¿Los insectos tienen sangre?

Los insectos tienen un sistema circulatorio, el cual se denomina de tipo abierto, ya que el líquido corporal se distribuye directamente hacia las cavidades del cuerpo. Como los insectos no tienen venas ni arterias, este líquido no circula por estructuras como estas, sino por un tubo dorsal por el cual pasa el fluido y se distribuye a todo el cuerpo del insecto.

En este sentido, los insectos, así como en general los invertebrados, tienen un sistema circulatorio menos complejo que en el caso de los animales vertebrados. Además de las diferencias anatómicas o estructurales, los insectos no tienen sangre como otros animales superiores, sino que poseen un fluido conocido como hemolinfa.

La hemolinfa es un fluido que forma parte del sistema circulatorio de los insectos y también de otros invertebrados. Podemos decir que es análoga a la sangre porque aunque no transporta exactamente los mismos elementos como en el caso de los vertebrados, sigue siendo importante para llevar ciertas sustancias indispensables hacia el cuerpo del insecto.

La hemolinfa funciona a través de un mecanismo de bombeo, el cual es efectuado por las estructuras que conforman el sistema circulatorio del insecto. Así, la hemolinfa es bombeada desde la parte posterior hacia la zona anterior y a los laterales del cuerpo a través del tubo o vaso dorsal. Dicho tubo o vaso dorsal consta de diversas válvulas que tienen a su vez aberturas por las cuales fluye la hemolinfa. Todo el cuerpo del insecto, incluyendo las antenas, alas y patas, son irrigadas con la hemolinfa. Luego, este fluido retorna hacia la zona del abdomen para ir hacia atrás y empezar de nuevo el recorrido.

La hemolinfa tiene una importante función de transporte en los insectos, ya que a través de ella circulan diversos nutrientes y hormonas. También, está constituida por unas células conocidas como hemocitos, los cuales intervienen en la respuesta inmune en el insecto, fagocitando microorganismo invasores; también participa en el proceso de coagulación y cicatrización cuando hay heridas y en el metabolismo de nutrientes.

Por otro lado, la hemolinfa, forma parte del proceso de transporte de los desechos metabólicos producidos en el insecto, los cuales son llevados hasta unas estructuras llamadas túbulos de Malpighi, por medio de los cuales ocurre la excreción en el animal.

Finalmente, seguro te estás preguntando ¿de qué color es la “sangre” de los insectos? O ¿hay insectos con “sangre” roja? Al respecto ya sabemos que los insectos no tienen sangre y el color de la hemolinfa puede variar principalmente por el tipo de alimentación que tenga el insecto. En este sentido, puede tener un color azulado, amarillento o incluso oscuro como marrón, lo cual se lo otorgan pigmentos que incluyan los insectos en su dieta.

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La hemolinfa y la sangre son análogas y guardan ciertas diferencias. En principio, la hemolinfa no tiene las células conocidas como eritrocitos, propia de la sangre de los vertebrados. Por otro lado, a diferencia de la sangre, posee una gran cantidad de aminoácidos libres. Aunque la hemolinfa tiene gran cantidad de agua, el porcentaje es mayor en la sangre, siendo en la primera hasta un 50% y en la segunda de un 80%.

La hemolinfa no transporta el oxígeno al cuerpo del insecto, mientras que la sangre sí lo hace, ya que el proceso de respiración en estos invertebrados funciona de manera diferente. El fluido corporal de los insectos también tiene función de solvente para diversas moléculas. Sirve como reserva de agua en los casos que el animal esté expuesto a la desecación, y tiene una participación especial como un fluido hidráulico, para la expansión del cuerpo cuando el insecto culmina el proceso de metamorfosis. Además, vale la pena mencionar que la hemolinfa lleva a todo el cuerpo las sustancias que el insecto necesita para poder metamorfosearse. Te hablamos de los "Animales que sufren la metamorfosis en su desarrollo" a continuación.

Como hemos visto, la hemolinfa es un fluido diferente a la sangre, no obstante, cumple también como este líquido rojo, funciones indispensables para los insectos, por lo cual, se le considera entonces análoga a la sangre, tal como te hemos mencionado anteriormente.

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