Debido a las características del celo de las gatas es muy habitual que, como cuidadores, decidamos esterilizarlas para evitar comportamientos que dificultan la convivencia, problemas de salud y sobrepoblación felina, ya que una sola gata es capaz de parir varias camadas cada año. En cualquier caso, son numerosas las dudas que a este respecto pueden surgir. Por ello, en este artículo de ExpertoAnimal vamos a explicar si una gata esterilizada puede tener relaciones o no, si puede quedar preñada o si es capaz de producir leche. Una información imprescindible a tener en cuenta por cualquier cuidador.
El ciclo reproductivo y la esterilización de las gatas
Las gatas son poliéstricas estacionales. Esto quiere decir que, durante los meses de luz suficiente, tendrán una sucesión continua de períodos de celo que durarán unos siete días y se repetirán aproximadamente cada 10-15 días. Además, las gatas presentan una ovulación inducida, lo que implica que se requiere un estímulo, normalmente la cópula, para desencadenar la ovulación y, por lo tanto, hacer fértil a la gata.
Cuando decidimos esterilizar a nuestra gata, lo habitual es que el veterinario practique una pequeña incisión abdominal por la que extraer los ovarios y el útero, aunque algunos veterinarios optan por extirpar solo los ovarios. En cualquier caso, la gata no vuelve a entrar en celo y, como solo durante ese período manifiesta interés por la cópula, la respuesta a si una gata esterilizada puede tener relaciones es NO.
¿Una gata esterilizada puede quedar preñada?
Como hemos visto, una gata esterilizada no va a entrar en celo, no será fértil, no atraerá a los machos y, por lo tanto, si tenemos dudas de si una gata castrada puede tener relaciones y quedar preñada, la respuesta es que no. Sin ovarios y sin útero no tiene lugar el ciclo sexual, por lo tanto, la gestación es imposible.
¿Una gata esterilizada puede entrar en celo?
Ya hemos dejado claro que una gata esterilizada no puede tener relaciones, no puede aparearse, porque esto solo tiene lugar cuando la gata está en su momento de fertilidad, que no va a existir sin ovarios. Pero sí existe una circunstancia en la que, aún esterilizada, la gata podría manifestar síntomas de celo, es decir, maullidos insistentes y agudos, frotamientos contra todo tipo de objetos o personas, exposición de los genitales, etc. Se trata del resto ovárico, lo que quiere decir que ha quedado algún fragmento de tejido de los ovarios en el cuerpo de la gata y que este ha sido capaz de desencadenar la estimulación hormonal suficiente como para que la gata entre en celo.
Si hemos operado a nuestra gata recientemente pero observamos síntomas compatibles con el celo debemos acudir al veterinario. Hay que intentar localizar el resto ovárico y extraerlo. Este problema sucede en pocas ocasiones y, en estos casos, una gata esterilizada puede aparearse pero, evidentemente, sin útero, no quedará preñada.
¿Una gata esterilizada puede producir leche?
En los apartados anteriores hemos dado respuesta a si una gata esterilizada podrá tener relaciones, pero esta no es la única cuestión relativa a su ciclo sexual que puede plantearnos dudas. Cuando una gata se aparea lo normal es que se produzca la fecundación y, en estos casos, tras una gestación de unos dos meses, la gata parirá una camada a la que amamantará con la leche que produce hasta aproximadamente los dos meses de vida. Este será el único momento en el que una gata dará leche. Por lo tanto, una gata esterilizada no podrá tener leche.
Sin embargo, existen dos situaciones en las que una gata esterilizada puede dar leche y amamantar. De manera que, la máxima anterior se incumple en aquellas gatas que, por algún problema, requieren una cesárea para ayudar a nacer a sus gatitos y se aprovecha la cirugía para la esterilización. Estas gatas podrán amamantar a sus gatitos. Además, gatas esterilizadas que, por circunstancias, contactan con gatitos lactantes, son capaces de criarlos.
¿Una gata castrada puede tener un embarazo psicológico?
Por último, aunque una gata esterilizada no puede tener relaciones, ya hemos visto que si, tras la intervención, ha quedado un resto ovárico, es posible que se desencadene el celo incluso con apareamiento. En algunos casos en los que esto ocurre y, por razones evidentes, no termina en gestación, la gata puede sufrir lo que se conoce como pseudogestación o embarazo psicológico, que consiste en la manifestación de sintomatología correspondiente con la gestación en una gata que no está preñada. Así, la gata puede engordar e incluso producir leche.
Aunque este es un proceso que remite solo, debemos controlar que no se produzcan problemas como la mastitis, precisamente debida a la aparición de la leche. Hay que insistir en que estos casos son muy poco frecuentes.
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