellenando el formulario con tus datos y los de tu mascota haciendo clic en este botón:

Bibliografía
  • Carlson y Giffin. (2002). Manual práctico de veterinaria canina. Madrid. Editorial el Drac.