El prolapso rectal en perros, por fortuna, no es un problema muy frecuente, pero hay situaciones en las que puede producirse y, por ello, conviene saber en qué consiste, cuáles son las señales que lo identifican y, sobre todo, cómo debemos actuar ante un prolapso anorrectal.
Todo ello lo explicaremos en este artículo de ExpertoAnimal. Una rápida intervención es clave para evitar complicaciones que pueden acabar produciendo daños considerables en nuestro perro.
A mi perro se le ha salido el ano
Observar que del ano de nuestro perro protruye algo que no son heces supone una situación que provoca una gran alarma en cualquier cuidador, sobre todo si piensa que se trata de algún órgano interno, generalmente las tripas. En realidad, es muy probable que estemos ante lo que se conoce con el nombre de prolapso rectal en perros o prolapso anorrectal, que no es más que una protrusión de tejido anorrectal, es decir, su salida hacia el exterior del cuerpo a través del ano.
Generalmente esta salida se produce como consecuencia de algún esfuerzo considerable, como el que puede hacer el perro al defecar si tiene algún problema. Esto es lo que sucede, por ejemplo, en casos de estreñimiento grave o, al contrario, de diarrea, impactación fecal, obstrucción anorrectal u obstrucción en la vejiga. En las perras también puede darse este tipo de prolapso durante el embarazo o el parto.
Según el tejido que se exteriorice habrá varios tipos de prolapso. Así, el prolapso mucoso será el más leve, porque se limita solo al revestimiento del conducto anal. Por su parte, el prolapso completo es más grave, al producirse la salida al exterior de un segmento del recto de más o menos centímetros de longitud.
Síntomas de prolapso rectal en perros
En el prolapso mucoso lo que podremos observar saliendo del ano será una especie de rosquilla formada por un anillo de tejido que estará inflamado y enrojecido. En este punto hay que aclarar que, aunque algunos cuidadores confunden este prolapso con hemorroides en perros, lo cierto es que los perros no tienen hemorroides tal y como las conocemos en los humanos.
En los casos de prolapso completo se exterioriza una masa de forma cilíndrica enrojecida o rosada. Son situaciones de urgencia en las que debemos acudir de inmediato al veterinario, ya que el tejido expuesto puede sufrir daños irreversibles. Lo ideal sería trasladar al perro a la clínica nada más nos percatemos del prolapso. Podemos envolver el tejido saliente en una gasa humedecida en suero para hacer el viaje. Nunca debemos intentar introducir el prolapso nosotros.
Prolapso rectal en perros, ¿tiene cura?
Sí, es posible solucionar un prolapso anorrectal. El tratamiento va a depender, en primer lugar, del tipo de prolapso. Así, en el mucoso, lo que tendremos que hacer será solucionar la causa que lo ha producido, es decir, reducir los esfuerzos a la hora de evacuar.
Para eso lo primero será identificar esta causa, de ahí la importancia de acudir al veterinario. Además del tratamiento para ella, este profesional puede proporcionarnos medicación para ablandar las heces y prescribirnos una dieta de alta digestibilidad, por lo menos hasta que se resuelva el problema.
Dentro de los remedios caseros hay que tener claro que no van a resolver, por sí solos, el prolapso, pero sí nos pueden ayudar a la recuperación. Por ejemplo, podemos dar una cucharadita de aceite de oliva para facilitar la evacuación de las heces, asegurarnos de que el perro bebe suficiente agua para estar bien hidratado, alimentarlo con comida casera o húmeda, etc. Estas son pautas generales que, por supuesto, tendremos que consultar con el veterinario.
El tratamiento del prolapso completo, por su parte, es algo más complejo y se necesitará recurrir a la cirugía, que puede ser más o menos complicada, como veremos en el siguiente apartado.
¿Cómo es la operación de prolapso rectal en perros?
Para la resolución del prolapso rectal completo el veterinario puede recurrir a diferentes técnicas quirúrgicas en función de la situación. En los casos más sencillos, una solución rápida para evitar que el prolapso se repita nada más reducirlo es hacer una sutura provisional formando una especie de bolsa alrededor del ano.
Pero, si tardamos en acudir al veterinario, corremos el riesgo de que el tejido prolapsado, al contacto con el exterior, acabe necrosándose, es decir, el tejido se muere al cortarse el riego. En estos casos la intervención quirúrgica será más compleja porque habrá que eliminar toda la zona muerta y suturar la terminación del intestino donde se ha tenido que cortar.
Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.
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