Barbet o perro de agua francés

El origen del perro barbet no está muy establecido, ya que existen diversas teorías. La más aceptada dice que esta raza es de origen francés, donde lo utilizaban como perro de caza en pantanos y ríos. Debido a esto, se le denominó perro de agua francés y fue ganando popularidad, hasta que llegó a formar parte de la realeza cuando el Rey Enrique IV adoptó un ejemplar. En Francia existen registros de esta raza desde el siglo XVI, lo que la hace una raza muy antigua. Otras teorías dicen que proviene de Polonia e incluso del norte de África y que se importó a Europa en la Edad Media.

El perro barbet estuvo a punto de extinguirse durante la Segunda Guerra Mundial, pero tres expertos amantes de esta raza se encargaron de que no ocurriese reactivando su cría.

Este perro se fue extendiendo hasta que sus genes, al cabo de los siglos, ayudaron a conformar razas de gran parte de perros pastores y el caniche. La Federacion Cinológica Internacional aprobó esta raza en 1954 y su estándar oficial en 2006, y en 2005 fue reconocida por el United Kennel Club. Se cree que a día de hoy se encuentran unos 1.000 perros de esta raza en Francia, Suecia, Suiza, Alemania y Canadá.

La raza barbet es mediana-grande y se caracteriza principalmente por presentar un pelaje rizado muy abundante que cubre todo su cuerpo, incluidas patas y cara. El resto de características físicas que definen a un perro de raza barbet son:

• Altura de 58-65 cm a la cruz en los machos y 53-61 cm en las hembras.
• Peso entre 17 y 30 kg.
• Buena musculatura y estructura ósea.
• Cabeza redonda y ancha con ojos de similares características.
• Borde de los párpados de color marrón o negro.
• Hocico corto y ligeramente cuadrado.
• Trufa negra.
• Bajo el mentón se forma una larga barba.
• Orejas planas, bajas y anchas.
• Labios gruesos.
• Cuello fuerte y corto.
• Tórax bien desarrollado.
• Extremidades fuertes y gruesas.
• Cola de baja unión y curvada hacia dentro, con forma de gancho.

Además de esto, la piel de este perro es muy gruesa, lo que junto a su pelaje denso y acolchado le permite resistir el frío, así como pasar mucho tiempo en el agua o zonas húmedas, de ahí su nombre de perro de agua.

Colores del perro barbet o perro de agua francés

Los colores aceptados en esta raza de perro son:

• Negro.
• Gris.
• Marrón.
• Cervato claro.
• Arena.
• Blanco.

El perro barbet es amigable, familiar, divertido, juguetón y sociable, lo que le hace ideal para familias con niños. Le encantará salir al exterior a jugar, y si hay agua cerca... ¡mucho más! Son excelentes nadadores y aman el agua, pero siempre habrá que tener cuidado y no descuidarle si se da un chapuzón en algún río, piscina o playa para prevenir posibles accidentes.

No suelen presentar problemas relacionados con el comportamiento, pero si se encuentran muchas horas diarias solos y sin poder realizar actividad física aumentará el riesgo de sufrir ansiedad o desarrollar comportamientos destructivos en la casa.

Este perro se lleva bien con otros canes e incluso animales de otras especies, así como tolera muy bien las nuevas incorporaciones humanas a la casa y los invitados. En general son perros con muy buen carácter que desarrollarán relaciones muy cercanas con los integrantes de la familia que lo cuida.

La educación de un perro de raza barbet suele ser sencilla, pues son muy inteligentes, atentos y obedientes. No hay que olvidar que toda la educación canina debe ser constante, paciente y disciplinada. Aprenderá rápido trucos y órdenes y se podrá conseguir en poco tiempo una buena educación que le convertirá en un perro adulto realmente dócil, leal, educado y obediente.

A partir del mes de vida de estos perros se debe comenzar con el periodo de socialización y a partir de ahí comenzar con la educación. Se deben utilizar refuerzos positivos y nunca negativos para conseguir un adecuado y cómodo adiestramiento.

Hay que recordar que es un perro que puede resultar destructivo ante la soledad y la falta de ejercicio prolongada, por lo que necesita una cantidad moderada de ejercicios para mantener ese equilibro comportamental.

Estos perros demandan mucha actividad física al aire libre, ya que son tan activos que necesitan espacio para el desarrollo de todo su potencial y, así, mantenerse saludables, felices y equilibrados. Las prácticas deportivas de agility o natación resultarán muy beneficiosas para esta raza.

Aunque no demandan muchos cuidados, sí requieren lo básico de todos los perros: salir a pasear, juegos, comida abundante repartida en varias veces al día al ser perros de buen tamaño y que contenga todos los nutrientes necesarios pero sin llega a ser excesiva para evitar la obesidad, ya que tienden a ser glotones.

La higiene es clave, el pelo de estos perros es abundante, denso y rizado, por lo que al menos un baño al mes, un correcto y frecuente cepillado y el corte de pelo cada seis meses es clave.

Las visitas veterinarias son necesarias, frecuentemente para desparasitación, vacunación y chequeos rutinarios, así como cualquier consulta ante la aparición de alguna sintomatología indicativa de que algo va mal.

El perro de agua francés o barbet por lo general es fuerte y sano, con una esperanza de vida de entre 12 y 15 años. Sin embargo, hay que considerar las siguientes enfermedades que por su tamaño y raza pueden tener relativa frecuencia:

• Otitis: al estar expuestos a lugares acuáticos, puede aumentar la predisposición a padecer la inflamación y/o infección tan dolorosa del oído. Es importante vigilar el estado de las orejas y el oído de los barbet, especialmente si tienen contacto con el agua y limpiarlo cuando así sea.
• Epilepsia: por una condición hereditaria, presentan signos inesperados de convulsión que generalmente duran muy poco tiempo.
• Atrofia progresiva de retina: enfermedad de origen hereditario degenerativa y progresiva que acaba con producir ceguera en el perro.
• Displasia de cadera: enfermedad que afecta a la articulación de la cadera, debido en gran parte a su buen tamaño y rápido crecimiento y a su herencia, siendo una enfermedad degenerativa que puede traer problemas en su movilidad, cojeras y dolor.
• Displasia de codo: parecido a lo anterior pero afectando a la articulación del codo, causando también problemas en la marcha, cojera y dolor.
• Hernias: las hernias inguinales, umbilicales y perianales molestas y/o dolorosas también pueden aparecer en los barbet.

En climas fríos o si están un tiempo prolongado mojados tras un baño en invierno, pueden desarrollar problemas respiratorios a causa del frío, como son la inflamación de la tráquea o traqueítis y otros problemas bronquiales o pulmonares.

Este perro se puede adoptar si hay suerte en protectoras o refugios, aunque no suele ser lo frecuente. En caso negativo, siempre se puede preguntar si conocen a alguien que esté dispuesto a dar en adopción algún ejemplar o dirigirnos a asociaciones especializadas en el rescate de la raza y preguntar por lo mismo, como pueden ser:

• SOS Perros de Aguas BCN.
• APAGUAS.

Cabe recordar que es un perro muy bueno y dócil, pero a la vez necesita estar al aire libre, por lo que en un piso o casa sin jardín o sin posibilidades de salir al exterior puede resultar estresante y motivo de desarrollo de problemas comportamentales. Adoptar un perro no es un capricho y hay que meditarlo bien, asumir que un nuevo miembro va a entrar a la familia y que hay que cuidarlo y cubrir todas sus necesidades como tal.