Mi cobaya huele muy mal, ¿cómo evitarlo?

Existen distintas causas que pueden provocar que la cobaya huela muy mal, para evitarlo, es fundamental encontrar el origen del mal olor para poder tratarlo, a continuación te mostramos los más comunes:

1. Las cobayas orinan mucho: Es muy importante destacar que, por naturaleza, las cobayas orinan de forma abundante. Generalmente las cobayas hembras orinan en un lugar concreto de la jaula, lo que facilita la limpieza del cubículo, sin embargo, los machos se orinan por toda la extensión de la jaula, de forma territorial.
2. Limpieza regular de la jaula: Teniendo en cuenta que las cobayas orinan de forma abundante, será fundamental limpiar su jaula y utensilios de forma muy regular para evitar los malos olores. Así mismo, si nuestra cobaya huele excesivamente mal, será apropiado ofrecerle un baño, para eliminar el mal olor corporal.
3. Enfermedades de la piel: Las enfermedades de la piel como pueden ser la sarna o la tiña pueden generar un olor muy desagradable. Si observas pérdida de pelo y enrojecimiento de la dermis, puedes estar frente a alguna enfermedad, por lo que deberás acudir al veterinario de forma pronta.
4. Otros factores: Al margen de los orines, las enfermedades y la limpieza, existen otras causas que pueden provocar mal olor en nuestra cobaya, identificar el problema de raíz será fundamental para poder tratarlo, por esa razón, no olvides consultar con el especialista siempre que lo creas necesario.

En las tiendas de productos para mascotas encontraremos diversos tipos de sustratos. Si tu cobaya huele muy mal, no es mala idea ir probando distintos tipos hasta hallar el más efectivo para la cobaya. Los sustratos más habituales son los siguientes:

• Pellets de papel: Es económico, absorbente y biodegradable, no obstante, si lo dejamos demasiado tiempo sin renovar puede oler mal. Debe cambiarse con frecuencia.
• Pellets de cáñamo natural: Es uno de los más absorbentes y neutraliza correctamente el mal olor. No obstante es algo complicado de encontrar en el mercado.
• Maíz granulado: Es ecológico y puede comerse, además absorbe los orines y neutraliza el olor. Eso sí, debe renovarse de forma regular.
• Pellets de madera y virutas de madera: Es un tipo de sustrato económico, no obstante, algunos pueden ser tóxicos. Esta consideración es muy importante a tener en cuenta, especialmente para su salud, debes buscar aquellos que sean ecológicos y específicos para cobayas.

Elegir un sustrato de calidad es esencial para evitar el mal olor de la cobaya así como el mal olor de la jaula en general. No existe un sustrato "mejor", ya que dependerá de la alimentación, de si es macho o hembra, del organismo de la cobaya, y de la temperatura ambiente para que en ocasiones funcione un sustrato mejor que otro.

Como mínimo una vez a la semana debe limpiarse a fondo la jaula de la cobaya. Yo soy partidario de meterla en el lavavajillas si cabe. Un vaporizador eléctrico pequeño también es útil, y no es excesivamente costoso. Sobre la frecuencia con la que debéis cambiar los sustratos no existen reglas matemáticas, cada cobaya es un mundo.

Yo prefiero el usar y tirar que la limpieza. Por lo tanto, prefiero materiales económicos y si es pertinente tirarlos a los dos días, que sustratos muy caros que aguanten más, pero que debas sustraerles las heces varias veces a la semana.

Las cobayas son animales muy limpios, por lo que no es recomendable bañarlas si no es que están excesivamente sucias o deben seguir un tratamiento indicado por el veterinario. Si tu cobaya huele muy mal y deseas bañarla igualmente, no olvides utilizar un champú específico para cobayas.

Generalmente se recomienda el uso de champús de lavado en seco, para evitar la incomodidad que le supone a este pequeño roedor el baño. Si no te es posible, puedes bañar a tu cobaya en un pequeño recipiente con agua tibia, eso sí, secándola por completo con el uso de toallas al finalizar.

¿Cada cuánto tiempo debo lavar a mi cobaya?

Como hemos comentado, no es conveniente abusar del baño. Si tu cobaya se ensucia con mucha regularidad puedes plantearte bañarla cada dos o cuatro semanas. Eso dependerá del nivel de suciedad y del mal olor que desprenda.

No olvides que el baño suele ser un momento estresante para ellas, por lo que será fundamental intentar hacer que esta experiencia sea positiva mediante caricias, palabras amables y con un trato dulce y cuidadoso.

1. La arena y el carbón activo

La arena fina de playa es un excelente sustrato gratuito. Filtra muy bien, puesto que no se empapa en exceso y la orina desciende. Debajo de ella pondréis una cama de gránulos de carbón activo, que es un material no excesivamente caro y muy purificador y bactericida. Este material es el que se emplea para los filtros de agua, ya que la purifica y libra de residuos y contaminantes. Se vende en droguerías.

La arena de playa la podéis recoger en la playa, teniendo en cuenta que pesa mucho y que deberéis coger arena limpia, sin colillas, chapas o excrecencias anómalas. Los infortunados que residan lejos del litoral pueden comprarla en las tiendas de acuarios, o en las de materiales para la construcción.

2. El truco del colador y el corcho

Un enemigo de las cobayas es el polvo. Yo os recomiendo que antes de colocar cualquier tipo de material en la jaula, lo pongáis en un colador grande de malla fina y procedáis a sacudirlo un poco. De este modo el polvo caerá y el sustrato será más saludable.

Otro material excelente es el corcho en gránulos. Filtra, es económico, es muy suave, y no absorbe el orín. Al contrario que la arena, apenas pesa nada. Podéis adquirir un saco enorme que será fácil de llevar. Debajo debéis poner el carbón activo. Existen diversas medidas de grano, pero el muy fino (tipo arena) es polvoriento. Yo recomiendo el que mide como una lenteja. Se vende en tiendas especializadas en formato saco.

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