Enfermedades respiratorias

Parálisis laríngea en perros - Síntomas, causas y tratamiento

 
Cristina Pascual
Por Cristina Pascual, Veterinaria. 19 noviembre 2021
Parálisis laríngea en perros - Síntomas, causas y tratamiento
Perros

Ver fichas de Perros

La parálisis laríngea es una patología que afecta a las vías respiratorias superiores en la que los cartílagos laríngeos no se abren (abducen) correctamente durante la inspiración. Puede tener un origen congénito o adquirido y, a su vez, puede ser uni o bilateral. En los animales que se mantienen asintomáticos no resulta necesario instaurar ningún tratamiento. No obstante, en aquellos pacientes en los que la enfermedad produce una insuficiencia respiratoria que compromete la calidad de vida y el bienestar del animal, es necesario llevar a cabo un tratamiento quirúrgico adecuado.

Si quieres saber más acerca de la parálisis laríngea en perros, sigue leyendo el siguiente artículo de ExpertoAnimal donde te explicamos cuáles son sus síntomas, causas y tratamiento.

Índice

  1. ¿Qué es la parálisis laríngea en perros?
  2. Síntomas de parálisis laríngea en perros
  3. Causas de parálisis laríngea en perros
  4. Diagnóstico de la parálisis laríngea en perros
  5. Tratamiento para la parálisis laríngea en perros
  6. ¿Cómo prevenir la parálisis laríngea en perros?

¿Qué es la parálisis laríngea en perros?

La parálisis laríngea consiste en una alteración obstructiva de las vías respiratorias superiores en la que los cartílagos aritenoides de la laringe no se abren (abducen) correctamente durante la inspiración, debido a una pérdida de la inervación del músculo cricoaritenoideo dorsal.

El músculo cricoaritenoideo dorsal se encarga del movimiento de la laringe. Al perderse la inervación de este músculo, se inhibe su contracción y se atrofia. En consecuencia, los cartílagos aritenoides de la laringe no se abren correctamente y se estrecha la rima glotis (apertura de la laringe) durante la inspiración, aumentando el esfuerzo inspiratorio.

En función de los músculos afectados, encontramos los siguientes tipos de parálisis laríngea en perros:

  • En caso de que solo se afecte el músculo cricoaritenoideo dorsal de un lado de la laringe (unilateral) hablamos de hemiplejia laríngea.
  • Si se afectan los músculos de ambos lados de la laringe (bilateral) hablamos de parálisis completa.

Cabe destacar que la parálisis laríngea es una de las alteraciones que pueden formar parte del Síndrome braquicefálico, estando presente en el 30 % de los perros que padecen este síndrome.

Síntomas de parálisis laríngea en perros

Los signos clínicos que podemos encontrar en perros con parálisis laríngea son:

  • Estridor laríngeo: sonido respiratorio anormal que se produce durante la inspiración. Al estrecharse la rima glotis, aumenta la resistencia al paso del aire y se generan turbulencias, lo que origina el estridor laríngeo.
  • Intolerancia al ejercicio: en algunos casos, se puede llegar a producir un síncope.
  • Disfagia: dificultad para deglutir. Es frecuente que se produzcan accesos de tos durante la toma de alimentos o agua. En algunos animales, se llegan a producir cuadros de neumonía por aspiración debido al paso de alimentos hacia las vías respiratorias.
  • Alteración de la fonación: se pueden detectar variaciones con respecto al ladrido habitual, pudiendo llegar a la afonía en algunos casos.
  • Disnea inspiratoria: dificultad respiratoria que afecta solo a la fase inspiratoria de la respiración.
  • Taquipnea: frecuencia respiratoria aumentada.
  • Cianosis: coloración azulada de las mucosas debido a una oxigenación insuficiente de la sangre.

El signo clínico más frecuente es el estridor laríngeo (presente en el 97 % de los casos), seguido de la intolerancia al ejercicio (87 %), disfagia (41 %) y variación de la fonación (39 %).

Cabe destacar que la sintomatología se puede agravar con el ejercicio físico intenso, las situaciones de estrés o los ambientes con temperaturas y humedades elevadas.

Causas de parálisis laríngea en perros

La parálisis laríngea puede ser de dos tipos:

  • Congénita: cuando los perros nacen con esta patología.
  • Adquirida: cuando los perros desarrollan esta patología a lo largo de su vida como consecuencia de causas muy diversas.

Parálisis laríngea congénita

Aparece en razas como el husky siberiano, el rottweiler, el boyero de Flandes, el bull terrier y el dálmata. En algunos casos, se ha demostrado la existencia de un gen autosómico dominante que es el responsable de la heredabilidad de esta enfermedad.

Los perros con parálisis laríngea congénita presentan esta alteración desde el nacimiento, aunque los signos asociados a la misma no suelen aparecer hasta los 5-8 meses de edad.

Parálisis laríngea adquirida

Aparece en razas como el labrador retriever, el golden retriever, el San Bernardo o el setter irlandés. Es más frecuente que la forma congénita de la enfermedad.

Las causas que puede originar una parálisis laríngea adquirida en el perro son muy variadas:

  • Traumatismos (mordeduras, heridas, cuerpos extraños, cirugías) que afecten al nervio laríngeo recurrente.
  • Compresión del nervio laríngeo recurrente por neoplasias tiroideas, masas o abscesos en el cuello o mediastino.
  • Hipotiroidismo.
  • Polimiositis o miastenia gravis.
  • Polineuropatías de origen metabólico, tóxico o infeccioso.
  • Causas inmunomediadas.

No obstante, se debe tener en cuenta que en la mayoría de casos no se llega a conocer la causa que desencadena la parálisis, sino que en muchas ocasiones es una patología idiopática, es decir, de origen desconocido.

Diagnóstico de la parálisis laríngea en perros

Él diagnóstico de la parálisis laríngea en perros se debe basar en los siguientes puntos:

  • Exploración física, prestando especial atención al examen neurológico para poder evaluar posibles miopatías o neuropatías. En la exploración neurológica se buscarán signos como debilidad o paresia, disminución de los reflejos espinales o atrofia muscular.
  • Laringoscopia (endoscopia a nivel de la laringe) para observar que durante la inspiración no se produce la apertura (abducción) de los cartílagos aritenoides de la laringe. Además, se puede observar una falta de tono en las cuerdas vocales y una alteración de los tejidos adyacentes, con edema y eritema. La laringoscopia se debe hacer bajo sedación ligera, ya que, en caso de sedación profunda, se anularán los reflejos de la laringe y se diagnosticará un falso positivo.
  • Radiografías de tórax para comprobar la existencia de otras alteraciones musculares (como megaesófago), masas mediastínicas o intratorácicas y neumonías por aspiración.
  • Análisis de sangre con perfil tiroideo: es importante descartar que la causa de la parálisis sea el hipotiroidismo, ya que en estos casos el tratamiento no revierte la parálisis. Además, se podrán realizar pruebas laboratoriales específicas para detectar enfermedades neuromusculares generalizadas o miastenia gravis.

Es importante saber que el manejo de estos perros en la clínica veterinaria debe ser especialmente cuidadoso, ya que las situaciones de estrés pueden desencadenar una crisis cianótica.

Parálisis laríngea en perros - Síntomas, causas y tratamiento - Diagnóstico de la parálisis laríngea en perros

Tratamiento para la parálisis laríngea en perros

Las hemiplejias o parálisis unilaterales no se suelen tratar, dado que normalmente no comprometen la vida del animal. Sin embargo, en caso de parálisis completa o bilateral, se debe recurrir a un tratamiento quirúrgico, dado que los animales suelen presentar una insuficiencia respiratoria de moderada a grave que compromete enormemente su calidad de vida y su bienestar.

En la actualidad, existen múltiples técnicas quirúrgicas para tratar la parálisis laríngea en perros. A continuación, enumeramos las tres más importantes:

  • Lateralización uni o bilateral del cartílago aritenoides o “tie back”.
  • Ventrículo-cordectomía.
  • Laringectomía parcial.

Todas ellas tienen por objeto agrandar la rima glotis (apertura laríngea) para facilitar el paso de aire. La apertura debe ser suficiente para favorecer el paso de aire, pero no excesiva, ya que podría incrementar el riesgo de neumonía por aspiración. Por ello, las técnicas quirúrgicas más agresivas se deben descartar. Actualmente, la técnica de elección es la lateralización unilateral del cartílago aritenoides realizando suturas a baja tensión. Tanto la ventrículo-cordectomía como la laringectomía parcial producen resultados inconstantes con un alto índice de complicaciones, por lo que son técnicas menos recomendables.

Cuidados en el postoperatorio

Tras la cirugía de la parálisis laríngea se deben tener en cuenta los siguientes cuidados:

  • Es importante conseguir una recuperación anestésica suave para evitar la agitación del paciente. Además, en el periodo postoperatorio inmediato es prioritario garantizar la correcta oxigenación del paciente.
  • Se instaurará un tratamiento con corticoides para reducir el riesgo de edema e inflamación de la laringe.
  • Pasadas 24 horas, se debe ofrecer una pequeña cantidad de agua al animal. Si el paciente la tolera correctamente, se pueden empezar la alimentación húmeda. Pasadas dos semanas, se ofrecerá alimento seco. En caso de que no tolere el pienso seco (aparezca tos, disfagia, etc.), se mantendrá el alimento húmedo otras dos semanas. Si se sigue una dieta casera, será igualmente importante ofrecerla lo más blanda posible, así como optar por alimentos de fácil digestión.
  • Se debe restringir el ejercicio físico durante 3 semanas, aunque la mejora de la insuficiencia respiratoria suele ser inmediata.
  • Durante los paseos es preferible el uso de arneses en vez de collar.

Complicaciones postoperatorias

En el periodo postoperatorio de la cirugía de parálisis laríngea en perros es importante atender a la aparición de posibles complicaciones, ya que se dan en casi el 35 % de los casos. Las principales complicaciones son:

  • Edema laríngeo por manipulación excesiva. Para evitar esta complicación se suele instaurar una terapia con corticoides en el postoperatorio.
  • Complicaciones menores: mantenimiento de la tos o el estridor, intolerancia al ejercicio, vómitos o seromas.
  • Complicaciones mayores: neumonía por aspiración (el riesgo es mayor durante los primeros días tras la operación, aunque se mantiene durante toda la vida, ya que la mayor apertura de la laringe puede favorecer el paso de alimentos al tracto respiratorio).

Pronóstico

A pesar de que las complicaciones postquirúrgicas son bastante frecuentes, la mayoría no son graves y el pronóstico a corto y medio plazo es favorable. De hecho, casi el 90 % de los cuidadores de perros que padecen parálisis laríngea notan una mejoría clínica notable de su compañero tras la cirugía.

No obstante, se debe tener en cuenta que la presencia de otras patologías de forma concomitante (neoplasias, megaesófago, polineuropatías, etc.) empeora el pronóstico de estos pacientes.

¿Cómo prevenir la parálisis laríngea en perros?

En el caso de la parálisis laríngea congénita se ha demostrado que en algunas razas existe un gen autosómico dominante que es el responsable de la heredabilidad de esta enfermedad. Por tanto, como medida preventiva, se debe evitar que los perros que nazcan con esta patología se reproduzcan para prevenir que la enfermedad se transmita a su descendencia.

Sin embargo, la prevención de la parálisis laríngea adquirida es mucho más difícil. Por un lado, porque muchas de las causas que la producen (neoplasias, polineuropatías, polimiositis) no se pueden prevenir y, por otro lado, porque en la mayoría de casos la patología es idiopática, es decir, tiene un origen desconocido.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

Si deseas leer más artículos parecidos a Parálisis laríngea en perros - Síntomas, causas y tratamiento, te recomendamos que entres en nuestra sección de Enfermedades respiratorias.

¿Tienes contratado el Seguro de Responsabilidad Civil obligatorio para perros? Consiguelo al mejor precio rellenando el formulario con tus datos y los de tu mascota haciendo clic en este botón:

Bibliografía
  • Gaber, C.E. (1985). Laryngeal paralysis in dogs. A review of 23 cases. J Am Vet Med Assoc; 186:377
  • Griffin, J.F. Krahwinkel, D.J. (2005). Laryngeal paralysis: pathophysiology, diagnosis and surgical repair. Compend Cotin Educ Pract Vet; 27:857-69
  • Jiménez, M. (2019). Parálisis laríngea. Asociación de Veterinarios de Pequeños Animales (AVEPA)
Escribir comentario
Añade una imagen
Haz clic para adjuntar una foto relacionada con tu comentario
¿Qué te ha parecido el artículo?
1 de 2
Parálisis laríngea en perros - Síntomas, causas y tratamiento