Mi gato tiene el pelo áspero: causas y soluciones
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Un pelaje sano, brillante, suave y sedoso es sinónimo de buena salud, es por esto que los cuidadores de gatos podemos preocuparnos cuando nuestro compañero nos presenta un pelo áspero, descuidado o con un aspecto sucio. En este artículo de ExpertoAnimal vamos a explicar por qué un gato tiene el pelo feo o áspero, cuáles son las posibles causas que lo han provocado y cómo podemos actuar para conseguir que nuestro gato mantenga siempre un pelaje perfecto, sano y bien cuidado.
¿Te preguntas por qué mi gato tiene el pelo áspero? ¿Quieres que su pelaje luzca suave y limpio? Toma nota de las causas y soluciones para devolverle a su manto el brillo natural que debería tener y empieza a solucionar este problema hoy mismo. ¡Sigue leyendo!
El pelo del gato
Cuando hablamos de pelaje no solo nos estamos refiriendo a una "simple" cuestión de belleza, ya que el pelo de nuestro gato nos va a hablar, también, de su estado de salud y por un doble motivo ya que, por una parte, el pelo sano es el reflejo de una buena salud pero, a la vez, cuidar el manto ayuda a mantener el perfecto estado de nuestro gato, pues el pelo cumple varias e importantes funciones, como son las siguientes:
- Protección térmica: el pelo va a proteger a nuestro gato tanto del frío como de la excesiva exposición a los rayos del sol y al calor.
- Aislante físico: el pelo también va a servir de protección para la piel de nuestro gato, defendiéndola de lesiones como pueden ser heridas, arañazos, abrasiones, quemaduras, etc., pero, también, de picaduras o mordeduras de insectos e incluso de otros animales.
- Función comunicativa: los gatos, al igual que otros animales, utilizan su pelo también como una forma de comunicación. Por ejemplo, la capacidad de erizar el pelo hace que entendamos que nuestro gato está muy enfadado y va a hacerle parecer más grande delante de otro gato al que quiere impresionar y poner en fuga. Además, el pelo está implicado en el sentido del tacto.
Si un gato tiene el pelo áspero puede indicarnos un problema de salud y, a la vez, las deficiencias en el manto pueden acarrearle problemas al gato. Para prevenir, vamos a explicar en los siguientes apartados cuáles son las causas más comunes que pueden dar como resultado un pelo áspero y qué medidas podemos adoptar para evitarlo.
Las causas de un pelo áspero
Cuando un gato tiene el pelo áspero, podemos pensar, principalmente, en los siguientes aspectos:
- Alimentación: es quizás la causa más habitual de los trastornos del pelaje. Una alimentación inadecuada, en el sentido de que no aporte la cantidad ni la calidad de los nutrientes necesarios para nuestro gato, va a manifestarse en un pelo feo, áspero y sin brillo. En ocasiones, los nutrientes que le aportamos a nuestro gato son los adecuados pero existe un problema de mala absorción. Este aspecto, por supuesto, debe ser explorado por nuestro veterinario.
- Patologías: los problemas dermatológicos también pueden afectar al aspecto del pelo de nuestro gato, por eso cualquier modificación que notemos en el manto, no solo aspereza, también caspa, alopecias (ausencia de pelo), exceso de grasa, heridas, etc., tiene que ser motivo de consulta veterinaria. Además, algunas enfermedades sistémicas también pueden hacer que el pelo de nuestro gato se presente áspero o feo, como pueden ser trastornos intestinales o enfermedades crónicas como la insuficiencia renal o la inmunodeficiencia.
- Estrés: aunque siempre tenemos que descartar primero una causa física acudiendo al veterinario, como hemos dicho, en ocasiones el problema en el manto puede estar causado por una situación de estrés como la que puede originar una mudanza, un cambio en casa, la introducción de otros animales, la llegada de un niño, etc. El estrés afecta al sistema inmunológico del gato, con la consiguiente bajada de defensas que puede comenzar a manifestarse en el pelaje.
- Falta de cuidados y/o higiene: es cierto que los gatos se acicalan solos pero, por lo menos los de pelo más largo, van a necesitar cepillados frecuentes, sobre todo en las zonas con más riesgo de nudos y enredos, como pueden ser bajo la cola y el cuello, en las patas o en el vientre. Los gatos de pelo corto también necesitarán nuestra ayuda, por ejemplo, con la edad, pues pueden presentar problemas para acicalarse, ya que no llegarán a todas las zonas con la misma facilidad. Esto puede hacer que presenten áreas de pelaje con mal aspecto.
Vistos los factores que pueden intervenir en un gato con el pelo áspero, vamos a atender, a continuación, las posibles soluciones.
Los cuidados del pelo
Para evitar que nuestro gato tenga el pelo feo o áspero debemos prestar atención a las siguientes recomendaciones:
- Alimentación: la comida que le suministremos a nuestro gato debe ser de la mayor calidad posible. Se recomienda ofrecerle pienso, ya que hoy en día la amplia variedad de este producto existente en el mercado nos garantiza que se cubran las necesidades de nuestro gato en cualquier momento de su vida. Y este es un aspecto importante, ya que el pienso que adquiramos debe adaptarse a la fase en la que se encuentre nuestro gato. Por ejemplo, un gatito menor de un año debe comer un pienso específico, al igual que una hembra gestante o un gato que se encuentre enfermo. Las proteínas, los ácidos grasos y los minerales van a ser muy importantes en el aspecto del pelo.
- Desparasitación: la presencia de algunos parásitos, como las pulgas, también puede tener efectos sobre el pelaje, restándole lustro. Es por ello importante mantener desparasitado a nuestro gato, con el producto más adecuado para sus circunstancias, según nos recomiende nuestro veterinario, de entre la amplia gama que se encuentra en el mercado. En este punto hay que señalar que algunos gatos presentan una dermatitis por alergia a la picadura de pulga, que veremos manifestarse con alopecias, pelo ralo, escamas o lesiones. Para ellos es básico mantener el protocolo de desparasitaciones, pues solo con una picadura puede desencadenarse la dermatitis.
- Higiene: los gatos de pelo largo deben ser cepillados con frecuencia. A los de pelo corto también les conviene este cuidado del manto, pues ayuda a eliminar el pelo muerto y, además, este hábito permite detectar enseguida cualquier daño en el pelaje o la piel. A medida que nuestro gato cumple años o si presenta alguna enfermedad debemos ser más escrupulosos con estos cuidados.
- Estrés: para evitar el estrés de nuestro gato debemos introducir cualquier modificación o cambio en su rutina con especial cuidado, contactando incluso con un etólogo (especialista en comportamiento animal) o veterinario con conocimientos en psicología felina. Además, debemos mantenerlo en lo que se conoce como "ambiente enriquecido", esto es, aquel con todas las distracciones que van a evitar que se aburra o frustre, ya que esto supone otra causa de estrés.
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