Vacuna quíntuple para perros - Para qué sirve, qué contiene y reacciones

Para empezar debemos explicar qué son las vacunas para perros. Se trata de preparados farmacológicos de composición variable que se utilizan para estimular el sistema inmunitario. Cada una de ellas presenta, de manera controlada, una enfermedad al perro, lo que permite que el animal cree defensas específicas contra ella.

Así, si en algún momento contacta con esa patología de manera natural, su cuerpo inmediatamente podrá eliminar este patógeno o, al menos, la enfermedad cursará de forma más leve. Las enfermedades para las que existen vacunas suelen ser muy graves y contagiosas. Si contactan con el perro sin vacunar es posible que a este no le dé tiempo a generar las defensas necesarias, aumentando el riesgo de muerte. Por eso es tan importante vacunar.

La primera vacuna del perro se administra entre las 6-8 semanas de vida porque antes el cachorro va a estar protegido por las defensas que le ha transmitido su madre. En función del estado inmunitario de la perra y de las circunstancias del cachorro, el veterinario decidirá la fecha de esta primera inyección. Pero las vacunas de perros cachorros son más de una, ya que es habitual que se necesite repetir las dosis para conseguir el máximo de protección. Así, estas suelen ponerse, como orientación, a las 8, 12 y 16 semanas de vida.

Las vacunas pueden contener fragmentos de virus, virus inactivados o ser recombinantes. También se clasifican en función de la cantidad de enfermedades contra las que protegen. Por ejemplo, hay vacunas monovalentes y bivalentes, que cubren una o dos patologías, pero son más comunes las vacunas trivalentes para perros, contra tres enfermedades, las tetravalentes, para cuatro, o las polivalentes, las más completas, actuando frente a más de cuatro patógenos. La vacuna polivalente para perros suele utilizarse en las revacunaciones, que acostumbran a ser anuales.

A continuación explicaremos con más detalle un ejemplo de estas vacunas: la vacuna quíntuple para perros de Virbac.

La vacuna quíntuple va a estimular el sistema inmunitario para que pueda reaccionar con rapidez si el perro contrae alguna de las enfermedades contra las que previene. Por lo tanto, la función principal de las vacunas no es curar enfermedades, sino prevenir su aparición. Como cualquier fármaco, es imposible que consigan una protección total, pero sí han demostrado una elevada eficacia. Para garantizar su funcionamiento debemos saber que su efecto no dura toda la vida del perro, por eso hay que revacunar periódicamente y solo deben ser administradas por veterinarios.

Esta vacuna se administra mediante inyección subcutánea, es decir, bajo la piel, en la zona de la cruz. Vacunar es un acto veterinario que solo puede realizar este profesional y siempre tras examinar previamente al perro, ya que situaciones como parasitosis internas, gestaciones, algunos tratamientos o enfermedades son motivos para posponer su inoculación.

Las vacunas solo pueden ser compradas, manejadas y administradas por los veterinarios. Por lo tanto, los precios de las vacunas son los determinados por el Colegio Veterinario de cada zona y suelen incluir la consulta y la revisión previa del animal.

Este precio va a ser variable pero podemos hablar de unos 30-40 euros. Un importe asumible si tenemos en cuenta que, salvo en las primeras semanas del cachorro, solo se ponen una o dos al año. Y muy económico si lo comparamos con la factura de tratar, sin garantías de éxito, las enfermedades contra las que previene.

Como particulares, no podemos comprar vacunas para perros ya que, insistimos, estas solo pueden ser manejadas por veterinarios. Un mal almacenaje, manejo o la aplicación sin una revisión previa del perro hacen que el posible ahorro se convierta, como poco, en ineficacia de la vacuna, es decir, nuestro perro estaría desprotegido por completo.

Las reacciones o efectos secundarios a la vacuna quíntuple para perros o a cualquier otra suelen limitarse a un ligero malestar durante el mismo día de la aplicación o una pequeña inflamación en el punto de inoculación. Solo en casos muy infrecuentes podría desencadenarse una reacción alérgica, lo que sería potencialmente grave.

La obligatoriedad de la vacuna quíntuple para perros o de cualquier otra va a depender de la legislación del lugar en el que vivamos. Así, la vacuna de la rabia en perros es obligatoria en casi toda España, pero no en comunidades autónomas como la gallega. Lo mismo sucede con vacunas que en veterinaria se denominan esenciales, como la del moquillo o la de la parvovirosis, obligatorias en algunas regiones, opcionales en muchas.

Por lo tanto, debemos consultar con nuestro veterinario para saber qué vacunas resultan obligatorias en nuestro lugar de residencia y con qué frecuencia de administración. Si viajamos con nuestro perro o nos mudamos, también tendremos que informarnos de la legislación vigente en nuestro destino. Pero independientemente de la legislación, el veterinario, adaptándose a las circunstancias vitales de nuestro perro, podrá recomendarnos las vacunas que considere esenciales y conformar el calendario más adecuado para protegerlo eficazmente.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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