¿Por qué los flamencos se paran en una pata?

Una de las explicaciones que los expertos han dado sobre las razones por las cuales los flamencos se paran en una pata es que lo hacen con el fin de conservar su calor corporal. Esto se debe, por un lado, a que son aves que pasan gran parte del tiempo en el agua, lo que los expone a un enfriamiento rápido. Por otro lado, se suma la disminución de las temperaturas ambientales. De este modo, al estar sobre una sola pata, se reduciría la pérdida de calor al tener menos parte del cuerpo expuesta.

No obstante, las observaciones no han permitido establecer de manera absoluta la razón mencionada. Se ha observado que algunos flamencos se paran más sobre una pata cuando están dentro del agua que fuera de ella, mientras que en otros casos se ha identificado que realizan esta acción cuando el clima es más frío. En este sentido, aunque la razón de sostenerse sobre una pata está relacionada, ya sea dentro o fuera del agua, con la conservación de la temperatura corporal, otros informes indican que esta idea no tiene mucho fundamento. Los flamencos, al igual que otras aves de hábitos acuáticos, poseen vasos sanguíneos reducidos en las extremidades inferiores y un sistema de calor a contracorriente. Es decir, su sangre se calienta cuando va de las patas hacia arriba y se enfría cuando desciende, de manera que tienen un mecanismo corporal diseñado para el ahorro de calor.

Sin embargo, sí hay probabilidades de que exista una relación entre el ahorro de calor y que los flamencos se sostengan en una sola pata, ya que muchos de ellos habitan en zonas cálidas y esta conducta es más visible cuando las temperaturas disminuyen. Hablamos de ello en el siguiente apartado.

Otra de las razones que se ha sugerido para explicar por qué los flamencos se paran en una pata es evitar la fatiga muscular y así ahorrar energía. Aunque parezca contradictorio, para estas aves es más cómodo quedarse dormidas apoyadas en una sola pata, o simplemente estar paradas en esta posición, que sobre las dos extremidades. Para ello, deben mantener el equilibrio, lo que genera un mayor gasto energético.

Los flamencos logran mantener una gran estabilidad durante un largo tiempo cuando están parados en una sola pata gracias a la anatomía de sus extremidades. Los ligamentos y tendones pueden bloquearse, manteniendo la extremidad en su lugar, lo que reduce el esfuerzo muscular y permite que el ave permanezca parada y estable, incluso cuando duerme. Este mecanismo en los flamencos es tan peculiar que un estudio^[1] reportó que los flamencos muertos podían mantener de manera pasiva el peso corporal en una sola pata, es decir, sin esfuerzo muscular, similar a un ave viva. Sin embargo, los cadáveres no podían mantenerse de pie si se les apoyaba en las dos patas. El estudio también encontró que cuando los flamencos están sobre una sola pata, tienen un balanceo mínimo. De esta manera, la investigación concluye que los flamencos, al pararse en una sola pata, no tienen grandes exigencias musculares y, por tanto, hay un menor gasto energético.

Aunque faltan más estudios sobre este tema, se ha sugerido que los flamencos, al igual que los mamíferos marinos como las ballenas y los delfines, inactivan solo la mitad de su cerebro mientras duermen. Por lo tanto, pararse en una sola pata y mantenerse totalmente estable sería algo natural y por eso no se caen.

Por último, encontramos que las observaciones indican que los flamencos, cuando se paran sobre una sola pata, pasan aproximadamente el mismo tiempo parados sobre la extremidad derecha e izquierda. Aunado a esto, algunos flamencos viven en aguas bastante salinas y alcalinas, lo que sin duda resulta un medio que puede deteriorar la piel de muchos animales, de modo que al alternar las patas sumergidas en el agua, disminuyen su exposición. A pesar de que el tejido de las patas de estas aves es duro y por tanto resistente, poder pararse en una sola pata les resulta ventajoso.

Durante algún tiempo se estimaba también que los flamencos se paran en una sola pata como un mecanismo de alerta porque si sentían una amenaza podían elevarse en vuelo más rápido. No obstante, esto ha quedado refutado porque ahora se sabe que ocurre lo contrario, estas aves despegan mejor cuando están apoyadas en ambas patas.

Los especialistas en comportamiento de aves coinciden en que estas teorías no son definitivas, y con el tiempo se podrán comprobar o no. Además, probablemente existan otras razones que expliquen por qué los flamencos acostumbren a pararse en una pata, las cuales, también, se encontrarán conforme avancen las investigaciones. Pero si te has quedado con ganas de más, no te pierdas este otro artículo: "Curiosidades de los flamencos que no conocías".

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