Collie barbudo o bearded collie

Al ser una raza muy antigua, la historia del collie barbudo es algo incierta. Se cree que desciende de perros pastores polacos de las llanuras que habrían sido llevados hasta las islas británicas por comerciantes polacos. También es posible que el komondor sea otro ancestro de los collies barbudos. Esos perros se habrían cruzado con perros locales, pastores de rebaños, originando así la nueva raza.

Sea cual fuere el origen de la raza, lo cierto es que el collie barbudo fue utilizado por siglos para guiar y cuidar los rebaños en Gran Bretaña. Aún hoy en día se sigue usando a estos perros como ayudantes de los pastores, aunque lógicamente sus responsabilidades son menores que antaño.

Durante la década de los '40, G. Olive Wilson empezó a criar collies barbudos a partir de una sola pareja, sus perros Bailey y Jeannie. Ese fue un punto crítico de la historia de la raza, ya que esos perros y su descendencia se convirtieron en los principales fundadores del collie barbudo tal como lo conocemos hoy en día. Actualmente, el collie barbudo es un perro muy apreciado como mascota y perro de exposición, qunque no goza de tanta popularidad como otros perros pastores.

El cuerpo de este perro pastor es más largo que alto, está cubierto de un hermoso y largo pelaje, y tiene la línea superior nivelada y el pecho profundo. Aunque es un animal delgado, este collie es fuerte y ágil, excelente para realizar tareas que requieren esfuerzo físico.

La cabeza del beardie es bien proporcionada al resto del cuerpo, tiene morfología más bien cuadrada y presenta un hocico potente. Le da al perro una expresión inteligente y curiosa. La nariz es grande, cuadrada y de color negro, aunque en perros azules y marrones suele ser del color del manto. Los ojos son grandes y de expresión suave y afectuosa. El color de los ojos suele ser igual al del color del manto. Las orejas son medianas y cuelgan a los lados de la cabeza. La cola del collie barbudo es larga y de inserción baja. El perro nunca la lleva sobre el dorso, ni siquiera durante la carrera.

El pelo de este perro es de doble capa. La capa interna es suave, lanosa y apretada. La capa externa es lisa, fuerte, dura e hirsuta. Puede ser levemente ondulada, pero no forma rulos ni lanosidades. La capa externa es más larga en las mejillas, labio inferior y mandíbula inferior, formando una barba típica que le da el nombre a la raza. El color del pelo puede ser gris (pizarra y en todos los tonos), bayo rojizo, negro, azul, marrón y arena, con o sin marcas blancas.

La altura a la cruz de los machos va de 53 a 56 centímetros. La de las hembras va de 51 a 53 centímetros. El peso ideal no está indicado en el estándar de la raza, pero estos perros suelen pesar entre 16 y 25 kilogramos.

El collie barbudo es un perro que se adapta maravillosamente a una vida proactiva llena de estímulos que puedan motivarle mental y físicamente. Se trata de perros muy activos y llenos de energía, perfectos para personas que quieran compartir con su perro unos hábitos aventureros e incansables. Es imprescindible que la familia que vaya a adoptarle tenga claras estas exigencias. El bearded collie no es un perro para familias sedentarias.

Son en general perros muy sociables si se les educa correctamente. Pueden llevarse de maravilla con otros perros, gatos, mascotas diversas y niños. Si decidimos adoptar a este perro tendremos alegría y diversión asegurada para los más pequeños ya que adorarán jugar con él y pasar tiempo a su lado.

Por otro lado, el bearded es un perro algo independiente en su día a día pero que esto no nos engañe: se trata en realidad de un perro muy sensible que necesita afecto, atención y cariño constante. No suelen llevar bien que les dejemos solos durante demasiado tiempo, requieren una familia en la que puedan apoyarse prácticamente todo el día.

Bien educado podríamos decir que el collie barbudo es un perro bonachón, de carácter afable y con muy pocas excentricidades. Disfrutará con tener una familia a su lado que cumpla con sus necesidades y que le proporcione el cariño que merece. Si cumplimos todo esto, tendremos a nuestro lado un compañero de vida estupendo.

El cuidado del pelaje del collie barbudo requiere tiempo y dedicación. Es necesario cepillar y peinar muy regularmente a los beardies, con un mínimo de tres veces a la semana para evitar que el pelo se enrede. Como punto positivo en cuanto a cuidados del manto se refiere, podemos destacar que el beardie es un perro que apenas pierde pelo. Le bañaremos cuando realmente esté sucio aunque si tubiéramos que determinar una frecuencia en el baño de esta raza rondaría el mes o los dos meses.

Estos perros se adaptan a todo tipo de ambientes, incluyendo en núcleos urbanos. Dentro de un piso o apartamento, el beardie puede sentirse muy a gusto si se cumplen con sus necesidades de forma apropiada. Son perros que necesitan mucho ejercicio y no basta con pasearlos una vez al día. Para canalizar sus energías es necesario brindarles tres largos paseos diarios.

A pesar de su vida como perros pastor, los bearded collie no son perros para vivir en el exterior. Necesitan una familia y un hogar en el que pasar su tiempo junto a sus seres queridos. Por sus grandes necesidades afectivas este punto debe tenerse muy en cuenta.

Además, es importante brindarles un tiempo de juego intenso entre tres y cuatro veces a la semana y, de preferencia, animarles a practicar algún deporte canino. El herding o pastoreo es el deporte ideal para estos perros, pero también pueden disfrutar enormemente practicando agility otras muchas actividades.

La educación del collie barbudo empezará por llevar a cabo correctamente su proceso de socialización. Como hemos explicado anteriormente son perros sociables por naturaleza pero se debe trabajar este aspecto desde que son cachorros y hasta en su vida adulta. Es fundamental para evitar miedos, malas reacciones o comportamientos inapropiados. Enseñaremos al perro a relacionarse con todo tipo de personas (incluyendo niños), otros perros, otros animales, el entorno y todo tipo de objetos y estímulos. Es muy importante prestar atención a la socialización para que sea un perro adulto emocionalmente estable.

Además, los collies barbudos son perros muy inteligentes que pueden destacar casi en todas las especialidades del adiestramiento canino. Utilizaremos siempre el refuerzo positivo para trabajar con él las órdenes básicas de adiestramiento y hasta en el adiestramiento avanzado.

Estos perros no suelen presentar problemas de comportamiento con frecuencia, pero es necesario brindarles mucho ejercicio y compañía para que no se sientan ansiosos ni aburridos. Cuando son aislados en un jardín o patio, suelen desarrollar conductas destructivas y, en algunos casos, ansiedad por separación.

Sin embargo, existe un comportamiento innato en estos perros que puede ser muy molesto. Dado que los instintos de pastoreo de los collie barbudos son muy fuertes, algunos ejemplares tienden a "guiar" a niños y otras mascotas. Esa conducta tiene una fuerte base genética por lo que, cuando se presenta, no es posible eliminarla, pero sí es posible canalizarla a actividades como el herding (deporte de pastoreo) o juegos planificados.

Aunque en general esta raza es bastante saludable, tiene cierta predisposición a algunas enfermedades hereditarias que detallaremos a continuación. Esas enfermedades no se presentan en el collie barbudo con tanta frecuencia como en otras razas de perros, pero es bueno saber que pueden ocurrir, para comprender que es necesario visitar el veterinario con cierta regularidad, cada 6 meses es la periodicidad recomendada:

• Displasia de cadera
• Epilepsia
• Enfermedades del colon
• Pénfigo
• Atrofia progresiva de retina
• Estenosis aórtica
• Cataratas
• Enfermedad de von Willebrand

Por otro lado, no debemos olvidar las enfermedades infecciosas que pueden transmitirse entre perros. Seguir correctamente el calendario de vacunación será imprescindible para proteger a nuestro perro de todas ellas. Finalmente recordamos la importancia de seguir la desparasitación interna cada 3 meses y la desparasitación externa de forma mensual. Si sigues nuestros consejos disfrutarás de un collie barbudo feliz y sano entre 14 y 16 años.