¿Cómo curar una herida a un perro?

Nuestros compañeros caninos se pueden hacer heridas por situaciones muy diversas, desde inocentes paseos en el exterior o excursiones por el campo explorando nuevos lugares hasta por peleas, caídas o accidentes. Según la magnitud del daño, la herida será más o menos grave, pudiendo ser rasguños o raspaduras o por el contrario, heridas más profundas, abiertas o infectadas. Por ello, a continuación vamos a ver cómo curar una herida a un perro en la pata, en la cabeza o en la oreja, entre otras zonas.

¿Cómo curar una herida a un perro en la pata?

A la hora de limpiar una herida en la pata de un perro debemos, con las manos limpias, retirar la suciedad de la zona con gasas impregnadas de agua y jabón y recortar los pelos si el canino tiene pelo largo. Una vez limpia, se procederá a pasar otra gasa pero esta vez con una solución antiséptica como povidona yodada diluida o clorhexidina. En la mayoría de los casos está indicado el uso de una pomada específica para ayudar en la cicatrización de la herida.

¿Cómo curar una herida a un perro en la cabeza?

Si tu canino tiene una herida en la cabeza, a la hora de higienizar la herida debes ayudarte de alguien para que el perro no se mueva y te permita realizarlo adecuadamente además de para evitar que el perro te pueda morder. La limpieza se debe hacer como en el caso anterior, seguido de antisepsia para prevenir infecciones en la herida.

¿Cómo curar una herida a un perro en la oreja?

Como en el caso anterior, las heridas en las orejas requieren de ayuda para que tu perro no se mueva y dificulte mucho la ejecución, especialmente si es una raza de orejas largas y caídas. En los perros de pelo largo, será adecuado el recorte del pelo para facilitar la limpieza y la desinfección.

¿Cómo curar una herida a un perro en el cuello?

Caso parecido ocurre con las heridas en el cuello en perros, que debes ayudarte de alguien para evitar que se mueva y pueda agredirte por las molestias que se produce al curar una herida. Los pasos son los mismos, una correcta limpieza y recorte de los pelos en caso necesario, seguido de una correcta aplicación de antiséptico y finalmente proceder al empleo de pomada que ayude en la cicatrización. En los casos donde las heridas estén infectadas o sean más graves, el procedimiento es más complejo, como veremos a continuación.

Si tienes dudas sobre cómo curar una herida profunda a un perro o de cómo curar heridas de perros profundas, debes tener en cuenta que este tipo de heridas requieren de atención veterinaria, pues generalmente son heridas que incluyen varias capas de piel y que la cicatrización es más tardía.

Además, en muchas ocasiones se trata de mordiscos, con el riesgo de infección que tiene, o tienen clavados objetos punzantes, por lo que lo mejor es que los retiren, si es el caso, con sedación o bajo condiciones adecuadas en el centro veterinario. En estas heridas, se corre el riesgo de transmisión del tétanos, por lo que posiblemente vacunen a tu perro.

Los pasos a seguir incluyen:

• La retirada de balas u objetos que puedan haber en la herida.
• La limpieza y desinfección de la misma.
• En algunos casos, se deberá tapar con un vendaje o envolverla con gasa, según su tamaño y gravedad.

Eso sí, hay que tener cuidado con los vendajes pues si están muy apretados pueden reducir el flujo sanguíneo, lo que retrasa la curación de la herida y para una buena cicatrización es necesario que reciban oxígeno, por lo que se deberá cambiar el mismo cada 12 o 24 horas y si parece que está curándose adecuadamente tras 72 horas, se podrá retirar el vendaje.

Te hablamos de las "Herida en perros: primeros auxilios" en el siguiente artículo de ExpertoAnimal.

Las heridas abiertas son aquellas expuestas debido a que la piel tiene una rotura o apertura. Tal y como ocurre con las heridas profundas, las heridas abiertas en perros deben ser tratadas y controladas por un profesional veterinario porque son heridas complejas. Además, estas heridas tienen un alto riesgo de infección (si no lo están ya) por lo que suelen requerir antibióticos.

Como todas las heridas en perros que hemos visto, el primer paso para que se pueda curar una herida abierta es mediante una buena limpieza y desinfección pero, en los casos de heridas abiertas, en ocasiones es necesario una desbridación, que consiste en la eliminación del tejido necrótico o muerto que se encuentre en la herida para así favorecer una mejor cicatrización.

Esto se puede realizar mediante una escisión quirúrgica por capas, teniendo cuidado con los huesos, tendones y nervios. El uso de apósitos también ayuda a desbridar la herida al absorber los detritus y tejidos muertos para separarlos de la herida.

La limpieza de la herida se realiza de dentro hacia afuera para llevar para fuera los restos. La limpieza siempre se realiza con gasas o paños evitando el algodón que puede dejar restos en la herida. Si además de abierta la herida es más o menos profunda, una buena forma de facilitar la remoción de los materiales extraños es mediante el uso de una jeringa de unos 60 ml con suero fisiológico para hacer presión y limpiar mejor la herida.

Las heridas abiertas se pueden cerrar o no cerrar según el tipo de herida y el lugar, pues en los miembros distales no suele poderse cerrar por la poca laxitud de la piel, pudiendo a veces requerir un injerto de piel de una localización más alejada.

A la hora de cerrar una herida en perros, podemos pensar en cuatro tipos de cierres:

• Cierre inmediato: el primario, el que se realiza tras una correcta limpieza y desinfección de la herida.
• Cierre primario retardado: el que se realiza de uno a tres días después de producirse la herida, cuando aún no ha aparecido el tejido de granulación.
• Cierre secundario: el que se hace cuando ya ha aparecido el tejido de granulación, un tipo de tejido conectivo formado durante la fase de proliferación de la curación de las heridas y que hace de andamio para la regeneración del tejido dañado.
• Cierre por segunda intención: el que se realiza cuando la herida está infectada o es grave por trauma excesivo o no se puede aproximar el tejido adecuadamente y consiste en dejar la herida abierta para que vaya promoviendo un tejido de granulación y vaya cicatrizando desde las capas más profundas hasta las externas.

A continuación te dejamos algunos "Remedios caseros para cicatrizar heridas en perros" que pueden interesarte.

Si te preguntas "¿qué hacer si mi perro tiene una herida con pus? debes saber que posiblemente la herida se encuentre infectada, pues el pus es el conjunto de células de la inflamación y las bacterias. Posiblemente una herida con pus en tu perro también se encuentre acompañada de hinchazón, enrojecimiento y mal olor y ante esto lo que debes hacer es acudir a un centro veterinario para que le administren un antibiótico eficaz.

La limpieza exhaustiva de la herida también es importante para retirar el máximo pus posible junto con el empleo de antisépticos y del antibiótico de manera local y/o sistémica en forma de pomadas, pastillas, jarabes o inyecciones para prevenir que la infección se propague al organismo canino en general, lo que se conoce como septicemia.

El proceso de curación de una herida en perros ocasiona variedad de sensaciones cutáneas algunas desagradables como las que producen picor, dolor o ardor, haciendo que nuestros perros quieran llegar a la herida para rascarse, lamerse o autolesionarse debido al estrés que produce esta situación.

Cuando los perros hacen esto, la humedad de la saliva y la presión de la lengua puede causar daños en la herida. La agresión por los dientes puede empeorar mucho la curación y si hay puntos o grapas, pueden soltarse y abrirse la herida. Además, la boca del perro contiene un gran número de bacterias, por lo que puede predisponer a una infección.

Para evitar que un perro llegue a la herida hay varios trucos, quizás el más conocido es el collar isabelino, que se pone alrededor del cuello para evitar que el perro pueda llegar a la herida con la boca. Aunque algunos perros llevan muy mal tener uno de estos, deprimiéndose y queriendo quitárselo, es muy útil para evitar que los perros empeoren la cicatrización de su herida.

Otra forma eficaz de proteger las heridas de un perro si se encuentran en la zona abdominal o de la espalda es el uso de bodys para perros o si son perros de pequeño tamaño, utilizar bodys de bebés. Si la herida está en las extremidades, el uso de calcetines para tapar la herida también puede ser una buena opción, fijada mediante un vendaje.

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