¿Un gato con leucemia puede vivir con otros gatos?

¿Un gato con leucemia puede vivir con otros gatos?

La leucemia felina es una enfermedad infecciosa causada por el virus de la leucemia felina, un retrovirus que afecta principalmente a la médula ósea y puede provocar graves problemas como inmunosupresión, trastornos inmunomediados, infecciones secundarias, diversas enfermedades y tumores. Sin embargo, esto no siempre ocurre, ya que en algunos casos el virus puede llegar a la médula ósea y permanecer latente durante largos períodos de tiempo hasta que situaciones de estrés lo reactiven.

Por otro lado, a veces el sistema inmunológico del gato logra eliminar la infección, o bien, el virus se multiplica en otras partes del organismo distintas a la médula ósea. Este virus es altamente contagioso entre gatos, por lo que, si te preguntas si un gato con leucemia puede convivir con otros gatos o si puede vivir con gatos vacunados, la respuesta es que sí, pero teniendo en cuenta muchas precauciones. Sigue leyendo este artículo de ExpertoAnimal, donde te explicamos de qué forma puede vivir un gato con leucemia con otros gatos.

¿Un gato con leucemia puede convivir con otros gatos o no?

La leucemia felina es una enfermedad causada por un retrovirus: el virus de la leucemia felina (FeLV). Se trata de un virus de ARN monocatenario que contiene la enzima transcriptasa inversa, la cual le permite copiar su propio material genético en ADN bicatenario e integrarlo en el genoma de las células del gato al que infecta, formando lo que se conoce como provirus. De esta manera, el virus queda latente en el genoma de las células del felino y puede reactivarse en condiciones inmunosupresoras, como el estrés. Sin embargo, si esto no ocurre, puede permanecer inactivo durante años sin causar síntomas.

El FeLV tiene una especial predilección por las células del sistema hematopoyético. Tras el contagio, se replica en la orofaringe del gato, específicamente en los macrófagos y linfocitos. A partir de ahí, pueden darse los siguientes escenarios:

  • Inmunocompetencia: el sistema inmune controla la infección, restringiéndola a la cavidad oral en un 20-30% de los gatos.
  • No inmunocompetencia: en un 70-80% de los casos, el virus se disemina a través de los monocitos y linfocitos en la sangre hasta llegar a los nódulos linfáticos, el bazo o el timo. En este punto, el gato puede eliminar la infección en menos de tres semanas o desarrollar una viremia persistente. En este último caso, el virus alcanza la médula ósea y provoca los síntomas más graves. También puede producirse una infección discordante, en la que el virus no se replica en la sangre ni en la médula ósea, sino que permanece latente en otros órganos como los ojos, la vejiga, la glándula mamaria o las glándulas salivales.
  • Gato portador latente: el sistema inmune logra controlar la infección en la sangre, pero no impide que el virus alcance la médula ósea, donde permanece inactivo.

    ¿Puede convivir un gato con leucemia con otros gatos?

    La respuesta es , pero hay consideraciones importantes a tener en cuenta en lo referente al contagio. Así pues, lo primero que debes saber es cómo se contagia el virus de la leucemia felina. La principal vía de transmisión es la saliva, aunque también puede encontrarse en la orina, la leche, las secreciones nasales, las lágrimas, los fluidos reproductores y las heces. Además, el virus puede transmitirse de madre a cría por vía transplacentaria o a través de transfusiones sanguíneas, agujas o instrumental contaminado.

    El contagio ocurre de forma directa, de gato a gato, principalmente mediante mordeduras o al compartir comederos y bebederos de manera inmediata, ya que el virus es muy frágil en el medio ambiente.

    ¿Cómo vivir con un gato con leucemia y otro sano?

    Si en un mismo hogar conviven un gato con leucemia y un gato sano, es fundamental tomar ciertas precauciones para evitar el contagio. Estas medidas se centran en reducir el riesgo de transmisión del virus, que, como hemos mencionado, se propaga principalmente a través del contacto directo entre gatos o al compartir utensilios contaminados con secreciones, como la saliva.

    Por lo tanto, es recomendable:

    1. Restringir el acceso entre ambos gatos mediante el aislamiento del gato positivo en un área de la casa equipada con todo lo necesario para garantizar su bienestar. Esto es clave para evitar el contagio. Sin embargo, si el aislamiento absoluto no es posible o si los gatos necesitan cierto contacto físico o visual, este debe ser limitado.
    2. Evitar el contacto directo con la saliva o secreciones del gato positivo, así como impedir que compartan utensilios o que se produzcan interacciones agresivas.
    3. Desinfectar adecuadamente los espacios y objetos con los que haya estado en contacto el gato infectado, especialmente si pertenecen a la zona del gato sano.

    Asimismo, es esencial controlar la salud de ambos gatos con revisiones veterinarias periódicas. No debemos olvidar brindar al gato positivo todo el cariño y la atención necesarios para que no se sienta aislado o estresado, ya que el estrés, como hemos mencionado, puede debilitar su sistema inmunológico y favorecer la reactivación del virus.

    ¿Cómo evitar que un gato con leucemia contagie a otro?

    En el apartado anterior, hemos mencionado las principales medidas para evitar que un gato infectado con el virus de la leucemia felina contagie a otro gato. Estas medidas se basan, principalmente, en reducir el contacto directo entre ellos, especialmente aquel que implique el intercambio de fluidos o secreciones, que son la principal fuente de infección del virus. Para ello, se recomienda dividir la casa en zonas separadas para cada gato.

    Además, la limpieza y desinfección frecuente del hogar es fundamental para minimizar la presencia del virus en el ambiente. Aunque el FeLV es poco resistente fuera del organismo, puede permanecer viable durante cortos períodos de tiempo en los utensilios que haya usado o contaminado el gato infectado con sus secreciones.

    Por otro lado, otra medida eficaz para reducir el riesgo de infección o la gravedad de la enfermedad es vacunar al gato sano contra la leucemia felina. Asimismo, es fundamental realizar controles veterinarios periódicos para ambos gatos y asegurarse de que reciben los cuidados adecuados.

    ¿Puede un gato vacunado contagiarse de leucemia felina?

    Hemos visto que un gato con leucemia felina puede convivir con otros gatos siguiendo una serie de precauciones, entre las que se encuentran vacunar a los sanos. Pero, ¿con la vacuna se pueden contagiar?, un gato vacunado contra la leucemia felina puede contagiarse del virus, pero la probabilidad de infección es mucho menor en comparación con un gato sin vacunar. Además, en caso de infección, la vacuna ayuda a reducir la gravedad de la enfermedad, ya que el sistema inmunológico del gato está mejor preparado para enfrentarse al virus.

    Sin embargo, la protección no es absoluta. Por ello, aunque el gato sano esté vacunado, es importante seguir controlando el contacto con el gato positivo, mantener revisiones veterinarias periódicas y garantizar una adecuada limpieza y desinfección del hogar. Además, la posibilidad de contagio varía según la carga viral del gato infectado: no es lo mismo la exposición a un gato con una cantidad moderada del virus que a uno con una infección activa y una carga viral muy alta, en cuyo caso el riesgo de transmisión es significativamente mayor.

    También es importante saber que la protección de la vacuna no es inmediata. Se requieren dos o tres dosis iniciales y refuerzos periódicos, generalmente cada menos de tres años, para garantizar su efectividad. Asimismo, si el gato vacunado padece alguna enfermedad o condición que debilite su sistema inmunológico, como la inmunodeficiencia felina causada por el virus de la inmunodeficiencia felina (VIF), el riesgo de infección aumenta considerablemente.

    Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

    Si deseas leer más artículos parecidos a ¿Un gato con leucemia puede vivir con otros gatos?, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Enfermedades infecciosas.