Sabueso de Baviera

Como hemos dicho, el sabueso de Baviera es un perro de caza. En concreto, se destinaba a la persecución de animales ungulados heridos, pues se desarrolló para seguir el rastro de la sangre. La FCI lo incluye en su grupo VI, el dedicado a los perros sabuesos, de rastro y semejantes. Está en la sección 2 y tiene prueba de trabajo.

Como todos los sabuesos, destaca por su agudo olfato, que es el que le permite seguir los rastros, de los que avisan ladrando. Los perros sabuesos tienen una larga historia acompañando a los cazadores, pero la aparición del sabueso de Baviera es más reciente y tuvo lugar cuando, ya en el siglo XIX, se necesitó un perro capaz de buscar rastros con correa, ladrar para dar la alerta y ser tan resistente como para trabajar en terrenos montañosos.

Para obtener todas estas características en una sola raza surgió, en 1870, el sabueso de Baviera, cruzando rastreadores de Hannover con sabuesos rojos de montaña. La nueva raza fue tan exitosa que consiguió desplazar al resto de perros de caza de la zona, siendo, en la actualidad, el perro típico de cazadores y guardabosques en Baviera.

Los sabuesos de sangre de Baviera son perros de talla mediana, formas proporcionadas y buena musculatura, aunque más ligeros que los sabuesos tradicionales. Las hembras son más pequeñas y menos pesadas que los machos, ya que, en general, el tamaño de ellas de 44-48 cm de altura a la cruz y el de ellos de 47-52 cm. En cuanto al peso, ronda los 20-25 kg.

Las anteriores no son las únicas características del sabueso de Baviera, destacamos los siguientes rasgos físicos:

• Cabeza: cuentan con un stop marcado. La trufa es negra o roja oscura y posee unos orificios bien abiertos, mientras que el hocico se dispone recto o levemente arqueado. Destacan sus potentes mandíbulas, con mordida en tijera. Los ojos muestran una expresión atenta y suelen ser marrones. Las orejas son largas, llegando hasta la trufa. Son de inserción alta y tienen el borde redondeado. Cuelgan pegadas a las mejillas y sin doblarse.
• Cuerpo: ligeramente alargado, con un cuello fuerte, con la piel algo floja. La cruz se les marca poco y poseen una espalda potente que termina en una grupa larga y aplanada. La caja torácica es profunda.
• Patas: son largas, musculadas y rectas, con los codos pegados al cuerpo. Los pies tienen los dedos arqueados y unas almohadillas gruesas. Las uñas son oscuras.
• Cola: es mediana, de inserción alta y se dispone horizontal o un poco inclinada hacia abajo.
• Manto: el pelo es denso y pegado al cuerpo. Es de tacto áspero.

Colores del sabueso de Baviera

El estándar de este sabueso determina los colores y los patrones que se aceptan. En cuanto a los colores, se habla de diferentes tonalidades de rojo (oscuro, marrón, amarillento y ciervo), amarillo claro y gris rojizo. Suelen verse con más intensidad en la zona del lomo. Puede haber ejemplares atigrados o manchados y con la llamada "estrella del sabueso", que es una marca clara en el pecho.

Estos sabuesos son perros seguros de sí mismos, intrépidos, inteligentes y de gran voluntad. Están acostumbrados a ladrar para avisar de los rastros que encuentran. Este es uno de los motivos por los que es importante proporcionarles una buena educación para evitar que sus rasgos típicos degeneren en problemas de conducta que dificulten la convivencia, por eso se recomiendan para personas que tengan alguna experiencia previa con perros.

Por otra parte, despliegan una gran actividad, lo que hay que tener en cuenta, ya que van a necesitar paseos y ejercicio intenso a diario. Si respetamos sus requerimientos de estimulación mental y física, obtendremos un perro tranquilo, dócil y equilibrado, resultando un excelente compañero, muy apegado y leal a su cuidador y, en general, a su familia.

En cambio, con los desconocidos se mostrará reservado, en ningún caso agresivo. Con otros animales podría tener problemas en la convivencia, por eso requerirá, de nuevo, educación y pautas de presentación. Hay que tener especial cuidado con animales pequeños debido a su fuerte instinto de caza. Se recomienda para casas que cuenten con espacios exteriores y no para apartamentos.

Los cuidados básicos del sabueso de Baviera en cuanto a alimentación e higiene no son muy complejos ni difieren de los que necesitan perros de otras razas. En cambio, sí es diferente la actividad física y mental que debe realizar a diario, un punto fundamental para su bienestar al que debemos dedicar tiempo y atención. Con más detalle:

• Alimentación: como cualquier otro perro, el sabueso de sangre de Baviera necesita una alimentación de calidad, basada en la proteína procedente de tejido animal. En este punto, conviene que calculemos las cantidades en función de la actividad física que realice cada ejemplar y que dividamos la ración diaria en varias tomas para prevenir problemas digestivos potencialmente graves, como la torsión de estómago.
• Ejercicio: requiere varios paseos largos al día y, como mínimo, uno de ellos debe incluir la realización de actividad física, como juegos, carreras, etc. Por otra parte, al ser un perro de gran olfato, puede disfrutar mucho con juegos en los que deba guiarse por él, por ejemplo, para encontrar un premio, a una persona o cualquier objeto que hayamos escondido. Los juguetes interactivos o de inteligencia pueden ser interesantes para estimularlo mentalmente. También puede participar en disciplinas deportivas.
• Higiene: su aseo es muy sencillo, gracias a un pelaje corto y sin complicaciones. Con cepillarlo de vez en cuando será suficiente para mantenerlo reluciente. Cada cierto tiempo podremos bañarlo, siempre con productos específicos para perros, y teniendo cuidado de secarlo por completo. También revisaremos periódicamente las orejas, los ojos, la boca y las uñas para limpiar o cortar cuando sea necesario. Aquí te explicamos Cómo cortar las uñas a un perro en casa.

Como hemos comentado, el sabueso de Baviera es más recomendable para personas que ya disponen de alguna experiencia porque son perros que necesitan una educación firme, además de estimulación a nivel físico y mental para mantenerse equilibrados. Por ejemplo, hay que tener presente que para que podamos soltarlos en cualquier sitio deben estar perfectamente educados. No podemos arriesgarnos a que no respondan a la llamada, lo que podría suceder si se distraen olfateando algún rastro. La educación debe basarse siempre en el refuerzo positivo y ser firme y paciente, pues pueden mostrarse obstinados e independientes.

Hemos dicho también que son algo desconfiados con los extraños. Para prevenir problemas, además de la educación, es imprescindible proporcionarles una correcta socialización temprana, exponiéndolos desde el primer momento a diferentes escenarios, ruidos, personas, etc., para que acepten las novedades de una manera positiva. En este post te explicamos Cómo educar a un cachorro.

Con los cuidados adecuados, la esperanza de vida de este perro ronda los 10-14 años. El sabueso de sangre de Baviera es un perro resistente, también en cuanto a la salud se refiere, aunque esto no impide que presente cierta propensión a algunas patologías. Entre ellas destacamos la displasia de cadera, los problemas oculares, las alergias y algunos trastornos a nivel digestivo, como la torsión de estómago.

Las patas también pueden presentar lesiones, sobre todo si la actividad física del perro se desarrolla en el monte o en espacios naturales similares. Podemos revisarlas tras cada paseo. Por el mismo motivo, la visita a zonas de vegetación puede aumentar el riesgo de que contraiga garrapatas. Es importante que tengamos el calendario de desparasitaciones al día y que sigamos las recomendaciones del veterinario en cuanto a revisiones, vacunaciones o la castración. La medicina preventiva puede ayudar a alargar la vida del perro y a mejorar su bienestar.

Por otra parte, la disposición colgante de sus orejas lo hace más propenso a sufrir infecciones de oído. También hay que vigilar la presencia de cuerpos extraños, como espigas, que se pueden introducir en los conductos auditivos durante los paseos por zonas de vegetación.

Los ejemplares de sabueso de Baviera suelen criarse para la venta, con lo que no es frecuente encontrarlos en adopción, sobre todo en el caso de los cachorros. Al contrario, sí abundan en las perreras y asociaciones protectoras los perros tipo sabueso en general, muchos de ellos mestizos. De hecho, incluso hay algunas dedicadas en exclusiva a recoger, recuperar y dar en adopción a sabuesos de todas las edades y condiciones.

Por este motivo, si deseas adoptar un sabueso de Baviera, el primer paso es buscar en estas asociaciones, por si dispusiesen de algún ejemplar aunque no sea de pura raza. En cualquier caso, es muy factible adoptar un perro sabueso en perreras y protectoras. Aunque no sea de Baviera, también merece un buen hogar más allá de su raza.