A muchas personas les encantan los perros yorkshire pero prefieren tener otra raza, porque se dice que son uno canes muy ladradores que se encuentran ladrando todo el día y a todo mundo. Si bien es cierto que, al emocionarse mucho, un yorkshire tiende a expresar sus emociones a través de su ladrido, este no tiene porque representar una constante y tampoco llegar a ser molesto.
Los yorkies se han ganado la fama de ser los mini perros, grandes ladradores, pero esto no es la regla. Como siempre, todo dependerá de la crianza que le des a tu perro desde pequeño, o si ha llegado a tu hogar de grande, de la forma como lo acostumbras a estar cerca de ti y a su nuevo entorno.
Si tu yorkshire es del tipo ladrador crónico y lo hace cada vez que se le acerca alguien o que escucha cualquier sonido, continúa leyendo este artículo animal donde profundizaremos acerca del tema y exploraremos las posibles causas y soluciones a tu pregunta ¿por qué mi yorkshire ladra mucho?
Pero ¿por qué ladra tanto?
Los yorkshire son perritos inteligentes, adorables y tiernos pero algunos se la pasan ladrando todo el tiempo. Mi madre tiene cuatro yorkies en casa y debo decir que la educación que les ha dado ha sido excelente, y he llegado a la conclusión que esto de que los yorkshire son ladradores extremos, no tiene porque ser la regla fija.
Todos los perros yorkshire ladran de vez en cuando, de hecho, el ladrido es la forma de expresarse que tienen los perros. Históricamente esta raza ha sido criada y acostumbrada a hacer ruido como forma de aviso cuando encuentra algún objeto o algo llama su atención. Como una persona usa el habla, los yorkis ladran, lo que sucede es que el ladrido es particularmente agudo, escandaloso y llama mucho la atención.
Estos canes son muy sensibles y se dejan llevar, con facilidad, por las emociones. Cuando esté contento querrá ladrar, cuando esté molesto, aburrido y quiera llamar tu atención también.
Soluciones para minimizar el ladrido
No querrás eliminar por completo el ladrido (forma de expresión) de tu yorkie, pero lo que sí puedes hacer es reducirlo. Lo primero será cultivar tu paciencia porque tu yorkie intentará ladrar siempre que sienta que debe decir algo, la clave para equilibrar su estado de animo y controlar sus ladridos, es entrenarlo para que no se agite y sobrexcite demasiado. Recuerda que algunos yorkies pueden tener tendencia al nerviosismo.
Segundo y como regla para todo el bienestar perruno, es el ejercicio y pasar tiempo juntos. Sal con él a pasear y asegúrate que descargue toda la energía que lleva por dentro y que necesita sacar. Los yorkies son perros muy activos que les gusta estar moviéndose todo el tiempo, no queremos que su energía reprimida se traduzca después en ladridos intensos. Seguro tu perro ladra cuando te está diciendo que se encuentra muy aburrido. Si se encuentra aburrido deberías pensar en utilizar juegos de inteligencia para perros.
Algo básico, pero difícil, es que intentar no reforzar el ladrido como un buen comportamiento. Es decir, si ladra de forma constante, pero ves que ya lo has sacado y que no hay razones aparentes por las que esté ladrando, no le des demasiada atención a esto ni sientas pena, tampoco le pongas más comida ni premios. Tal cual un niño, tu perro tiene la facultad de la manipulación a través de la empatía y el amor. Dale lo que quiere cuando esté tranquilo, no cuando esté ladrando.
Si le gritas o te alteras cuando se encuentra ladrando, con el propósito que deje de hacerlo, lograrás un efecto contrario negativo, es decir, obtendrás más ladridos, confusión, miedo y hasta aumentar su ansiedad. Habla con él en silencio, con autoridad pero en calma.
Entréna a tu yorkshire con constancia para que sepa cuando es momento de ladrar y cuando es momento de estar callado. Puedes empezar con indicaciones sencillas como sentarse, acostarse o dar la pata y progresa a partir de ahí. Cuando sea el momento del entrenamiento, intenta que tu perro enfoque toda su atención hacia ti, busca que no se distraiga y excite con los sonidos y eventos a su alrededor, esto ayudará que luego, en otro momento, cuando le vayas a hacer un llamado, logre verlo de la misma manera. No le grites ¡Juanito deja de ladrar! desde otra habitación donde no te alcance a ver, acércate, acapara su atención e intenta corregir el comportamiento.
Es importante tomar acciones a tiempo y crear un vínculo emocional estrecho con tu perro para que él sienta que puede expresar sus emociones de otra forma que no sea, sólo, a través del ladrido. Tus vecinos y tu tranquilidad te lo agradecerán y tu perro estará emocionalmente más estabilizado.
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