Zuchón o shichón

El shichón recibe nombres muy variados, como zuchón, tzu frisé o incluso teddy bear. Sea cual sea la forma de denominarlo, el zuchón o shichón es un perro que surge del cruce de dos razas tan icónicas como el bichón frisé y el shih tzu. De esta forma, el shichón es un perro híbrido, que surgió de manera controlada en las últimas décadas del siglo XX, siendo una raza de aparición reciente.

Se desconocen el lugar y fecha concretos en los que nacieron los primeros cachorros de shichón, pero se cree que fueron fruto de cruces hechos con mucho cuidado por algún experto en la cría de ambas razas progenitoras y con asesoramiento veterinario. Como raza híbrida, no cuenta con el reconocimiento oficial de la mayor parte de las organizaciones cinológicas, pero sí con un estándar oficial por otras como el American Hybrid Club (AHC).

Un shichón es un perro de talla pequeña, estando comprendido su tamaño entre los 22 y los 30 centímetros de altura a la cruz. El peso medio de un shichón o zuchón es de entre 4 y 10 kilogramos, siendo habitualmente los machos ligeramente más corpulentos que las hembras. Su esperanza de vida media se encuentra en los 16 años aproximadamente.

El zuchón tiene un cuerpo proporcionado, de manera que no resalta especialmente ninguna de las partes que lo conforman. Su cola es de largo medio y está recubierta de un suave pelaje. Los ojos, bien redondos y de un color café o marrón oscuro, son increíblemente expresivos. Por otra parte, las orejas se encuentran situadas a media altura con respecto a su cara, que es relativamente ancha. Estas, tienen las puntas redondeadas y cuelgan ligeramente inclinadas hacia delante.

El pelaje de los zuchón es de largo medio, tirando a corto, con ligeras ondulaciones y presentando la particularidad de no perder apenas pelo, lo que lo convierte en un perro catalogado como hipoalaergénico.

Colores del zuchón o shichón

El manto del shichón es muy variado,de manera que presenta diferentes variedades de color. Los tonos más frecuentes de esta raza híbrida son: gris, negro, marrón, crema, blanco, tan y las posibles combinaciones de los anteriores.

El zuchón o shichón cachorro

Los cachorros de shichón suelen presentar un tamaño realmente reducido, aunque puede variar en función de la raza progenitora cuya genética predomine en cada uno de sus descendientes.

Sea cual sea su tamaño, se trata de cachorros muy activos y juguetones, que pasan horas y horas buscando cosas nuevas y fascinantes con las que divertirse sin parar. Eso sí, necesitan también un buen descanso para que su crecimiento se dé de forma correcta y puedan desarrollarse sin problemas.

Estos pequeños canes presentan una personalidad muy marcada, que incluso puede resultar contradictoria para su reducido tamaño. El gran carácter de un shichón puede llegar a sorprender, aunque la sorpresa no es tanta cuando se ha tenido trato con ejemplares de shih tzu o de bichón frise, pues estos también suelen presentar un carácter bastante marcado.

Son perros activos, que guardan unas cantidades ingentes de energía, por lo que son bastante inquietos y juguetones. Por ello, esimportante para ellos la realización de actividad física y poder jugar a diario. En general, se trata de perros inteligentes, atentos y obedientes, aunque esto último depende también de cómo hayan sido entrenados.

Además, son sumamente cariñosos, por lo que tienden a volcarse mucho con su familia. Se adaptan muy bien a la vida tanto en hogares con niños pequeños como de gente anciana, siendo siempre preferible la vida en interiores, ya que no están preparados para aguantar los rigores de la vida fuera de una casa.

El zuchón no es una de las razas más exigentes en cuanto a los cuidados que necesita. El que suele ser recomendable resaltar es su necesidad de recibir atención y afecto, pues no llevan bien la soledad y la falta de cariño y compañía los hace padecer grandes niveles de ansiedad.

En cuanto a la actividad física necesaria, resalta lo enérgicos que son, por lo que necesitan practicar ejercicio a diario para así poder canalizar toda esa energía de forma constructiva. Sin embargo, no necesitan que esta actividad sea vigorosa, pues, debido a su escaso tamaño, con paseos y juegos diarios será suficiente. Además, se aconseja jugar a juegos de inteligencia o lógica que los mantengan también activos y estimulados a nivel mental.

Por otro lado, dentro de los cuidados del zuchón encontramos, también, los referentes a su manto. Su pelaje requiere algunas atenciones, como son el cepillado frecuente, que debería realizarse como mínimo dos veces por semana, aunque lo ideal sería hacerlo todos los días. Solo así el zuchón puede mostrar su lustroso y suave pelaje en buenas condiciones, libre de suciedad y cualquier enredo.

La alimentación del shichón ha de ajustarse a su reducido tamaño, ya que una sobrealimentación hará que el animal aumente de peso, llegando a sufrir sobrepeso o incluso obesidad, con las consecuencias negativas que esto acarrea a nivel de salud, como problemas cardiovasculares o articulares.

Como ya hemos mencionado, el shichón presenta un carácter algo fuerte, por lo que es necesario realizar un adiestramiento adaptado a esta personalidad. Lo más aconsejable es comenzar a entrenar al shichón cuando es apenas un cachorro, pues de esta forma aprende bastante más rápido y el entrenamiento parece ser más efectivo si se continúa cuando es adulto.

Lo mejor es, como en cualquier otra raza o perro mestizo, realizar un entrenamiento respetuoso y adaptado a cada ejemplar concreto. A rasgos generales, se ha demostrado que las técnicas que más y mejor resultado tienen son aquellas basadas en el entrenamiento en positivo. Algunas recomendaciones específicas para el caso del shichón son:

• La duración mínima de las sesiones de entrenamiento es de unos 10-15 minutos, siendo lo aconsejable que cada sesión dure como mucho entre 30 y 45 minutos.
• Lo mejor es empezar enseñándoles órdenes básicas e ir aumentando la dificultad progresivamente.
• Dado su nivel de energía, los juegos también pueden resultar una buena forma de adiestrar al zuchón sin que pierda el interés.

Al ser una raza híbrida, el shichón presenta una salud bastante más robusta que la que puede darse en cualquiera de sus progenitores de raza pura debido a que las combinaciones genéticas resultantes del cruce generan una raza más resistente a la enfermedad. No obstante, algunas de las enfermedades más comunes en el perro zuchón son las referentes al aparato circulatorio y, en concreto, al corazón. Pueden padecer alta presión intracardíaca y también una alteración de la válvula mitral, llevando a una insuficiencia cardíaca.

También sus articulaciones pueden verse afectadas por diversos problemas, como es el caso de la luxación patelar o displasia de rótula. En este caso, la rótula se sale de su hueco habitual, generando mucho dolor e incomodidad en el animal. En casos graves se hace necesaria la cirugía traumatológica.

Otra de las enfermedades que pueden darse en los shichón es la atrofia progresiva de la retina, bastante frecuente especialmente a edades avanzadas del animal. La atrofia de la retina es un problema de salud ocular que puede acabar en ceguera cuando está muy evolucionada.

En cualquier caso, lo más recomendable es acudir al veterinario y llevar a cabo un adecuado plan de medicina preventiva, ya que así es posible detectar a tiempo cualquier síntoma o anomalía.

Adoptar a un shichón puede ser una tarea realmente compleja, especialmente si nos encontramos fuera de los Estados Unidos, donde su popularidad la ha convertido en una raza híbrida bastante frecuente y relativamente fácil de encontrar. Sin embargo, en Europa, y más específicamente en España, encontrar un shichón puede ser una tarea algo complicada. Pero esto no quiere decir que sea imposible, de hecho muchos ejemplares son adoptados en perreras, refugios y asociaciones. Por ello, esto es lo más aconsejable, acudir a lugares con animales que buscan un hogar, brindándoles así la posibilidad de disfrutar de una vida en familia, feliz y acogedora.

Antes de adoptar a un shichón hay que tener en cuenta sus necesidades específicas, como son la compañía y la dedicación, además de asegurar que se podrá sacar de paseo a diario y que se puede afrontar un gasto veterinario en caso de urgencia.