¿Es necesario cruzar a un perro?

Cuando hablamos de cruzar a un perro hacemos referencia a aparearlo para que pueda reproducirse y tener descendencia.

Los humanos creemos que es necesario que los perros se reproduzcan para que puedan tener un desarrollo emocional pleno y sentir completado su ciclo vital, no obstante, esta es una percepción meramente humana ya que los perros no tienen noción alguna acerca del sentido reproductivo de su vida.

Los perros pueden tener un desarrollo completamente normal sin que se reproduzcan, del mismo modo, debes saber que el hecho de cruzar a un perro no mejora su salud.

Así como cruzar a un perro no repercute de forma beneficiosa sobre su salud, la castración sí es una medida adecuada para mejorar su calidad de vida:

• En perras previene la piómetra y disminuye los riesgos de presentar tumores de mama, problemas vaginales y tumores ováricos.
• Al castrar a un perro macho se evitan los problemas de próstata (abscesos, quistes, agrandamiento) y se disminuye el riesgo de que presenten tumores dependientes de hormonas.

La castración conlleva algunos riesgos pero estos son mínimos y son los que se asocian a cualquier otro tipo de intervención quirúrgica, además, realizada en perros jóvenes resulta una práctica ampliamente segura.

En ocasiones cuando nuestra mascota es un perro hembra queremos cruzarlo para así poder observar el milagro de la vida en nuestro propio hogar, lo que tiene mucho sentido cuando además hay niños pequeños en casa, ya que puede resultar una experiencia maravillosa y didáctica como pocas.

Pero hay que tener mucho cuidado, porque si bien esta experiencia puede resultar maravillosa, también puede resultar traumática, ya que durante el parto de la perra pueden surgir numerosos problemas, incluso en algunas ocasiones, la perra puede estresarse y sacrificar a los cachorros por considerar que estos van a nacer en un ambiente hostil.

¿Te imaginas que la experiencia fuera finalmente negativa? Esto resultaría fatal para la perra y también para los más pequeños de la casa.

Dos propietarios deciden cruzar a sus perros porque cada familia humana quiere acoger a un nuevo cachorro en su hogar, pero las perras pequeñas suelen tener camadas de entre 3 y 5 crías y las perras grandes de entre 7 y 9. Por lo tanto, antes de decidir cruzar o no a tu perro debes tener en cuenta lo siguiente:

• Es muy difícil que puedas asegurar que cada uno de los cachorros será acogido en un hogar donde se le brinden todos los cuidados que necesita.
• No solo debes tener en cuenta la descendencia de tu perro, si no la futura descendencia de su camada, ya que una perra y sus futuras descendencias pueden llegar a producir hasta 67.000 perros en 5 años.
• Si finalmente logras que cada cachorro sea ubicado en un buen hogar, debes saber que se reduce la posibilidad de que estas familias adopten a otros perros ya ubicados en protectoras y perreras.
• El hecho de que los cachorros sean de una determinada raza no garantiza que acaben en buenas manos, ya que el 25 % de los perros que permanecen en albergues y protectoras son perros de raza.

No solo no es necesario cruzar a tu perro, sino que además no resulta una práctica recomendable ya que favorece el abandono animal.

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