Clases de caballos

El porte de un caballo es la altura que hay desde el suelo a la cruz, que a su vez es la zona donde el cuello termina y comienza el tronco. La cruz equivaldría a la zona entre los homóplatos en los humanos. Según su porte, los caballos se dividen en:

• Caballos pesados o de tiro
• Caballos ligeros o de silla
• Ponies y razas miniatura

Los ponies se diferencias de las otras clases de caballos en su apariencia más allá del tamaño y en su temperamento, que suele ser más calmado en el caso del pony. El cuerpo de un pony es, comparado con el de un caballo estándar, más robusto, con patas cortas (aunque también hay razas de caballos como el asturcón con una morfología semejante y no son ponies) y presentan crines y cola muy tupidas.

Los diferentes colores de la capa de los caballos vienen determinados por su genética, por cómo se expresan determinados pares de genes (genes recesivos o genes dominantes). Por tanto, no es de extrañar que exista una clasificación de los caballos en función de su capa. Como curiosidad añadiremos que no todos los caballos de pelaje blanco nacen con la capa blanca.

Las capas básicas son la alazana, la castaña y la negra, y a partir de ellas se suelen generar el resto de capas posibles. Así podemos hablar de las siguientes clases de caballos:

• Alazán: de color pardo rojizo.
• Albino: Consecuencia de la ausencia de genes dominantes para la coloración de la capa.
• Bayo: De una tonalidad intermedia entre el blanco y el dorado, que recuerda al color rubio.
• Blanco: Son casos raros, pues no deben presentar ninguna zona coloreada y tampoco deben ser albinos.
• Castaño, zaíno o mulato: Caballo con capa de color pardo intenso, que puede presentar zonas negras en las patas, la cola y las crines.
• Isabelo: Parecido al bayo, de color más crema que blanco. Crines y cola de tonalidad un poco más oscura que el cuerpo.
• Negro: Caballo de capa negra aunque pudiera presentar alguna zona blanca en la frente o en la parte de las patas más cercana a los cascos.
• Palomino: Clase poco habitual de caballos que se caracteriza por presentar una capa de color pardo muy claro.
• Pío: Bicolor o tricolor, dentro de esta clase de caballos se establecen varias subclases.
• Ruano: Con diversas tonalidades entremezcladas.
• Tordo: Caballo que nace con pelaje oscuro y se va aclarando con el tiempo, alterna zonas blancas con otras grises o incluso con pequeñas zonas negras. La piel del caballo tordo es negra.

Las manchas y variaciones en la distribución de las tonalidades en la capa de un caballo, el moteado o jaspeado, son el resultado de la expresión de varios alelos. En función de la forma y localización de las manchas se habla de las siguientes clases de caballos:

• Barra: Mancha blanca desde los ojos hasta el hocico.
• Lucero: Pequeña mancha en la frente.
• Careto: Mancha blanca que se ensancha desde la frente al hocico.
• Corte: Cuando sólo el hocico es blanco.
• Cabeza de moro: Si el color de la cabeza es más oscuro que el del resto del cuerpo.
• Cara blanca: Cuando la vista frontal de la cabeza presenta la capa blanca, sin zonas de otros tonalidades.

Cuando un caballo presenta marcas blancas en las patas se le denomina albo, y se habla de calzado alto, calzado medio, calzado bajo o calcetín dependiendo de donde comiencen, desde la rodilla hasta justo por encima del casco, respectivamente. Cuando las manchas de las patas son negras, entonces nos referimos al caballo como armiñado.

El calzado de un caballo puede darse en una, en dos, en tres o en las cuatro patas. También existen indicaciones para estas características (caballo unialbo, bialbo, etc).

Existen varias clases de caballos según se atienda a un aspecto o a otro, y estas clasificaciones no son excluyentes.

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