Oso pardo

Oso pardo

El oso pardo (Ursus arctos) es un animal habitualmente solitario, sólo se los ve en grupos cuando son cachorros con su madre, que suelen estar con ella durante algunos meses o incluso años. También forman agregaciones junto a zonas de abundante comida o en época de celo. A pesar de su nombre, no todos los osos pardos tienen ese color. Algunos individuos son tan oscuros que parecen negros, otros tienen un tono dorado claro y otros tantos pueden presentar un pelaje grisáceo.

En esta ficha de ExpertoAnimal os contaremos sobre esta especie de osos que cuenta con 18 subespecies (algunas extintas). En España tenemos la subespecie ibérica (Ursus arctos pyrenaica). Hablaremos sobre sus características físicas, hábitat, alimentación y otras muchas curiosidades.

Origen
  • América
  • Asia
  • Europa

Origen del oso pardo

El oso pardo es originario de Eurasia y Norteamérica, habiendo existido también en África, pero esta subespecie ya está extinta. Su ancestro, el oso cavernario, fue divinizado por los antiguos humanos, siendo una deidad para las culturas antiguas.

La presencia de osos en Asia y Norteamérica es muy homogénea y las poblaciones están poco fragmentadas, a diferencia de las poblaciones en Europa occidental, donde la mayoría han desaparecido, quedando relegadas a zonas montañosas aisladas. En España, podemos encontrar osos pardos en la cordillera Cantábrica y en Pirineos.

Características del oso pardo

El oso pardo tiene muchas características de carnívoro, como sus colmillos largos y puntiagudos para desgarrar carne y un tubo digestivo corto. Sus muelas, en cambio, son planas, preparadas para machacar vegetales. Los machos pueden alcanzar un peso de 115 kg y las hembras 90 kg.

Son plantígrados, es decir, apoya completamente las plantas de las patas al andar. También pueden erguirse sobre sus patas traseras para ver mejor, alcanzar comida o marcar árboles. Es capaz de trepar y nadar. Son animales longevos, viven entre 25 y 30 años en libertad y, algunos años más cuando viven en cautiverio.

Hábitat del oso pardo

Los parajes favoritos de los osos pardos son los bosques, donde pueden encontrar una gran variedad de alimentos, hojas, frutos y otros animales. El oso varía el uso del bosque según la estación. Durante el día, escava el suelo para fabricarse camas poco profundas y, durante el otoño busca zonas más rocosas. Durante el invierno, utilizada cuevas naturales o las excava para hibernar y son llamadas oseras.

Dependiendo de la zona en la que vivan, tienen territorios más o menos grandes. Estos territorios son más amplios en zonas boreales, tanto en América como Europa. Los osos que viven en zonas más templadas, al ser los bosques más tupidos, tienen una mayor fuente de alimento y necesitan menos territorio.

Alimentación del oso pardo

A pesar de tener características de carnívoro, el oso pardo lleva una dieta omnívora, muy influenciada por la época del año, donde predominan los vegetales. Durante la primavera su dieta se basa en herbáceas y algún cadáver de otros animales. En verano, cuando los frutos maduran, se alimentan de ellos, en ocasiones, aunque es muy raro, pueden atacar al ganado doméstico y seguir comiendo carroña, además buscan la preciada miel y hormigas.

Antes de la hibernación, durante el otoño, para aumentar la ingesta de grasa, se alimentan de bellotas de distintos árboles, como hayas y robles. Es el momento más crítico, pues el alimento comienza a escasear y de él depende el éxito de supervivencia del invierno. Los osos necesitan comer entre 10 y 16 kg de alimento cada día.

Reproducción del oso pardo

El celo de las osas tiene lugar en primavera, tienen dos ciclos que pueden durar entre uno y diez días. Los oseznos nacen dentro de la cueva donde su madre pasa el periodo de hibernación, durante el mes de enero, y pasan con ella un año y medio aproximadamente, por lo que las hembras pueden tener cachorros cada dos años. Suelen nacer entre 1 y 3 cachorros.

Durante el celo, tanto los machos como las hembras copulan con varios individuos diferentes para así evitar el infanticidio por parte de los machos, que no saben con seguridad si son sus crías o no.

La ovulación es inducida, por lo que sólo se produce si hay cópula, lo que aumenta las posibilidades de embarazo. El óvulo no se implanta inmediatamente, sino que queda flotando por el útero hasta otoño, cuando se fija y comienza verdaderamente la gestación que dura dos meses.

Hibernación del oso pardo

En otoño lo osos pasan por un periodo de hiperalimentación, donde ingieren más calorías de las necesarias para la supervivencia diaria. Esto les sirve para acumular grasas y poder superar la hibernación, cuando el oso deja de comer, beber, orinar y defecar. Además las hembras preñadas necesitarán energía para dar a luz y alimentar a sus cachorros hasta la primavera, cuando saldrán de la osera.

En este periodo, el ritmo cardíaco disminuye de 40 pulsaciones por minuto a solo 10, la frecuencia respiratoria desciende a la mitad y la temperatura baja unos 4 ºC.