Aussiedoodle o aussiepoo

Aunque el aussiedoodle tiene su origen en tierras australianas, se ha vuelto tan popular en los últimos años, que ya existe un mayor número de ejemplares en Estados Unidos que en la propia Australia.

Esta raza híbrida surge del cruce de pastor ovejero australiano y de diferentes tipos de caniche. Por esta razón recibe el nombre de aussiedoodle, o lo que es lo mismo, caniche australiano. A su vez son llamados también aussiepoos, siendo de nuevo la combinación de aussie, que hace referencia al pastor australiano y poo, de poodle o caniche.

Al igual que las otras populares razas híbridas, los caniches australianos no cuentan con el reconocimiento oficial de las entidades cinológicas internacionales, no siendo considerada como raza independiente por estos organismos, si no una raza híbrida o mestiza.

El aussiepoo presenta diferentes alturas y tamaños, en concreto se diferencian según el tipo de caniche que haya sido el progenitor. De esta forma, los ejemplares provenientes del cruce entre un pastor australiano y un caniche toy son mucho más reducidos en tamaño que aquellos otros cuyo progenitor sea un caniche miniatura o uno mediano. El peso oscila entre los 11 y los 31 kilogramos, mientras que la altura suele encontrarse entre los 25 y los 45 centímetros. Su esperanza de vida media es de aproximadamente 12-15 años.

Estos canes tienen un cuerpo proporcionado, de musculatura flexible y desarrollada. Su hocico es alargado y bastante fino, sobre todo al llegar a su oscura trufa. Los ojos, muy expresivos, son habitualmente de color marrón, aunque hay ejemplares de ojos ámbar o con heterocromía, es decir, un ojo de color distinto al otro. Sus orejas son erectas y de tamaño mediano, pudiendo ser su cola tanto recta como curvada.

El manto del aussiedoodle es medio largo, siendo el pelo rizado y muy denso. Estos perros se consideran como hipoalergénicos, debido a que apenas generan caspa, no causando tanta alergia como otras razas. Aquí te explicamos cuáles son otras de Las mejores razas de perros para alérgicos.

El aussiedoodle cachorro

El aussiedoodle es un cachorro ejemplar, es activo, pero no hiperactivo, es cariñoso pero no pesado, es inteligente, atento y no es habitual que sean ni ruidosos ni destructivos.

Tienen una gran curiosidad por todo lo que los rodea, lo cual podemos aprovechar para presentarle a toda la familia, incluyendo otras mascotas, pues no tienen problemas para convivir con otros animales, mucho menos si han sido presentados siendo cachorro.

Aun así, siempre es aconsejable empezar con su educación en cuanto nos sea posible, intentando inculcar los conocimientos y entrenamientos básicos cuando aún son unos dulces cachorritos, como la educación para que hagan sus necesidades.

Colores del aussiedoodle

El aussiedoodle puede presentar diferentes colores, entre los que se incluyen:

• Rojo tricolor.
• Negro tricolor.
• Rojo merle.
• Azul merle.
• Bronceado.
• Gris.
• Blanco.
• Cualquiera de los otros colores mezclado con negro.

Una de las grandes bondades de la raza de perro aussiedoodle es su carácter ejemplar. El aussiedoodle es un perro cariñoso, atento, afectuoso y sumamente empático, que brindará atención y cariño a todo el que esté cerca.

Son además muy inteligentes, por lo que aprenden muy rápido, lo cual combinado con su predisposición para el trabajo, heredada del pastor australiano, hace que aprendan a una velocidad de vértigo. En adición a todo ello, son perros bastante dóciles, que no se resisten al adiestramiento.

Estos perros tienen una gran capacidad de adaptación, siendo posible que vivan tanto en pisos como en casas, ya estén en el campo, en la ciudad, cuenten o no con jardín y sean de un tamaño u otro. Aunque sí es cierto que, dado que son perros activos, se aconseja que si no disponen de espacio suficiente para corretear y jugar, sí que tengan posibilidad de hacerlo fuera, en el parque o en espacios abiertos adaptados.

En cuanto a su relación con los demás, el aussiedoodle es dulce y afectuoso con todos, mayores, niños, otros animales, da igual con quien se relacione, por su parte nunca habrá problemas para crear una relación armoniosa y magnífica.

Los principales cuidados a tener en cuenta cuando compartimos hogar con un aussiedoodle son los referentes a su alimentación y actividad física diaria. En cuanto a la nutrición, necesitamos que su dieta sea adecuada y esté ajustada a sus requerimientos nutricionales y energéticos. Para ello, lo más sencillo suele ser recurrir a un pienso de calidad, aunque si queremos darles otro tipo de dieta, hemos de hacerlo bajo supervisión del veterinario.

Estos perros son bastante activos, por lo que necesitan hacer ejercicio físico de forma diaria. Para ello, además de los paseos, necesitan desfogar con juegos o circuitos, como los circuitos de Agility, en los que son muy buenos.

Su manto no requiere de muchos cuidados, en el caso de los ejemplares con manto similar al de los caniches, será suficiente con que los cepillemos con asiduidad, aproximadamente una vez al día o como mucho cada dos días. Se suelen aconsejar recortes del pelo cada 8-12 semanas. En el caso de que el manto se parezca más al del pastor australiano, los cuidados serán menores, siendo menos exigentes, aunque también se aconseja el cepillado regular.

En cuanto a la higiene, se aconseja recurrir a los baños solo cuando sea necesario. Algo que sí ha de hacerse periódicamente es cuidar de sus oídos, dientes y ojos, realizando limpiezas regulares, así como mantener sus uñas recortadas. En este otro artículo te enseñamos a ¿Cómo cortar las uñas a un perro en casa?

Como os hemos comentado con anterioridad, los perros de la raza aussiedoodle son sumamente inteligentes y atentos. Esto, combinado con su predisposición a la acción hace que sean muy fáciles de entrenar.

Son además muy curiosos y activos, por lo que quizás una buena técnica de adiestramiento sea incluir juegos en los entrenamientos, pues así mantendremos su atención y aprenderán mucho más rápido.

También existen otras opciones, pero sea cual sea la que elijamos, ha de ser una técnica basada en el respeto y el cariño mutuos, evitando a toda costa los castigos y la agresividad.

El aussiedoodle no es un perro demasiado enfermizo, sin embargo, puede heredar afecciones congénitas tanto del pastor australiano como del caniche. Una de las afecciones más frecuentes y problemáticas es la conocida y temida displasia de cadera, que en los casos más graves requiere de complicadas intervenciones quirúrgicas. Para conocer el estado de las articulaciones de nuestra mascota y poder evaluarlo, es necesario que recurramos a chequeos veterinarios periódicos. Estos han de incluir, además de las comunes analíticas sanguíneas, pruebas radiológicas preventivas y diagnósticas.

También presentan bastante tendencia a desarrollar infecciones auditivas, por esta razón resulta de tanta importancia tener controlado el estado de sus oídos y realizar limpiezas con un producto ótico adecuado.

A parte de todo ello, recomendamos encarecidamente mantener a nuestras mascotas al día de sus vacunaciones, así como realizar revisiones y desparasitaciones, tanto internas como externas, con regularidad.

Antes de adoptar cualquier animal, lo primero es considerar sus necesidades, tanto afectivas como físicas y mentales. En este sentido, el aussiedoodle demanda compañía, afecto, una alimentación de calidad y altas dosis de ejercicio, pues es un perro activo.

Puede ser una gran opción para aquellos que sean alérgicos al pelo de perro, pues es considerado un perro hipoalergénico por dos razones: no pierde apenas pelo y no genera casi nada de caspa.

Si tras considerar sus requerimientos sigues pensando que quieres compartir tu vida con un aussiedoodle, te aconsejamos recurrir a asociaciones, protectoras y perreras de tu zona. Adoptando a un animal abandonado, le estás dando una oportunidad de vivir una vida feliz formando parte de tu familia.