¿Los osos hibernan?

Los osos son mamíferos que alcanzan ente 1,3 y 2,8 metros de altura, además, algunas especies pueden llegar a pesar 500 kg. Estas características físicas les convierten uno de los animales terrestres más grandes del planeta. Su apariencia varía de acuerdo con la especie, pero todos poseen orejas y cola cortas, hocico alargado, ojos pequeños y cabeza grande. Las patas también son cortas, pero extremadamente fuertes, con cinco dedos armados de garras curvas y largas.

En general, el sentido de la vista y la audición de los osos es muy deficiente, sin embargo, compensan esta carencia con un fino sentido del olfato, el cual les permite localizar comida.

El pelaje del oso es largo y abundante. Los colores varían entre el castaño, negro y blanco. Además, existen ejemplares curiosos, como el oso panda (Ailuropoda melanoleuca), el cual posee un pelaje con patrón de coloración blanco y negro, y el oso de anteojos (Tremarctos ornatus), que presenta círculos blancos bordeando sus ojos.

En cuanto a su distribución, los osos pueden encontrarse en todo el mundo, desde Europa y Asia hasta África, Norteamérica y Sudamérica. Son animales omnívoros, pues se nutren tanto de plantas como de animales. Algunos de ellos son solo herbívoros, como el panda, y otros llevan una dieta completamente carnívora, como los osos polares.

La fase de reproducción de los osos abarca entre los 5 y 9 años, momento en que alcanzan la madurez sexual. Una vez han nacido las crías, se alimentan de leche materna.

Los osos se encuentran incluidos en el listado de los animales que hibernan. Este proceso, no obstante, es distinto a como se da en otras especies que también toman este tiempo de reposo durante las épocas frías, que es la razón del por qué hibernan los osos. A diferencia de otras especies, los osos no pierden la capacidad de percibir su entorno durante este proceso, pues reaccionan con sonidos bruscos o si se les molesta de alguna manera.

Ahora bien, ¿qué osos hibernan? La verdad es que no todas las especies lo necesitan. El oso panda, por ejemplo, no tiene esta necesidad, pues su dieta a base de bambú le impide contar con la fuerza necesaria para entrar en este estado de inactividad. El oso de anteojos tampoco lo hace, ya que su alimento se encuentra disponible en su hábitat durante todo el año, igual que el oso labiado (Melursus ursinus).

Por su parte, el oso negro asiático (Ursus thibetanus) puede hibernar o permanecer despierto todo el año, dependiendo de la cantidad de alimento que encuentre a su disposición. El oso negro americano (Ursus americanus) entra en estado de letargo, pero se despierta fácilmente, similar a lo que ocurre con el oso pardo. Los osos polares, por otro lado, sí hibernan.

La hibernación del oso es distinta a la de otras especies, pues si encuentran alimento suficiente durante todo el año y las condiciones climáticas son favorables para su cuerpo, pueden decidir no entrar en este estado.

Ahora bien, ¿por qué hibernan los osos? Durante el invierno, la mayoría de sus presas hibernan o son escasas, además, los árboles pierden sus hojas y frutos, por lo que el alimento escasea. Adoptar esa práctica es una forma de sobrevivir a esa dura temporada, ya que hibernar le permite a los osos sobrevivir sin la necesidad de ingerir comida.

Deben cumplirse algunas condiciones antes de iniciar este proceso de inactividad, como presentar grasa acumulada durante todo el año. Al hibernar, disminuyen su temperatura corporal y sus palpitaciones, lo que hace que pierdan aproximadamente el 40% de su peso total.

Una vez que han adoptado el estado de inactividad, ¿es posible despertar a un oso hibernando? ¡La respuesta es sí! Estos animales suelen ser sensibles a cualquier estímulo exterior que reciben, por lo que un sonido brusco o el contacto con otro animal lo despertarán.

Es importante señalar que los osos no despiertan de este largo período para satisfacer sus necesidades fisiológicas. El cuerpo posee diversos microorganismos que aprovechan los nutrientes que se encuentran de la orina y las heces, convirtiéndolos en aminoácidos necesarios para el cuerpo del oso.

Los osos polares (Ursus maritinus) viven en las zonas más heladas, donde la temperatura rara vez aumenta hasta superar el punto de congelación. Poseen un pelaje que los protege del frío extremo, bajo el cual se encuentra una piel negra. Se encuentran entre las especies de osos más amenazas, pues son clasificados en el rango de "Vulnerable" por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Tienen una esperanza de vida de 30 años, sin embargo, debido a la destrucción de su hábitat, son pocos los que llegan a los 18.

La hibernación de los osos polares se da durante los meses más fríos, momento en que buscan refugios naturales, como cuevas o cavernas, para conservar el calor y estar seguros. Las crías de los osos polares pueden nacer durante la hibernación y, gracias a su instinto, acceden a la leche de su madre para sobrevivir.

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