Consejos para el mal olor del hurón

Los hurones disponen glándulas perianales, son dos y están situadas dentro del ano comunicándose hasta él mediante dos pequeños canales.

Debemos saber que un hurón esterilizado al no padecer celo ni excitación sexual ya no produce el mal olor regularmente pero sí puede sufrirlo al tener un susto, una gran excitación o una alteración.

La extirpación de las glándulas perianales siempre debe ser llevada a cabo por un profesional ya experimentado en este procedimiento, sino nuestra pequeña mascota puede sufrir incontinencia, prolapsos y otras enfermedades derivadas de la operación. Es opcional y debe ser el propietario quien lo decida.

Como propietario del hurón debes plantearte si deseas llevar a cabo esta operación o no y sopesar si los problemas que puede conllevar la cirurgía tienen más peso que el mal olor que pueda producir en un momento espontáneo, aunque debes saber que nunca eliminarás al 100% el mal olor. Desde ExpertoAnimal no recomendamos la extirpación de estas glándulas.

Las glándulas perianales no son las únicas que tiene tu mascota, tiene otras repartidas por el cuerpo que también pueden producir mal olor. Los usos de estas son diversos, entre ellos proporcionarles facilidad para defecar, protección ante un depredador etc.

La opción más acertada sin duda es no extirpar las glándulas perinales, por ello, en ExpertoAnimal te ofrecemos algunos consejos útiles para prevenir e intentar evitar el mal olor que puede desprender un hurón:

• Limpiaremos su jaula prácticamente a diario o cada dos días, incluyendo los barrotes que podemos limpiar con toallitas húmedas, por ejemplo. Cuando limpies utiliza un producto desinfectante y neutro que no perjudique la piel o pueda contaminar el alimento.

• Diariamente prestarás atención y limpiarás la zona de la jaula o espacio habilitado donde suela hacer sus necesidades. Al hacerlo evitas la aparición de enfermedades, infecciones etc.

• Al igual que hacemos con otras mascotas, deberemos limpiar las orejas del hurón, retirándole la cera de forma semanal o quincenal. Realizar este proceso reduce el riesgo de una infección y también reduce el mal olor.

• Baña a tu hurón una vez al mes como máximo y es que en su piel encontramos una grasa que le protege del exterior. Además y al igual que sucede con los perros bañarlo en exceso produce mal olor.

• Finalmente es importante que dejes a tu hurón tranquilo durante el día intentando no excitarle, asustarle o sobresaltarle. De esta forma reduces las probabilidades de que emita el fuerte olor del que estamos intentando prevenirnos.

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