Enseñar al perro a reconocer su nombre
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Enseñar a un perro a reconocer su nombre es básico para que pueda responder correctamente a nuestras señales. Es un ejercicio de base para poder entrenar los demás ejercicios de obediencia canina, y para captar su atención en diferentes circunstancias. Si no puedes captar la atención de tu perro no podrás enseñarle ningún ejercicio, y por eso es útil que éste sea el primer ejercicio del adiestramiento en obediencia canina.
En este artículo de ExpertoAnimal te enseñaremos a elegir un buen nombre, a captar la atención del perro, a prolongar su atención y te daremos consejos útiles para que responda positivamente en las diferentes circunstancias en las que os podáis encontrar.
Recuerda que enseñar al perro a reconocer su propio nombre es una tarea muy importante que cualquier propietario debería tener en cuenta. Todo ello te ayudará a fortalecer vuestro vínculo, evitará fugas en el parque y creará una base en su nivel de obediencia.
Elegir un nombre adecuado
Elegir un nombre apropiado para tu perro es fundamental. Debes saber que los nombres excesivamente largos, con pronunciación dificultosa o aquellos que puedan confundirse con otras órdenes deben descartarse de inmediato.
Tu perro debe tener un nombre especial y bonito, pero a la vez fácil de relacionar. En ExpertoAnimal te ofrecemos una completa lista de nombres para perros originales o bien una lista de nombres cortos para perros. Este detalle es muy importante a tener en cuenta.
Captar la atención del perro
Nuestro primer objetivo será captar la atención del perro. Con este criterio buscas conseguir una conducta básica, que consiste en que tu perro te mire por un instante. En realidad no es necesario que te mire a los ojos, pero sí que te preste atención para que te resulte más fácil comunicarte con él después de decir su nombre. Sin embargo, la mayoría de los perros terminan mirando a los ojos.
Si tu perro es de raza peluda y su pelaje le cubre los ojos, no sabrás hacia dónde está mirando realmente. En este caso, el criterio será que tu perro oriente su cara hacia la tuya, como si estuviese mirándote a los ojos, aunque no sepas si en realidad lo está haciendo.
Para conseguir que tu perro te preste atención utilizaremos comida apetitosa ya sean golosinas, skacks o trocitos de frankfurt. Muéstrale un pedacito de comida y luego cierra tu mano, protegiendo la comida. Mantén tu puño cerrado, y espera. Tu perro intentará tomar la comida de diferentes maneras. Te golpeará la mano con su pata, lamerá tu mano, te mordisqueará o hará cualquier otra cosa. Ignora todas esas conductas y sólo mantén tu mano cerrada. Si tu perro te golpea o empuja la mano con fuerza, mantenla pegada contra tu muslo. De esta forma evitarás que tu mano se mueva.
En algún momento tu perro se cansará de intentar llevar a cabo conductas que no dan resultado. Pronuncia su nombre y cuando te mire felicítalo con un "muy bien" o haz click (haz sonar el clicker) y dale la comida.
Durante las primeras repeticiones no te preocupes si tu perro parece no relacionar adecuadamente el proceso. Es normal. Repite este ejercicio y haz click o alábale cuando te preste atención y responda a su nombre mirándote. Es importante no premiarle si no lo hace adecuadamente.
Repeticiones necesarias
Dependerá de la capacidad mental del perro que aprenda antes o después a relacionar correctamente su nombre y el premio que recibe posteriormente. No te preocupes si parece no entenderlo, algunos perros necesitarán hasta 40 repeticiones y otros sin embargo, tendrán suficiente con 10.
Lo ideal es que repitas este ejercicio de forma diaria dedicándole unos 5 o 10 minutos. Prolongar una sesión de entrenamiento puede abrumar a tu perro desconcentrándolo de su adiestramiento.
Por otro lado resaltar la importancia de llevar a cabo el adiestramiento en un lugar tranquilo, libre de distracciones, para que nuestro perro pueda concentrarse plenamente en nosotros.
Prolongar la atención del perro
Este procedimiento es muy similar al detallado en el punto anterior, con la intención de aumentar la duración de la conducta hasta tres segundos. Empieza la primera sesión de este criterio haciendo dos o tres repeticiones del ejercicio anterior, para que tu perro entre en el juego.
El siguiente paso consistirá (como en el proceso anterior) en hacerte con una golosina, cerrarla en el puño, pronunciar su nombre y esperar. Cuenta tres segundos y haz click o felicítalo y dale la comida. Si tu perro no mantuvo la mirada puedes volver a intentarlo moviéndote para que el perro mantenga fija su atención en ti. Probablemente te seguirá. Vuelve a hacer el mismo procedimiento pero esperando un tiempo más corto antes de premiarle. Aumenta gradualmente el tiempo que tu perro te mira a los ojos, hasta conseguir por lo menos tres segundos en cinco repeticiones sucesivas.
Haz el número necesario de sesiones hasta que consigas que tu perro te mire a los ojos por tres segundos en cinco repeticiones seguidas. Sigue aumentando la duración durante esas repeticiones, aunque ésta supere los tres segundos. La intención es que el perro esté atento por un tiempo mínimamente prologando a tus indicaciones.
Como hemos comentado antes, lo ideal es no abrumar al perro por lo que dedica poco tiempo de adiestramiento pero con un nivel intenso.
La atención del perro en movimiento
Por lo general los perros suelen prestarnos más atención cuando estamos en movimiento, no obstante no todos responden de la misma forma. Una vez nuestro perro esté relacionando las golosinas, el nombre y el posterior premio al fijarse en nosotros, debemos ir un paso más allá ejercitándole para que nos preste atención cuando estamos en movimiento.
Para que el ejercicio pueda ser relacionado fácilmente debes empezar con movimientos leves que aumentarás de forma gradual. Puedes empezar moviendo el brazo en el que retienes las golosinas y después alejándote un paso o dos.
Aumenta la dificultad
Después de dedicar entre 3 y 10 días a la repetición de este ejercicio tu perro debería poder relacionar de sobras su nombre como una llamada a su atención. No obstante, puede que no funcione igual de bien dentro de casa que en el exterior.
Eso es debido a que el perro, delante de diferentes estímulos, no puede evitar desconcentrarse. No obstante esta misma situación es la que debemos trabajar activamente para que el perro responda igual de bien allí donde se encuentre. Recuerda que enseñar obediencia básica a un perro es una gran ayuda para su seguridad.
Como en todos los proceso de aprendizaje, debemos practicar con nuestro perro en diferentes situaciones que aumenten la dificultad de forma gradual. Puedes empezar practicando la respuesta a la llamada en tu jardín o en un pipi-can vacío pero progresivamente debes instruirle en lugares transitados o lugares con elementos que puedan distraerle.
Posibles problemas al enseñarle a tu perro a reconocer su nombre
Algunos problemas que pueden ocurrir al enseñarle a tu perro a reconocer su nombre son:
- Tu perro te lastima la mano al intentar tomar la comida: Algunos perros muerden o golpean con fuerza la mano con que se sujeta la comida, pudiendo lastimar al entrenador. Si tu perro te lastima al intentar tomar la comida, sujeta el snack a la altura de tu hombro y lejos de tu perro. Al no poder alcanzar la comida, tu perro te mirará y podrás empezar a reforzar esa conducta. En cada repetición baja tu mano un poquito más hasta que la puedas tener el brazo extendido hacia abajo sin que tu perro intente tomar la comida de tu mano. Otra opción que utilizan algunos adiestradores, pero que a mi no me gusta mucho, consiste en usar guantes gruesos que te protejan la mano de los rasguños y mordiscos del perro. Si este problema te afecta sería ideal que revisaras nuestro artículo acerca de la inhibición de la mordida.
- Tu perro está muy distraído: Si tu perro está distraído puede deberse a que haya comido recientemente o que el lugar de adiestramiento no sea suficientemente tranquilo. Busca un lugar diferente para entrenar y lleva a cabo las sesiones en un horario diferente. También puede ocurrir que el premio que le ofreces no sea suficientemente apetitoso, mejor hazte con pedacitos de frankfurt. Si crees que el lugar y el horario son adecuados, haz una secuencia rápida de entregarle pedacitos de comida a tu perro antes de empezar la sesión. Simplemente dale cinco pedacitos de comida rápidamente (como si estuvieras cargando el clicker, pero a la mayor velocidad posible) y empieza la sesión de adiestramiento.
- Tu perro no deja de mirarte ni un segundo: Si tu perro no deja de mirarte ni un instante, te resultará difícil introducir la orden. Para distraer a tu perro y poder usar su nombre, puedes lanzar la comida al suelo después de cada click. De esta forma, tendrás ocasión de decir su nombre justo después que tu perro tomó la comida, pero antes que te mire espontáneamente. Como si se tratara de un sembrado.
Precauciones al usar el nombre de tu perro
No uses el nombre de tu perro en vano. Si dices el nombre de tu perro en cualquier circunstancia y por cualquier razón, sin reforzar su conducta cuando te mira, estarás extinguiendo la respuesta adecuada y tu perro dejará de prestar atención cuando dices su nombre. Premiarle y felicitarlo siempre que responda positivamente a la llamada será básico.
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