Trucos para evitar que mi perro huela mal

La respuesta a esta pregunta es "depende". Antes de explicar cómo hacer para que un perro no huela mal, hay que saber distinguir entre el olor normal de un perro y realmente mal olor. Los perros secretan unas sustancias olorosas para poder comunicarse entre ellos, uno de los motivos por los cuales los perros se huelen los unos a los otros. Estos olores contienen información que solo los canes pueden interpretar, como la salud, el sexo o la edad de los otros perros. Además, cuando un perro se moja, su olor natural se potencia.

Ahora bien, el problema está cuando nuestro perro desprende olores fuera de lo común. El olor puede ser una señal de enfermedad, por ello, es importante detectar qué parte le huele (boca, oído, ano, manto...) y acudir al veterinario cuanto antes, ya que la zona puede darnos muchas pistas de lo que le pase a nuestro peludo. Además, es de vital importancia saber por qué un perro huele mal para poder evitar el mal olor. Estas son algunas de las situaciones que nos podemos encontrar:

• ¿Por qué a mi perro le huele mal el aliento?
• ¿Por qué a mi perro le huele el ano a pescado?
• ¿Por qué a mi perro le huele la boca a pescado?

Por supuesto, un perro en deficientes condiciones higiénicas desprenderá mucho más olor que un perro limpio. Para más información, consulta este otro artículo sobre ¿Por qué mi perro huele mal?

Una vez sepamos por qué mi perro huele mal, podremos proceder a encontrar la forma de eliminar el mal olor del perro. Si se debe a un problema de salud, el veterinario nos dará las pautas para tratarlo, e incluso puede indicarnos algún tipo de champú especial para nuestro can que elimine el mal temporal.

En caso de que tu mascota no presente patologías, será necesario entonces revisar las pautas que estamos siguiendo en su cuidado e higiene, pues puede que haya algo que no estemos realizando correctamente y que cause el mal olor, como son:

• El cepillado (su frecuencia y buen uso).
• Bañar en exceso o muy poco a nuestro perro.
• El tipo champú.
• El secado y perfumado.
• Limpiarle la boca y los oídos.

A continuación, pasaremos a explicar detalladamente cada uno de estos puntos que podrían explicar por qué huele mal mi perro. ¡Sigue leyendo!

El cepillado es una práctica necesaria en el aseo diario de los perros. No solo elimina el pelo muerto sino que además también nos ayuda a eliminar el polvo y la suciedad que pueda adherirse en la calle e incluso en el mismo hogar.

Es importante que identifiques el tipo de pelo de tu perro para que sepas con que frecuencia debes cepillarle. Y es que si dedicamos algo de tiempo a esta práctica evitaremos los enredos, las rastas y los nudos, puntos donde se acumula la suciedad. Descubre cuales son los diferentes tipos de cepillo según el pelo de tu perro para empezar cuanto antes.

Además de las ventajas que te hemos comentado cepillar a tu perro mejorará vuestro vínculo y hará que su pelo luzca más brillante y cuidado.

El baño de nuestra mascota es una rutina muy importante para mejorar el olor de los perros pero atención: no debemos bañarlos en exceso.

Eso se debe a que nuestras mascotas tienen una grasa natural en la piel que les protege y les aísla del entorno, al eliminar esta capa con demasiada frecuencia hacemos, inconscientemente, que nuestro perro huela aún peor. En lugar de bañarle, si se ha ensuciado poco, podemos utilizar toallitas para bebés centrándonos así en una zona concreta.

¿Cada cuanto debo bañar a mi perro?

• Los perros de pelo corto tendrán suficiente con un baño cada mes y medio.
• Los perros de pelo largo repetirán ritual una vez al mes, aunque eso sí, deberemos aplicarles un acondicionador o suavizante específico para perros para evitar los nudos.
• Los perros de pelo duro, como el Westy deberían bañarse cada dos o tres semanas.
• Finalmente, los perros de pelo rizado se bañarán una vez cada 20 días.

Un truco muy útil y que te animamos a probar es añadir vinagre de manzana al champú habitual de tu perro, harás que este huela mucho mejor y durante más tiempo. La mezcla debería ser un 50% de champú y un 50% de vinagre de manzana. Y los beneficios no acaban aquí, aplicar este producto totalmente natural hará que el pelo luzca más brillante y sano.

La elección del champú adecuado también puede ser clave a la hora de evitar que un perro huela mal. A la hora de bañar a nuestro can, debemos hacerlo siempre con un champú especial para perros. Además, deberemos tener en cuenta las necesidades físicas y sanitarias de nuestro peludo. Esto quiere decir que si, por ejemplo, un perro desprende mal olor porque tiene una dermatitis, habrá que escoger un champú apto para su tipo de piel o, en su defecto, pedir consejo a nuestro veterinario sobre cuál sería el mejor champú para nuestro amigo.

Por otro lado, el tipo de pelo es también determinante a la hora de escoger el champú adecuado. Nuestra recomendación es que busquéis champús especiales para perros 100 % naturales, por ejemplo:

• Champú para perros de pelo largo: el pelo largo requiere de muchos más cuidados que el pelo corto. Uno de nuestros champús favoritos es el champú natural revitalizante para perros de pelo largo de Disane, que gracias a su extracto de ginseng nutre el pelaje en profundidad y suaviza el pelo largo, evitando que se enrede (lo que puede ser también causante de mal olor en perros). Además, revitaliza el pelo apagado y sin brillo, tiene un aroma suave y elimina los malos olores.
• Champú para perros de pelo rizado: un tipo de pelo en perros quizás más difícil de cuidar que el anterior. Sin un buen baño y cepillado, el pelo rizado, puesto que tiene tendencia a desarrollar nudos, atrapa con mucha facilidad el polvo y la suciedad del ambiente, causando mal olor en el perro. Por ello, un buen champú es esencial. Una buena opción para este tipo de pelo es el champú natural acondicionador para perros de pelo rizado de Disane. Con aceite de aguacate, este champú está pensado para perros de pelo rizado, encrespado y con tendencia a enredarse. Desprende un aroma suave, elimina los malos olores del can y suaviza el pelo, facilitando así el cepillado, evitando los enredos y, por consiguiente, que el perro huela mal.

Ante cualquier duda, consulta con tu veterinario. Este te dirá qué tipo de champú es el más adecuado para tu perro según sus necesidades.

Debes saber que un mal secado también produce malos olores. Con la toalla no secamos al completo a nuestra mascota pero por otro lado con el secador humano le asustamos. ¿Qué debemos hacer? En el mercado encontrarás secadores para perros, unas herramientas silenciosas y muy útiles que utilizan los profesionales.

Además y para mejorar el olor de tu perro puedes crear un perfume casero totalmente natural y rápido en tu propia casa:

1. Hazte con un bote de plástico spray nuevo
2. Utiliza una base de agua destilada
3. Añade una cucharada de aceite de almendras
4. Añade una cucharada de glicerina
5. Finalmente dale un toque personal y introduce el jugo de 1/2 de limón o de naranja

De esta forma tendrás un perfume único y que no irritará la piel de tu mascota. Introduce todos los ingredientes en el bote de plástico spray nuevo, agítalo y ¡listo!

No te olvides que después del baño es fundamental añadir una pipeta al pelaje de tu perro para prevenir la aparición de pulgas, garrapatas y picaduras de mosquitos.

Tanto la boca como los oídos son zonas que producen mal olor, por ese motivo es fundamental que mantengamos una higiene correcta y constante de estas partes del cuerpo de nuestro perro.

Para empezar prestaremos atención a los oídos, una parte sensible y delicada. Si no sabemos cómo limpiar las orejas a nuestra mascota podemos acudir a nuestro veterinario para que nos haga una demostración práctica.

1. Hazte con una gasa limpia y nueva (estéril) en cualquier farmacia.
2. Cubre tu dedo con la gasa e introdúcelo en el conducto auditivo del perro, es muy importante que no fuerces la entrada ni apliques demasiada presión.
3. Mueve el dedo lentamente y de forma circular.
4. Una vez acabes con una oreja cambia la gasa y utiliza una nueva para el otro oído.

Acabaremos el proceso de higiene con la boca, una parte especialmente maloliente. Y es que la mayoría de los perros no siguen un ritual de higiene, lo que hace que acumulen sarro en exceso. Para limpiarle los dientes a tu perro bastará con adquirir una pasta dental específica para perros y utilizar tu dedo o un cepillo para frotarlos. Sigue esta rutina una vez al día.

Además y para mejorar el mal aliento recuerda que es mejor ofrecerle pienso seco antes que dietas húmedas así como adquirir gominolas anti-sarro.

Si realmente quieres eliminar todo rastro de mal olor es muy importante que mantengas una limpieza estricta y regular en el hogar. Así pues deberás prestar atención a los rincones donde se pueda acumular el pelo y utilizar detergentes que desinfecten a fondo para mejorar la calidad del entorno de tu mascota. También te recomendamos utilizar ambientadores neutros.

Algo básico y súper importante es que limpies con frecuencia los elementos de tu perro como la cama, la ropa de tu mascota, los juguetes y otros objetos.

Combina la limpieza con la educación de tu mascota premiándole cada vez que siga un comportamiento higiénico y limpio. No le permitas que suba a sofás o sillones, zonas en las que no podemos limpiar tan frecuentemente, y felicítale siempre que se encuentre en su cama. Recuerda que el refuerzo positivo es la mejor arma de educación.

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