¿Por qué a mi gato le suenan las tripas?

En la actividad digestiva normal, como hemos dicho, se producen ruidos a consecuencia de los movimientos gastrointestinales y de los gases. Tras comer es normal que, si acercamos la oreja a la barriga de nuestro gato, escuchemos unos suaves borborigmos.

Estos ruidos también se producen en el caso contrario, es decir, cuando el estómago se encuentra vacío. Lo que suena entonces es el gas, aunque es difícil encontrarnos en esta situación ya que lo normal es que nuestro gato tenga en casa comida a su libre disposición, por lo que es raro que pase horas con el estómago vacío.

Estos borborigmos pueden ser más fuertes si ha coincidido con que el gato ha tragado demasiado aire al comer, por ejemplo si le ofrecemos algún alimento que le entusiasme y lo coma con ansia. Se debería solucionar dándole la comida en raciones más pequeñas y frecuentes.

Fuera de esta normalidad, si los borborigmos de nuestro gato son muy fuertes, continuos y, además, presenta otra sintomatología podemos pensar en ciertas alteraciones que explican por qué a nuestro gatito le suenan las tripas. Las veremos en los siguientes apartados.

A veces, unos borborigmos considerables pueden indicar la presencia de parásitos internos. Parásitos como los coccidios o las giardias van a provocar, también, diarrea. Aunque en gatos adultos sanos los parásitos no suelen representar un problema, en animales ya enfermos, muy mayores o muy pequeños sí pueden revestir gravedad, pues una diarrea profusa en estos casos puede conducir a una rápida deshidratación.

Por lo tanto, si a tu gatito le rugen las las tripas debes ponerlo en conocimiento de tu veterinario, aunque ya lo hayas desparasitado. Tu gatito se ha podido volver a infestar o puede que el producto que se le ha administrado no haya cubierto los parásitos que tiene. Además, no siempre es fácil identificar de cuáles se trata y puede necesitarse tomar varias muestras de heces y de distintos días. Antes de darle a nuestro gato con borborigmos y diarrea algún desparasitador debemos consultar con nuestro veterinario ya que si los síntomas no están producidos por parásitos desparasitar puede ser contraproducente.

En este apartado englobaremos las diferentes causas que pueden dificultar la digestión y, por este motivo, explicar por qué a nuestro gato le suenan las tripas. Son las siguientes:

• Cuerpo extraño: aunque es un problema más común en perros, los gatos también pueden tragarse objetos, sobre todo hilos o cuerdas, que dificulten su tránsito intestinal y, en consecuencia, produzcan borborigmos pero, también, obstrucciones, lesiones o incluso perforaciones. Por lo tanto, si nuestro gato, además de rugir de tripas presenta vómitos o inapetencia, debemos acudir a nuestro veterinario.
• Malabsorción o mala digestión: existen diversas causas que pueden afectar al sistema digestivo y hacer que este no absorba los nutrientes que contienen los alimentos de una manera eficaz. Además de borborigmos, nuestro gato, aun alimentado con pienso de calidad, puede presentar un aumento en la ingesta de comida, gases o adelgazamiento, entre otros síntomas. Es una situación que también va a requerir asistencia veterinaria. Suele producirse por problemas pancreáticos.
• Empacho: aunque es más habitual en perros, en gatos también puede darse el empacho, sobre todo si el animal tiene acceso a un alimento que le gusta especialmente o se trata de un gato que recogemos desnutrido y come demasiada cantidad de una vez. Escucharemos borborigmos tras esta ingesta excesiva y estos deberían remitir en unas horas. Si continúan o se dan otros síntomas debemos consultar con nuestro veterinario. También pueden producirse borborigmos si cambiamos de repente la comida de nuestro gato.
• Disbiosis: podemos explicarla como una alteración de la flora normal del sistema digestivo de nuestro gato. La rotura del equilibrio de esta microbiota puede ser la explicación a por qué a nuestro gato le rugen las tripas. Si no se restablece este equilibrio debemos consultar con nuestro veterinario.

Como vemos, si a nuestro gato le suenan las tripas en un momento puntual, que generalmente va a ser antes o después de comer, no será motivo de preocupación y remitirá por sí solo en unas horas. Por el contrario, si los borborigmos se acompañan de vómitos, diarrea o cualquier otra muestra de malestar debemos acudir al veterinario.

Cuando nuestro gato tiene borborigmos frecuentes que además se prolongan en el tiempo y van acompañándose de otros síntomas como puede ser la descomposición, los vómitos o el adelgazamiento podemos pensar en que padece alguna patología intestinal, como puede ser la enfermedad inflamatoria, más habitual en gatos adultos.

En ocasiones los síntomas son leves e inespecíficos, no siendo muy sencillo su diagnóstico, para el que llega a recurrirse a la endoscopia y a la biopsia, que sirve para diferenciar esta enfermedad del linfoma intestinal. En este caso la enfermedad inflamatoria explica por qué a nuestro gato le suenan las tripas. Como vemos, aunque los borborigmos no suelen indicar patología, debemos prestarles atención, especialmente cuando se prolongan y el gato muestra otros síntomas.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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