¿Por qué mi perro me muerde las manos cuando lo acaricio?
Ver fichas de Perros
El uso de la boca es una de las formas preferidas por los perros para comunicarse con el resto del mundo, entendido como otros perros y otros seres vivos. Así como nos dirigimos a personas y animales con actitudes propias de nuestra especie (tonos de voz, posturas corporales, etc.), para nuestros amigos de cuatro patas es exactamente lo mismo: arrugar la nariz, mostrar los dientes o no mientras gruñen, mantener la boca cerrada o abierta, son todas señales que utilizan para comunicarse (asociadas a diferentes posturas corporales).
Sin embargo, cuando un perro muerde es necesario analizar el contexto en el que se produce el gesto, preguntarse por qué y buscar soluciones a esta conducta, recordando que el perro puede morder a seres vivos u objetos. En el artículo de ExpertoAnimal sobre qué significa cuando el perro te da modisquitos ya nos habíamos centrado en el significado de "mordisquear" con referencias al juego, la exploración del entorno y la petición de atención y espacio, pero, ¿qué ocurre cuando el mordisco se produce por acariciarlo? En este artículo nos centraremos en esto y te explicamos por qué tu perro te muerde cuando lo acaricias, ya sea cachorro o adulto, y qué hacer en cada caso.
¿Por qué mi cachorro me muerde cuando lo acaricio?
El cachorro recién nacido, todavía sordo y con los ojos cerrados, se orienta de manera táctil en busca de su madre y hermanos y si lo separas de ellos reacciona quejándose y balanceando la cabeza hasta encontrarlos. El cachorro que tendrá un contacto físico intenso primero con su madre y hermanos y luego con el ser humano crecerá confiado.
Los problemas suelen comenzar a partir del llamado “período de socialización” (4ª-12ª semana de vida), en el que los cachorros toman conciencia de su entorno y aprenden a reaccionar ante los estímulos de forma adecuada. Si acariciarlos aumentará el vínculo que nos une, también es bueno no excederse en determinadas circunstancias. Veamos cuáles:
Durante el juego
Con el juego, los cachorros se entrenan en todo lo que les puede pasar en la vida, en situaciones agradables y desagradables, pero también para poner a prueba habilidades y límites, a menudo mediante peleas. Intentar sujetar y acariciar al perro en estos momentos podría tener como consecuencia que los cachorros muerdan porque están tan agitados que no pueden controlarse en esos momentos de excitación, con el riesgo de que nos hagan daño que ello supone (dado el grado de agudeza de sus dientes).
Es mucho mejor esperar a que acabe el juego para intentar interactuar con ellos, recordando que la caricia también puede considerarse un premio para nuestros perros: acariciar a un cachorro en un momento de calma le ayudará a comprender que ese es precisamente el comportamiento que debe tener. Así pues, premia situaciones que sí te interesan y no su exaltación.
Durante el sueño
Un cachorro puede dormir hasta 18 horas al día (según los diferentes tipos de razas), y durante la fase de sueño profundo, ser tocado incluso con una caricia podría hacer que se sobresalte, con el reflejo instintivo de morder tu mano. Siempre es mejor que la interacción ocurra cuando el perro está despierto para no generar resultados desagradables.
La situación es diferente cuando al acariciar a un cachorro se queda dormido, puesto que acariciar a un perro ayuda a disminuir los niveles de estrés y ansiedad presentes en el organismo. Además, el contacto físico transmite calma y tranquilidad. Por ello, es muy importante acariciar al cachorro en el momento adecuado, ya que con este gesto se pretende transmitir esa calma, no "premiar" la excitación ni mucho menos asustar al perro.
¿Por qué mi perro adulto me muerde las manos cuando lo acaricio?
Ya hemos comentado que la comunicación corporal en los perros es muy importante. Tanto entre ellos como hacia nosotros realizan gestos con distintos fines. Por ejemplo, en los gestos de dominación el sujeto puede apoyar una pata sobre el lomo de otro perro o acercar su hocico con una posición corporal que indica al otro que debe someterse. Esto puede deberse, entre otras causas, a una falta de socialización. En este punto es importante recordar que las relaciones jerárquicas se producen entre miembros de la misma especie (nunca seremos el "líder de la manada", sino un guía o persona de referencia).
A nosotros también nos emiten señales que indican que no están receptivos. Entonces, si en uno de estos momentos tratamos de tocar a nuestro perro, nuestra caricia puede ser malinterpretada y, por ende, puede mordernos. En estos casos es fundamental analizar todo el lenguaje corporal para ver qué intenta decirnos nuestro can o qué puede ocurrirle para mostrarse de esa forma con nosotros. Las causas pueden ser muy variadas, como un problema de salud, una mala socialización, que sufra estrés o ansiedad, que hayamos utilizado métodos de adiestramiento inadecuados (como castigos o gritos), etc.
Además, que tu perro te muerda las manos cuando lo acaricias puede deberse, también, a estos motivos:
Excitación
Del mismo modo que un cachorro puede llegar a morder si lo acariciamos cuando está muy excitado, un perro adulto también. El grado de exaltación que alcanza es tal, que no controla su reacción y tiende a morder, aunque realmente no quiera hacernos daño. Nuevamente, insistimos en que es muy importante saber cuándo acariciar y cuándo no.
Alteración del sueño
¿Tu perro te muerde las manos cuando lo acaricias mientras duermes? ¿Te has parado a pensar cómo reaccionarías tú si te despertaran de golpe? Como en los cachorros, se trata de una reacción instintiva en la que el can actúa sin saber ni quién ni por qué. Si está profundamente dormido, mejor no lo acaricies.
Miedo
Si en términos de juego y sueño encontramos similitudes entre cachorros y adultos, es necesario considerar de forma independiente las situaciones en las que los perros pueden tener miedo. La falta de socialización con humanos debido a una vida tras las rejas en una perrera, situaciones problemáticas relacionadas con la privación sensorial, eventos desagradables y traumáticos, son ejemplos de situaciones que pueden evolucionar hacia un perro con problemas de comportamiento.
Pensar en acariciar a un perro fóbico, aunque sea con la intención de traer alivio al animal, podría resultar contraproducente: ante situaciones de extrema dificultad es instintivo buscar escapar o agredir al sujeto que se presenta ante él, sin pensar en las consecuencias. Por lo tanto, acercarse a un perro asustado (especialmente de frente y sostener su mirada), con la intención de calmarlo acariciándolo, resultará casi seguro en que el perro muerda.
¿Qué hacer si mi perro me muerde cuando lo acaricio?
Aunque no nos demos cuenta, la forma en que tocamos a nuestros perros provoca diferentes sensaciones y efectos:
- Acariciarlos con la mano abierta a los lados provoca tranquilidad, baja la vigilia y reduce el estrés.
- Las palmaditas tienden a excitarlos.
- Los rasguños en la espalda y los hombros son una fuente de gratificación y una forma muy apreciada de felicitar su comportamiento.
En muchas ocasiones, nuestros perros se comunican con nosotros de la misma manera que lo hacen entre ellos: muy a menudo se tiran literalmente sobre nosotros o se apoyan con todo su peso en nuestras piernas cuando se sientan. Casi siempre prestamos atención a las señales que nos envían, pero no las observamos ni analizamos para entender qué quieren decirnos realmente.
Para evitar que el perro muerda cuando lo acaricias, no tomes la iniciativa directamente poniendo tu mano sobre su cuerpo, sino que debes asegurarte de que realmente quiere que lo acaricies. Para ello, ponte a su altura e invítalo a que te acompañe si no se encuentra a tu lado. Utiliza una voz persuasiva y muestra las palmas de las manos abiertas para permitir que las huela y puedas interactuar con él.
Evita poner las manos directamente sobre su cabeza, especialmente si no te mira y puede resultarle un gesto inesperado. ¿Cómo te comportarías si un amigo "gigante" acercara su mano extendida para colocarla sobre tu cabeza? Recordemos que somos dos especies que hemos evolucionado juntas a lo largo del tiempo y, como es justo, debemos respetarnos para una convivencia pacífica.
Si a pesar de poner en práctica estos consejos tu perro te muerde cuando lo acaricias y muestra otras señales, como estar siempre alerta, gruñir cada vez que intentas acercarte, esconderse de ti, etc., no lo dudes y acude a un etólogo para que evalúe el caso. Puede ser que sufra estrés por algún motivo o que seas tú quien se esté equivocado con los métodos empleados para su educación. En este sentido, te recomendamos consultar, también, estos artículos:
Si deseas leer más artículos parecidos a ¿Por qué mi perro me muerde las manos cuando lo acaricio?, te recomendamos que entres en nuestra sección de Problemas del comportamiento.
¿Tienes contratado el Seguro de Responsabilidad Civil obligatorio para perros? Consiguelo al mejor precio rellenando el formulario con tus datos y los de tu mascota haciendo clic en este botón: