Veterinario y estado de alarma - Cuándo y cómo acudir

En primer lugar, hay que dejar claro que no hay ninguna evidencia científica hasta el momento de que el nuevo coronavirus SARS-CoV-2 afecte a ningún animal que no sean los seres humanos. Los animales de compañía con los que convivimos en nuestros hogares no van a enfermar de la COVID-19 ni, por lo tanto, tienen capacidad para transmitirnos la enfermedad. Pero, por supuesto, el resto de patologías que sí les afectan no se van a detener ante la pandemia.

Y es en este punto en el que surgen las dudas alrededor del veterinario y el estado de alarma. Los veterinarios son sanitarios. Por lo tanto, sus servicios se han considerado esenciales, por lo que pueden seguir trabajando, aunque muchos de ellos han cerrado sus clínicas como un acto de responsabilidad para limitar al máximo el riesgo de contagio. Pero siguen contestando al teléfono y atendiendo los casos que consideran que no pueden esperar.

En este otro artículo explicamos todo lo que se sabe hasta ahora de El coronavirus y los gatos. Donde también aclaramos que los gatos no tienen ninguna relevancia en la COVID-19.

No y sí. En otras palabras, durante el estado de alarma no podemos aparecer directamente en la clínica veterinaria con nuestro animal de compañía como podíamos hacer con anterioridad al confinamiento. No solo porque es probable que nos la encontremos cerrada, sino porque, aunque el personal esté dentro, no van a atendernos sin cita previa. Es una de las medidas que han adoptado para limitar el riesgo de contagio del SARS-CoV-2 y poder conjugar trabajo veterinario y estado de alarma. Con ello, se reduce el número de personas en la consulta y, también, el de personal.

Pero, por otra parte, por supuesto que podemos ir al veterinario en determinadas circunstancias. Cuando la dolencia de nuestro animal sea una urgencia o, al menos, no pueda esperar al desconfinamiento, claro que podemos recurrir a la asistencia profesional. Eso sí, siempre tendremos que llamar primero por teléfono. En ningún caso hay que personarse en la clínica sin previo aviso.

Si solo necesitas aclarar dudas o crees que tu mascota no está pasando por una situación de emergencia, también puede interesarte este otro artículo sobre Veterinarios online - Servicios para mascotas.

La relación veterinario y estado de alarma se ha resuelto mayoritariamente basándose en la urgencia o no de la consulta. Así, buena parte de los profesionales del sector han pospuesto cirugías no urgentes, como, en algunos casos, las de esterilización, revacunaciones o, en general, tratamientos o revisiones que pueden esperar un par de meses. Por supuesto, el objetivo es reducir al máximo el número de interacciones entre personas para detener o, al menos, ralentizar, la transmisión del SARS-CoV-2.

Pero hay signos de alarma que no pueden esperar al final del confinamiento. En estos casos, debemos llamar por teléfono al veterinario de inmediato y él nos dará todas las instrucciones precisas para atendernos con todas las garantías de seguridad. Son situaciones como las siguientes:

• Heridas abiertas y profundas que previsiblemente necesiten puntos de sutura.
• Vómitos que no remiten en unas horas, sobre todo si se acompañan de otros síntomas o se trata de un cachorro o un animal con alguna enfermedad previa.
• Diarrea.
• Deshidratación.
• Hemorragias, incluyendo los sangrados que se pueden detectar en la orina o en las heces.
• Pérdida de la conciencia o desmayo.
• Dificultad para respirar.
• Tos que no cesa.
• Pérdida del apetito que se prolonga por dos días o menos en los animales más jóvenes o ya debilitados.
• Modificaciones en el color de las mucosas o de la piel.
• Empeoramiento en los animales que ya tenían diagnosticada alguna patología.
• Picor tan intenso que se producen lesiones en la piel.
• Apatía o depresión, es decir, el animal apenas se mueve y no realiza ninguna de sus actividades habituales.
• Fiebre.
• Fracturas.
• Cualquier alteración ocular.

Aunque los síntomas de tu animal de compañía no coincidan con los mencionados, llama al veterinario, ya que también te puede aconsejar qué hacer ante cuadros más leves que no necesiten un traslado a la clínica. En ningún caso dejes a tu animal sin atención veterinaria durante la pandemia.

Imagen: AMVAC

Si has llamado por teléfono a la clínica y el veterinario te ha dado cita para acudir, también te explicará las medidas que debes observar para que la atención sea segura para conjugar sin riesgo veterinario y estado de alarma. En general, se recomienda que, si se trata de un perro, acuda la misma persona que lo saca a pasear. Es aconsejable acudir con mascarilla puesta y no sacársela en ningún momento. Sirve la mascarilla quirúrgica tipo I o la FFP2.

También se pueden portar guantes de látex o, incluso mejor, de nitrilo. Eso sí, hay que recordar que la higiene de manos, la distancia social y la prohibición de tocarse ojos, nariz, boca o, en este caso, mascarilla, sigue siendo de aplicación.

Es importante que acudamos a la clínica exactamente a la hora marcada para evitar el encuentro con otros clientes. De ser el caso, esperaremos donde el veterinario nos indique y, por supuesto, no interactuaremos ni con personas ni con sus animales. Tampoco podemos toquetear ningún objeto o revista que pueda haber en la clínica. Ya en la consulta mantendremos las distancias al máximo. Dejaremos entre 1-2 metros de separación con cualquier otra persona. Si debemos acercarnos al profesional para sujetar a nuestro animal, seguiremos al pie de la letra sus indicaciones. Paga la consulta con tarjeta o cualquier otro método que haya habilitado el veterinario para sustituir el intercambio de dinero.

En principio, una persona enferma de COVID-19 debería dejar sus animales de compañía al cargo de una persona sana, aunque sea dentro del mismo hogar, limitar las interacciones con ellos y seguir las medidas de seguridad generales. La persona asignada sería la que tendría que llevar al animal al veterinario una vez concertada la cita.

Pero, si no hay absolutamente nadie que pueda cuidar del animal, la persona enferma tiene que llamar por teléfono al veterinario e informarle de su situación clínica. De esta manera, el profesional podrá valorar las alternativas y decidir la mejor manera de atenderlo.

Teniendo en cuenta todas estas recomendaciones, es posible mantener a la vez trabajo veterinario y estado de alarma de forma que ningún animal enfermo se quede sin recibir la asistencia que necesita, pero con la máxima seguridad para todos.

Por otro lado, si tienes perros en casa, también puede interesarte este otro artículo sobre ¿Cómo limpiar las patas de mi perro al llegar a casa durante el confinamiento?

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

Si deseas leer más artículos parecidos a Veterinario y estado de alarma - Cuándo y cómo acudir, te recomendamos que entres en nuestra sección de Otros problemas de salud.