¿Cómo respiran las estrellas de mar?

Para comprender cómo respiran las estrellas de mar debemos preguntarnos antes qué son. Estos curiosos animales forman parte del filo de los equinodermos (Equinodermata). Están estrechamente relacionados con otros animales muy enigmáticos: ofiuras, lirios, margaritas, pepinos y erizos de mar. Todos ellos poseen simetría radial y tienen su cuerpo dividido en cinco partes iguales. También cuentan con un esqueleto calcáreo muy característico.

Dentro de los equinodermos, las estrellas de mar forman la clase de los asteroideos (Asteroidea). Son unas 2 000 especies que tienen muchas cosas en común, como su peculiar forma de estrella, su lento movimiento y su anatomía. Sin embargo, es un grupo muy amplio y diverso. Algunas especies miden tan solo unos milímetros, pero otras pueden alcanzar un metro de diámetro. La mayoría son voraces depredadoras, aunque otras son omnívoras, herbívoras o, incluso, filtradoras.

Si quieres saber más sobre la alimentación de estos curiosos animales, no te pierdas este otro artículo sobre "Qué comen las estrellas de mar".

Las estrellas de mar están formadas por un disco central dividido en cinco partes iguales. De cada una de ellas, sale un brazo o radio terminado en punta, aportándole su característica forma de estrella. Sin embargo, algunas especies tienen más de cinco brazos, como la impresionante estrella de sol (Heliaster helianthus). Normalmente, están cubiertas por un esqueleto óseo, formado por pequeñas piezas u osículos que se sitúan justo por debajo de la piel.

De esta manera, su cuerpo es aplanado y tiene simetría radial. En su parte inferior u oral se encuentra la boca, justo en el centro. Por ello, para comer se sitúan encima de sus presas o alimento. De su boca parten las áreas ambulacrales que se dirigen hacia la punta de cada brazo. Cada una de ellas está recorrida por filas de pies ambulacrales. Estos forman parte del aparato ambulacral interno, una estructura hidráulica que les sirve para moverse.

En la parte superior o aboral de las estrellas de mar encontramos el ano, también en el centro. Junto a él destaca el madreporito, una serie de poros que comunican con el aparato ambulacral. Normalmente, la cara aboral está cubierta de espinas óseas, que pueden estar aplastadas o no. En su base, aparecen unos pedicelarios o valvas que ayudan a limpiar la superficie del cuerpo y protegen a unas estructuras blandas que sobresalen entre los osículos: las pápulas o branquias dérmicas. Estas son la clave para entender cómo respiran las estrellas de mar.

Finalmente, en la zona que rodea al ano también se encuentran los gonoporos, unos agujeritos que les sirven para liberar sus gametos durante su reproducción sexual. ¿Quieres saber más? Entonces, no te pierdas este otro artículo sobre "Cómo se reproducen las estrellas de mar".

Ya conocemos a fondo a estos integrantes del reino animal, así que estamos listos para saber cómo respiran las estrellas de mar. En su interior, los equinodermos albergan un espacio lleno de líquido que conocemos como celoma. Sus paredes están revestidas por cilios o pelitos que mueven el líquido a lo largo de todo el cuerpo, bañando los órganos internos. Se comunica con el exterior gracias a unos bultitos blandos que aparecen en la superficie del cuerpo: las pápulas.

La pared de las pápulas es muy fina y, en ella, tiene lugar el intercambio gaseoso. El oxígeno (O2), más abundante en el agua marina, entra en el interior del cuerpo del animal por difusión. El dióxido de carbono (CO2), más abundante en el interior de la estrella, fluye por difusión hacia el agua de mar junto a otros desechos, como el amoniaco (NH3). Así, los gases y sustancias pequeños se mueven desde donde son más abundantes hacia donde se encuentran en menor cantidad.

Por tanto, el celoma no solo funciona como su aparato respiratorio, sino también como su sistema excretor. El líquido del celoma recoge los desechos producidos por los órganos internos, como el CO2. A su vez, les aporta oxígeno y pequeños nutrientes que entran por difusión en las pápulas. Así es como respiran las estrellas de mar y también como se limpian.

Además, estos animales invertebrados pueden respirar por su aparato acuífero o ambulacral, una cavidad interna que solo aparece en los equinodermos. Se trata de un sistema de canales o aparato hidráulico que finaliza en los pies ambulacrales, unos salientes que se llenan y vacían de agua. Funcionan como una especie de ventosas, permitiendo el movimiento del animal. En muy poca cantidad, puede entrar O2 y salir CO2 a través de ellos.

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