Tiburón martillo gigante

Es un gran tiburón que llega a medir generalmente los 4 m de longitud, pero se han encontrado individuos que alcanzan los 6 m. En cuanto al peso, usualmente supera los 400 kg. Posee como muchas especies de escualos contracoloración, teniendo la zona dorsal gris oliva intenso o parduzca y la ventral blanca. Como hemos mencionado, su particular cabeza se extiende de manera considerable hacia los lados, la cual forma un margen que en los jóvenes se encuentra redondeado, pero en los adultos es casi recto.

Continuando con las características del tiburón martillo gigante, tanto los ojos como los orificios nasales se encuentran en los extremos de la cabeza, lo que le permite observar prácticamente todo a su alrededor, incluso hacia atrás con tan solo girar levemente la cabeza. Los dientes del tiburón martillo gigante son triangulares y aserrados; los superiores tienden a ser oblicuos, mientras que los inferiores más rectos.

En cuanto a las aletas, la primera dorsal es alta, curva y puntiaguda, la segunda dorsal es de gran tamaño, al igual que las pélvicas, pero estas últimas con forma cóncava y la caudal caracterizada por su fuerte asimetría.

Tiene una distribución circunglobal, movilizándose por los mares cálidos y tropicales de todo el mundo. El tiburón martillo gigante es de hábitat tanto pelágico como costero y semioceánico, de modo que se moviliza con facilidad entre aguas costeras y zonas bastante alejadas, llegando a sumergirse hasta profundidades de unos 300 metros.

Las poblaciones de este escualo en los océanos Índico, Atlántico y mar Mediterráneo disminuyeron de manera considerable. Sin embargo, recientemente en el Atlántico noreste parece estar teniendo cierto crecimiento. En cuanto al océano Pacifico, se carecen de datos precisos sobre su distribución. Las estimaciones indican que la población global del tiburón martillo gigante disminuyó entre el 50 y el 62 % de sus hábitats naturales. ^[1]

A pesar de su gran rango de distribución, hay aspectos sobre la conducta de este animal que aún se desconocen. Este tipo de tiburón tiene generalmente costumbres solitarias, tanto para las movilizaciones migratorias que realiza comúnmente como para la captura de sus presas. Es una especie bastante móvil, que realiza desplazamientos entre las áreas costeras y aguas más oceánicas. Durante la época de verano, es común que se dirija hacia zonas situadas más al norte.

El seguimiento que se le ha hecho a algunos individuos ^[2] evidencia que este tiburón es capaz de recorrer 1 200 km en un lapso de 62 días, que es una distancia larga en un tiempo corto. Este tipo de comportamiento indica que la especie debe moverse hacia zonas internacionales, además, se ha comprobado que hace paradas en ciertos puntos cuando está ejecutando su ruta migratoria.

Es una especie carnívora que caza de manera activa. Su contracoloración le ofrece la ventaja de camuflarse, ya que visto desde arriba se confunde con el fondo oscuro, mientras que si se observa desde abajo no se distingue fácilmente por el brillo del agua originado por la luz. Otra gran ventaja que tiene el tiburón martillo gigante es su sorprendente olfato, capaz de detectar 1 gota de sangre a más de 1 kilómetro de distancia, de modo que si hay un animal herido en ese perímetro, este tiburón podrá detectarlo.

Su alimentación se basa principalmente en diversas especies de rayas, meros y bagres marinos. También incluye en la dieta peces óseos, otros tiburones, cangrejos, langostas y calamares.

¿Quieres saber Cómo cazan los tiburones? ¡Descúbrelo en este otro artículo!

Los machos del tiburón martillo gigante maduran cuando alcanzan entre los 2,25 y los 2,69 m, mientras que las hembras lo hacen entre los 2,10 y los 3 m de longitud. El tipo de reproducción es vivípara, produciendo un número de crías de entre 6 y 42. Se reproducen cada dos años aproximadamente, con un lapso de gestación de 11 meses, aunque puede extenderse un poco más.

Las crías al nacer miden entre 50 y 70 cm y son totalmente independientes. Este evento suele ocurrir entre finales de la primavera y el principio del verano.

El tiburón martillo gigante es una especie que se captura tanto de forma intencional como incidental. Se comercializa principalmente para el uso de sus aletas, pero también para el consumo de su carne, aceite del hígado, la piel, el cartílago e incluso las mandíbulas. Toda esta presión ha originado que este animal haya sido declarado en peligro crítico de extinción por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).

Entre las medidas de conservación existentes encontramos algunas acciones internacionales para la protección de la especie, pero que en realidad no han sido efectivas y en general han fallado. Asimismo, se establecieron ciertos controles que limitan el número de capturas permitidas, además de haber sido incluido en el apéndice II de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), de modo que su comercialización está regulada. Adicionalmente, algunos países prohíben la venta del tiburón martillo gigante.