Qué recursos necesita un buitre para vivir

Antes de empezar a entender las necesidades básicas del buitre debemos saber que se trata de un nombre genérico pues existen dos familias de buitres muy distintas: los accipítridos y los catártidos. Además de un modo de caza distinto también poseen atributos físicos divergentes.

Algo que tienen en común los buitres de todo el mundo es que se trata de animales que viven en comunidades de varios individuos. Requieren del contacto con otros congéneres para asegurar su supervivencia más allá de la época de reproducción. Sin embargo también existen buitres solitarios.

Los buitres que viven en grupo necesitan un hábitat amplio, zonas extensas relativamente libres de presencia humana donde las especies carroñeras que allí coexistan puedan alimentarse y procrear sin entrar en una competencia demasiado comprometida.

El buitre es un animal carroñero, es decir, se alimenta de cuerpos de otros animales muertos, que pueden estar en estado de descomposición.

No importa si el animal ha muerto de manera natural o si se tratan de restos dejados por otros grandes predadores, los afilados picos de los buitres y su cuello flexible le permitirán aprovechar todo el tejido blando del cadáver y parte del esqueleto.

Las especies adaptadas a alimentarse de ciertas zonas menos accesibles de los animales suelen presentar una zona “calva” más extensa, esto es, la cabeza y el cuello cubiertos de plumón en lugar de plumas, como resultado de la evolución que busca evitar focos de enfermedades derivados de la dificultad de mantener una correcta higiene del plumaje de estas zonas. También presentan una lengua áspera que les ayuda a llegar mejor a los tendones de los animales muertos.

Incluso hay buitres como el quebrantahuesos que se alimenta mayoritariamente del esqueleto de otros animales (supone un 60-70% de su dieta).

De todas formas debemos saber que el instinto de supervivencia reside por igual en todos los animales si están hambrientos. Por ese motivo no nos debe sorprender que el buitre pueda llegar a atacar a presas vivas en épocas de escasez. Su gran tamaño, garras robustas y pico puntiagudo le permiten cazar como cualquier otro depredador. Este comportamiento no es lo habitual en los buitres y sólo puede darse en determinadas especies, como es el caso del buitre negro.

Desde hace algún tiempo el ataque de algunos buitres a presas vivas (enfermas o debilitadas) resulta cada vez más frecuente por los motivos que veremos a continuación. ¡Sigue leyendo!

El buitre se enfrenta a dos grandes enemigos: el primero de ellos es el veneno, culpable de la delicada situación en la que se encuentran muchas especies de buitre en Europa.

Aunque es una práctica penada por ley, la colocación de carne o cadáveres de animales envenenados sigue siendo una práctica bastante habitual que llevan a cabo en ocasiones algunas personas relacionadas con el sector cinegético y en otros con la ganadería extensiva.

No buscan eliminar al buitre sino a ciertos grandes depredadores, como pueden ser el lobo o algunas rapaces, pero los buitres terminan por alimentarse o bien de los cepos con veneno o de las víctimas de los mismos, y acaban siendo también envenenados. Es justo aclarar que ni todos los cazadores ni todos los ganaderos colocan veneno, y por mi cuenta y riesgo, aseguro que quienes lo hacen son una lacra tanto para el medio ambiente como para su sector. Y no es que sienta simpatía por los cazadores, pero me gusta hablar claro, no sería justo incluirlos a todos.

En África quienes suelen envenenar a los buitres son los cazadores furtivos de otros animales protegidos, como elefantes o rinocerontes. Buscan evitar que los buitres señalen a los guardas dónde hay un cadáver de un animal de gran tamaño.

La otra gran amenaza para la supervivencia del buitre es la destrucción de sus hábitats naturales, incluyendo la fragmentación de los mismos.

El buitre requiere de amplios territorios donde puedan prosperar varias parejas reproductoras. Y aquí deben tenerse en cuenta los incendios forestales, un problema recurrente en la península ibérica, donde vive la mayor población de buitre negro de todo el mundo. El buitre negro en concreto necesita de tupidos (y extensos) bosques de encinas y alcornoques para prosperar satisfactoriamente. Algunas especies de buitre prosperan en sitios rocosos, todo depende de dónde construyen sus nidos las parejas de buitres.

En un ecosistema equilibrado, el buitre tan solo requiere de extensas zonas alejadas del hombre para sobrevivir, pues se alimenta de todo tipo de carroña. La actividad cinegética, cuando se ejerce con poco control, deja el entorno del buitre desprovisto de muchas de las que serían fuentes de alimento para la colonia de estas aves. Un ejemplo muy típico es la relación entre la caza y las poblaciones de liebres y de conejos en Europa.

Esto lleva al buitre a necesitar alimentarse de animales muertos procedentes de la ganadería extensiva para compensar la escasez de recursos. Y el problema aparece cuando por ley no se pueden dejar los ejemplares muertos sin ser retirados, por cuestiones de salubridad.

La solución en este caso es sencilla: bastaría con desplazar esos cadáveres a cebaderos o zonas adecuadas donde no sean un peligro para la salud de las poblaciones humanas cercanas. Por ejemplo, colocarlos alejados de corrientes de agua. Lamentablemente, no todas las legislaciones contemplan esta opción.

Cuando la comida escasea, algunos ejemplares de buitre pueden pasar de su natural dieta carroñera a desarrollar ciertas actitudes cazadoras, en general con animales dedicados a la ganadería, y surge un nuevo conflicto de intereses.

La caza directa del buitre como trofeo o las muertes accidentales por electrocución con cables eléctricos suponen casos puntuales que no constituyen el gran problema al que se enfrenta el buitre.

Como individuo o colonia, el buitre necesita de amplias zonas adecuadas a las necesidades de cada especie, con poca presencia humana en ellas y recursos suficientes.

Necesita una legislación que le proteja y evite en la medida de lo posible el uso de venenos y la desforestación de su medio natural.

En caso de escasez de fuentes naturales de alimento, debemos actuar para que se coloquen algunos ejemplares muertos de manera natural procedentes de la ganadería en cebaderos situados en puntos estratégicos, con el fin de evitar posibles daños por parte del buitre a la ganadería extensiva local.

El buitre es uno de esos animales que se asocia con desgracias o que causa repulsión por su dieta. Pero ejerce una labor encomiable dentro de los ecosistemas, al fin y al cabo es un carroñero que no transmite enfermedades.

Como ecologista que soy me gustaría aprovechar este texto para invitar al lector a que no considere al buitre como un animal de mal agüero, sino como un aliado del ser humano y de la salubridad de los ecosistemas donde habita.

Si deseas leer más artículos parecidos a Qué recursos necesita un buitre para vivir, te recomendamos que entres en nuestra sección de Problemas de alimentación.